Geniecillos

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N/A: capítulo conectado con el anterior.

Harley ya había cumplido dieciocho años. Peter tenía apenas quince años. Y ambos eran un par de geniecillos.

Las revistas estaban llenas de fotos de ambos, juntos, separados, junto a Tony. Tony Stark estaba demasiado orgulloso. El público los adoraba, ambos eran una bomba con el tiempo contado que causaban demasiadas emociones. Peter seguía siendo algo tímido, era fácil darse cuenta lo nerd que era pero aún así tenía a media población femenina gritando por él; en cambio Harley, era todo un galán, pícaro, inteligente y sarcástico chico malo que tenía imán para las mujeres y algunos problemillas.

Cómo fuera, Tony los amaba a ambos y siempre estaba dispuesto a dar la vida por ellos. Recordaba con fastidio aquel día en que un agente de una división "anónima" trató de reclutar a sus chicos. Tony había dado un grito de guerra y les había negado cualquier contacto con sus retoños. Incluso el director de tal división tuvo que intervenir para no quedar como enemigos de Stark. Y es que todo ese asunto de los superhéroes estaba ganando fuerza y Tony consideraba aquello como algo peligroso y no quería que ellos terminarán involucrados de una u otra manera.

La gente se había acostumbrado a ambos jóvenes, así que no era extraño verlos juntos de vez en cuando. Tampoco era extraño verlos discutir hasta por cual era el mejor sabor de los helados, pero, cuidado con aquel que se atreviera a molestar a Peter; todos sabían que un Harley enojado era capaz de desatar una guerra por tal de defender a su hermanito.

Tiempo atrás se habían mudado a Nueva York, a una gigantesca Torre tecnológica que su padre había construido en el puro centro de la ciudad. Dejar Malibú había sido un golpe duro, pero juntos lo estaban superando bastante bien, dado que ahora, Técnicamente Tony solo tenía que subir a un elevador para ir al trabajo, ir lo que se podía decir que el mayor siempre estaba ahí usando lo necesitaran.

Por su lado, Harley estaba por terminar sus estudios. Un embargo, el chico se había negado a dejar a su familia, así que al parecer, se quedaría estudiando a distancia; internet resuelve todo ahora, Tony. Esas habían sido sus palabras.

Peter en cambio se encontraba emocionado por un viaje escolar que había organizado su escuela a Oscorp, pero tenía un pequeño inconveniente.

—Por favor, Haknner, tienes que ayudarme—rogó Peter al rubio que se encontraba inclinado sobre su escritorio, estudiando unos planos.

Haknner, era un apodo estúpido que Peter le había puesto cuando eran pequeños y Tony les reveló sus apellidos anteriores. Peter había hecho el tonto juego de palabras con su nombre y sus apellidos y desde entonces se le había quedado así.

—¿Por qué debo ayudarte?—gruñó Harley en respuesta.

—Porque sabes cómo es papá y no me dejará ir a Oscorp—sin querer, Peter se cruzó de brazos e hizo un medio puchero.

Harley sonrió burlón.

—Vives en el lugar más tecnológico del mundo, Peter—dijo Harley—, si yo fuera Tony, tampoco te dejaría ir.

Peter bufó y rodó sus ojos.

—Tu no serías tan genial como Papá, Har—comentó "inocente".

Harley finalmente despegó sus ojos de los planos y mirando a Peter, entrecerró sus ojos.

—No es la primera vez que falsifico la firma de Tony para tus estúpidos viajes, Peter—murmuró Harley de manera "peligrosa"—. No quieras manipularme con tus jueguitos.

Peter infló sus cachetes y frunció el ceño.

—No es mi culpa que tengas un ego más grande que tu cabezota.

Irondad//OneShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora