La Luz De Mi Vida [Goldfred]

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Antes de empezar, quisiera mandar un saludo a una personita muy, muy especial que es Vale_xhan :3 no me olvidé de ti, linda, te quiero mucho ❤
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—¿Cómo te fue en tu cita de ayer? — preguntó Golden con cierto toque de picardía.

— ¿Qué cita? — preguntó, dando un sorbo a su taza de café, para después dejarla sobre la mesa.

— ¿Cual más va a ser? — dijo Golden, con obviedad — la que tuviste con Fred~ — canturreó juguetón.

— Te equivocas, no era una cita — explicó
indiferente — fue una salida para festejar su cumpleaños. Es un muy buen empleado y se lo merece , además me agrada — la sonrisa de Golden se esfumó, dejando en su lugar una mueca de aburrimiento.

— ay hermano — suspiró — perdona la expresión pero ¿Para qué te haces pendejo? —  soltó. Gold frunció el entrecejo con molestia por el comentario — sabes muy en el fondo que lo que buscas en él no es amistad. Deja de darle vueltas al asunto. Acéptalo.

— Golden, no sé que te hace pensar eso , pero no tengo razones, para buscar otra "cosa" que no sea amistad — explicó con tranquilidad, misma que Golden deseaba tener. — sí, Fred es buena persona, amable , servicial, agradable-

— amistoso — interrumpió Golden , agregando cosas a la lista.

— Amistoso — repitió el albino, dando un asentamiento.

— inteligente

— inteligente —

— lindo — dijo el rubio.

— lindo

— y te gusta

— y me gus- — se detuvo abruptamente. Frunció el entrecejo ante la sucia pero astuta jugada de su hermano.

— ¡¿Ves?! — hizo un ademán con las manos.— yo insisto en que lo pienses — recomendó — aunque, no haya nada que pensar , es decir , se te nota en la cara de baboso que pones  — sonrió de lado. Gold prefirió ya no decir nada. Tomó su taza y bebió de ella hasta terminar el café.

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Se encontraba de nuevo en su oficina. Trataba de mantener la mente ocupada, revisando unos papeles pero por más que se esforzaba no podía.

Las palabras de Golden resonaban en su cabeza, haciendo eco.

Llevaba toda la tarde dándole vueltas al asunto.
Es decir ¿Qué era lo que pensaba de su asistente? Pues como ya lo dijo, que era una persona estupenda, de esas de las que hay pocas. Tenía un gran carisma y una linda personalidad, bueno eso podía juzgar por lo poco que lo conocía. Entonces, no lo conoce realmente.
Pero le gustaría, sí, eso sería fascinante.
Ahora ¿Qué era lo que quería de Fred? Bueno, eso es un tanto complicado y enredoso. Él creía, querer una amistad con el de piel pálida. En verdad que quería eso. Está mal que lo diga pero muy en el fondo, envidiaba la relación que Fred y Joy tenían. Es decir, con ella Fred se expresaba de mejor forma, jugaba con la rubia, le coqueteaba a modo de juego (o eso quería creer) y demás. En cambio con él, siempre utilizaba un tono formal , pocas veces escuchaba su risa, cosa que era una verdadera lastima ya que a Gold le encantaba; a lo mucho le regalaba una sonrisa, pero ¿Quién lo culpa? Es decir ¿Quién se sentiría cómodo con alguien como él? Tan amargado, con una personalidad que aleja a las personas, alguien tan aburrido. Tal vez por eso Fred prefería a Joy , ella que era un amor de persona, una buena chica, amable, divertida y con un encanto natural . Es una lastima que no pueda competir contra ella.
Sacudió su cabeza y frunció el entrecejo ¿Competir? ¡Ja! ¿Pero de qué está hablando?, Fred era su asistente y hasta ahí, no debía interesarse en que fuese nada más que eso.
Pero…le interesaba… bueno, no tanto, sólo un poco.
Debía aclarar sus ideas.
Por último y más importante ¿Qué sentía por Fred?  Sus mejillas ardieron.

— ya basta de idioteces — se regañó a sí mismo. Frunció el entrecejo.— tengo demasiado trabajo como para perder el tiempo en tonterías. — dijo tratando de convencerse, aún con las mejillas coloreadas.

— ¡Con permiso~! — anunció el azabache, entrando con una sonrisa de oreja a oreja.

Gold de sorprendió por la repentina entrada y sus mejillas adquirieron un tono más fuerte, cosa que no pasó desapercibida ante la atenta mirada de Fred.

— ¿Todo bien? — preguntó, dejando los documentos que venía a entregar sobre el escritorio.

— sí

— ¿Seguro? — cuestionó, no muy convencido de la respuesta, se acercó al albino y colocó una mano sobre su frente para verificar si es que éste tenía fiebre.
Cosa que empeoró el estado del pobre ojigris. — parece que no hay fiebre — susurró con el entrecejo fruncido, parecía estar muy concentrado. Se alejó de él y lo miró.

— T-Te dije que estoy bien —  reprochó.

— quería verificar yo mismo de que así fuera — se encogió de hombros. — no puedo permitir que se enferme, por nada del mundo. — decretó — bueno señ- Gold — corrigió rápidamente — sólo venía a traer el informe, con permiso — el albino dio un ligero asentimiento y con eso el azabache se retiró.

soltó un suspiro lleno de alivio. Aflojó un poco el nudo de la corbata que llevaba y se abanicó con el folder que le acababa de llevar el azabache. Tal vez sólo era su impresión, pero en la habitación hacía más calor que antes.

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Gracias por leer.

Toma un pudin
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¡¿Quién quiere Lemmon?! :D okno XD