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¿Por qué siempre alguien debía interrumpirlos? El teléfono de Izuku había sonado, cortando la emoción y la magia del momento.

- Lo lamento - Se disculpó antes de mirar el remitente, eso era extraño... En verdad extraño. - Un segundito cariño - Pidió el vigilante antes de incorporarse y alejarse para tomar la llamada.

Nejire suspiró enojada, eso no era justo, había planeado con ahínco la noche y una llamada había frustrado sus planes.

- ¿Mei?- Izuku respondió a la llamada extrañado.

- Izuku - Respondió la inventora, sonaba agitada.

- ¿Estás bien?-

- Ayuda... - Susurró entrecortadamente. - Subterráneo - Fue lo último que el pecoso escuchó antes de que la llamada fuera cortada abruptamente.

- Mei - Llamó sin obtener respuesta alguna. Ni siquiera lo pensó.

- Izuku - Nejire llamó a su novio con preocupación al ver la manera en la que tomaba sus cosas y se preparaba para salir. ¿A estas horas?

- Regreso en un momento - Explicó sin convencerla.

- Izuku, ¿A dónde vas? -  Preguntó sin obtener respuesta. No le gustaba esa actitud, sus secretos ni el motivo de sus acciones; sí él no quería responder, ella lo averiguaría.

El peli verde llegó hasta un ¿Túnel de metro? Se preparó para entrar al su "guarida" pero tal fue su sorpresa que la hacerlo, no hubiera nada más que una Mei sonriente.

- ¡Mira!- Anunció dejando ver una implementación al lugar, era una escalera de salmón.

- ¿Qué sucedió?- Estaba agitado, había corrido sin parar hasta el lugar... Incluso había olvidado el arco.

- Nada, simplemente pensé en una forma efectiva de hacer que vinieras - Hatsume sonreía como una niña pequeña.

- ¿Acabas de interrumpir mi noche sólo por eso?- Izuku sonaba enojado.

- ¿Acaso era algo importante?- Mei respondió con clara confusión.

- Simplemente olvídalo - Pidió con un suspiro mientras veía aquella escalera de salmón.

- Está bien - Hatsume no sonaba tan convencida. - Cómo sea, ¿Qué opinas?-

- Es algo bastante interesante - Aquella barra en verdad llamaba su atención.

- ¿Verdad que sí?- Mei se emocionó hasta el punto de recobrar uno de sus viejos hábitos... Invadir el espacio vital de los demás.- Tuve la idea después de ver una serie por televisión mientras terminaba algunos bebés- Sería algo normal para el peli verde si no tuviera el rostro de la chica a unos milímetros del suyo.

Estaban tan cerca que apenas lograba pasar alguna pequeña corriente de aire entre ellos, sólo bastaba un pequeño empujón para juntarse... Mei pareció darse cuenta de esto y retrocedió inmediatamente, más que por algún sentimiento, por la vergüenza que le daba volver a parecer tan infantil.

Izuku, mientras tanto, se preguntaba si en algún otro universo, él hubiera conseguido una particularidad, lograr entrar a UA y tal vez, pedirle a Mei que lo ayudase con su traje de héroe. Y si esta clase de situaciones eran similares y cotidianas para ellos. Por alguna razón se imaginó a sí mismo un par de años más joven caminando junto al laboratorio de la clase de apoyo, entonces alguien hacía explotar algo y salía volando cayendo sobre él, era Mei. Se valía soñar.

- A todo esto... Dijiste que la idea la obtuviste de un programa de televisión - La peli rosa asintió. - ¿De qué iba?- Preguntó mientras se alejaba de ella.

HÉROE ILEGALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora