HÉROE ILEGAL

12

- ¿Acompañarme? – Preguntó incrédula ¿acaso el peli verde se ofrecía a acompañar a una desconocida?

- ¿Te molesta? – Cuestionó expectante, pero logró disimularlo con una sonrisa.

- ¡No! – Exclamó antes de reparar – Digo... no – Intentó disimular su nerviosismo.

Ambos comenzaron a caminar rumbo al departamento de la heroína, el silencio era agradable, pero Izuku decidió acabar con él.

- ¿Puedo hacerte una pregunta? – Interrogó mirándola fijamente.

- Si – Cedió ante aquella mirada esmeralda ¿siempre había tenido esos ojos tan lindos?

- ¿Por qué te hiciste heroína? –

La cuestión fue un balde de agua fría para la castaña ¿cómo explicarle que fue por dinero?

- Bueno... yo – Intentaba decir con un leve tono carmín en las mejillas.

- No tienes que decirlo – Tranquilizó riendo.

- Está bien... la verdad es que me da algo de pena admitirlo – Confesó sin establecer contacto visual.

- ¿Conocer hombres atractivos? – Intuyó riendo el pecoso.

- No ¿Quién sería un héroe sólo para ser popular con el género opuesto? – Interrogó con el ceño fruncido.

- Grape Juice en una entrevista lo admitió – Argumentó haciendo suspirar a la castaña... sólo Mineta era capaz de admitir esas cosas.

- No... - Su tono sonaba nervioso – Me hice heroína por el dinero... - Izuku esperaba una respuesta así. – Mis padres han tenido algunos problemas y yo quería darles una vida tranquila... - Admitió esperando que el peli verde se riera o la insultara por un objetivo tan materialista.

- Me parece una causa bastante noble... - Ahí estaba él, descolocándola por su forma de pensar ¿acaso querer conseguir dinero era algo noble? – Me refiero a que te preocupas por tus padres – Una dulce sonrisa surgió en los labios de la castaña.

- Gracias – Susurró por lo bajo.

- Es la verdad –

Continuaron con su camino hablando de temas triviales, como el clima, la comida del restaurante y alguno que otro tema respecto a los héroes, para suerte del pecoso, Uraraka conocía algunos dentro del Top, en especial al segundo...

- ¿Cómo conociste a Kacchan? – Preguntó bastante interesado ¿cómo alguien como Katsuki había conocido a alguien como ella?

- El y yo fuimos juntos a UA – Comentó con nostalgia. – Siempre me pareció un chico muy altanero y malhumorado... - Una risita salió de aquellos labios captando la atención de su acompañante – En definitiva el tipo de chico con el que jamás saldría, durante un entrenamiento estuve a punto de ser aplastada por una roca, pero él me salvó... - Confesó sonrojada.

- Déjame adivinar... luego lo mirabas mientras la luna estaba de fondo y saltaban de árbol en árbol, después de un tiempo él se volvería Hokague y... - No pudo continuar porque Ochako había comenzado a reír.

- ¿De dónde sacas tantas cosas? – Preguntó divertida.

- Mi madre igual se pregunta eso – Correspondió riendo.

- ¿Siempre has sido así? – Interrogó curiosa.

- No... en verdad antes era muy tímido, en especial con las chicas. – Admitió el pecoso.

- ¿Es enserio? –

- Sí, antes sólo podía hablar con mi madre y la de Kacchan –

- La señora Mitsuki – Nombró la heroína de mejillas llenitas – En algunas ocasiones solía hablar de ti con mucho cariño – Dijo mirándolo.