Capítulo 15

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Pov Alba

Un ruído hace que salga del sueño tan placentero que estaba teniendo. Me desperezo un poco y tanteo con los ojos cerrados en busca del móvil para apagar la alarma. La apago, abro los ojos lentamente y me topo con la mujer de mi vida. Me dedico a observarla unos instantes. Está tumbada de lado, con el moflete izquierdo aplastado en la almohada, los labios entreabiertos y las facciones de la cara totalmente relajadas. Es guapa hasta dormida. Me rodea la cintura con un brazo y las piernas están completamente enredadas. Le acaricio lentamente la mejilla con las yemas de mis dedos. "Tengo que dejar a Rodrigo, no puedo perder a la chica que me ha enamorado en dos dias." - pienso. Le doy un suave beso en los labios y me incorporo para salir de la cama y preparar el desayuno para mí y para Natalia. Ella gruñe y empieza a buscarme con los ojos cerrados.

- Amor, ya vengo voy a hacer el desayuno.- le doy otro beso y ella hace un gruñidito adorable. Salgo de la habitación y me dirijo a la cocina pero antes de entrar me paro porque Elena está allí. Ella me ve y me sonríe.

- Buenos dias, Alba, qué tal?

- Buenos dias, Elena.- le digo aún fuera de la cocina

- Pero entra mujer y hazte el desayuno.- entro y empiezo a preparar algo- Alba, no te cortes que Nati le ha contado todo a mi madre y mi madre a mí.- me ruborizo y bajo la mirada- Pero no te pongas así, mujer, que nosotras encantadas que por fin alguién haya hecho que mi hermana sea ella misma y no una macarra de barrio. Me voy que tengo clase, Mateo sigue durmiendo en mi habitación, ese niño es un sol.- me acaricia cariñosamente la espalda ya que estoy de espaldas a ella y se va hacia la salida de la cocina

- Gracias, Elena.- le digo mirandola a los ojos antes que salga, me sonríe y asiente para después salir de casa.

Suspiro y sigo preparando el desayuno hasta que siento como alguién me abraza por detrás.

- Buenos días, mi amor.- me susurra y me da un beso en el cuello.

- Buenos días, bebé.- le digo en el mismo tono para después girarme y besarla. Nos seguimos besando  hasta que siento como me apreta el culo por debajo de la larga camiseta que llevo.

- NAT!- le digo riendo mientras me separo de ella y continúo haciendo el desayuno dándole la espalda. Siento que vuelve a la carga y pone sus dos manos en mi culo mientras me deja besos húmedos en el cuello- Nat, qué te pasa?- le digo riendo

-No sé... Me he despertado muy cachonda y como no vamos a hacerlo tengo que descargar tensiones en algo.- me quedo estática tras su confesion, tan directa siempre. Siento como me deja una mordidita en el cuello y salgo del trance

- Nat, entiendo que tengas tus necesidades no tienes porqué esperarme- le digo cabizbaja, ella para su trabajo en mi cuello y me hace girarme para estar cara a cara. Ella ve que tengo los ojos acuosos y me coge la cara con ambas manos.

- Amor, no porfavor.- me abrazo a ella escondiendo mi cara en su cuello y dejo escapar unas lágrimas- Lo siento, pequeña, a veces no tengo filtro y suelto esas cosas sin pensar.- me acaricia la espalda y con la otra mano me acaricia suavemente mi pelo- Cariño, te esperaría toda la vida.- me separa de su pecho para mirarla- Te quiero, estoy completamente enamorada de ti y prefiero estar años sin tener relaciones que tener ahora con alguién que no seas tu. Te amo, me entiendes?- sonrío aún con los ojos mojados y la beso. Nos seguimos besando intensamente, Natalia me sube a la encimera y se pone entre mis pernas. Cuelo mis manos por debajo de su camiseta y le acaricio el abdomen mientras ella hace lo mismo pero en mi culo.

- Te amo.- me da un pico dando por finalizado el beso

- Yo más.-le doy otro pico- Desayunamos?- asiente con la cabeza y desayunamos

Qué más da?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora