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Nejire miró sorprendida a su novio, ella sabía que Izuku preparaba algo, había percibido aquel olor desde la entrada, nuevamente todo su enojo se esfumó, él sabía que las hamburguesas eran una de sus comidas favoritas, pero verlo en la cocina del departamento que compartían mientras preparaba aquel plato con sus propias manos, quizás fue el calor del momento, la manera en la que el vapor había ocasionado que su camisa se apegara a su cuerpo levemente sudoroso o aquel delantal que tenía la inscripción de “DALE UN BESO AL CHEF” pero todo eso causó que la peli celeste corriera hacia su novio y se abalanzara sobre él, Izuku reaccionó a tiempo para atraparla
entre sus brazos mientras Hado atacaba sus labios en un tierno pero apasionado beso al cual él correspondió.

Kemy había inventado una excusa para decir que había charlado un rato con Izuku y que al final la plática había sido tan interesante que sin querer habían caminado inconscientemente y él sugirió que compraran juntos.

- Bien… Supongo que están ocupadas – Comentó Bakugou mirando a su prometida y la
mujer con la que tenía intimidad. – Las dejaré –

- De hecho… - Kemy sintió un escalofrío al notar la mirada fría del rubio. – Iba a disculparme con Uraraka y las demás chicas porque tengo algo que hacer – Se excusó mientras el rubio ceniza la miraba discretamente.

- Ya veo… - La castaña pareció comprensiva. – Cariño ¿crees que puedas acompañar a Kemy hasta su casa? – Una pregunta inocente salió de sus labios. – Digo, yo aún debo limpiar y explicarles a las demás chicas.

- No te preocupes por eso, puedo irme sola – Utsushimi intentó reprochar.

- No es ninguna molestia – Katsuki tenía el ceño fruncido mientras intentaba forzar una sonrisa.

– Insisto… - Kemy tembló un poco ante aquel tono.

- Bien… gracias cariño – Con un beso y una linda sonrisa Ochako se despidió de él.

Eri tosió para disimular aquella pequeña incomodidad al ver al encapuchado con su heroína besándose con fiereza, un leve tono carmín adornaba sus mejillas.

- Cierto, lo lamento Eri – Izuku soltó a Nejire y se acercó a la chica del pequeño cuerno

- Simplemente no sean tan explícitos – Pidió desviando un poco la mirada, aunque el peli verde juraría haber visto un pequeño puchero en su rostro.

- Perdón Eri – Hado al parecer había salido de su estupor tras el beso.

- No te preocupes, Por cierto… Izuku ¿estabas cocinando? – Preguntó la chica del pequeño cuerno.

- Sí – Respondió el peli verde con una sonrisa.

– Muy bien, ambas por favor lávense las
manos… hoy tenemos hamburguesas para cenar.

La peli celeste y la chica del pequeño cuerno corrieron al lavabo con evidente emoción.

En un estacionamiento aparentemente vació se encontraba un solo auto, a pesar de que no era muy tarde por la noche, en él una pareja se besaba apasionadamente.

- No vuelvas a acercarte al inútil de Deku – Ordenó separándose de su acompañante.

- ¿Deku? – Ella cuestionó incrédula.

- El brócoli con patas – Ella entendió.

- ¿Izuku?- Cuestionó extrañada.

Él asintió.

- ¿Por qué no? – Preguntó enojada

- Porque eres mía – El rubio la besó… y ella accedió sin tan solo decir una palabra.

HÉROE ILEGALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora