31

875 96 93
                                    

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Todos habían estado esperando este día, por tres largos meses, pero no más que nuestros protagonistas, después de todo son ellos los que se casan ¿No?

Todos se habían levantado a primera hora para alistar todos los preparativos, desde el salón donde se realizaría la boda hasta el lugar donde sería la fiesta después de esta.

¿Y bien? — dijo el azabache una vez se hubo terminado de arreglar, yendo con su hermano y la chica rubia a la que consideraba su mejor amiga.

Te ves muy bien — dijo Joy, con una sonrisa mientras limpiaba las lágrimas que comenzaban a brotar, con un pañuelo —. Lo siento, es que las bodas siempre me ponen sentimental.

Fred sonrió y se acercó a ella para abrazarla. La chica no se negó y correspondió al gesto con alegría, estrujandolo con todas sus fuerzas.

estoy feliz por ti— le dijo una vez se hubo separado de él.

Gracias

Una sonrisa de lado se dibujó en los labios del azabache.

¿Y tú? — soltó. Esta vez dirigiéndose al joven de cabellos castaños, quién se encogió de hombros.

¿Qué quieres que te diga...?

Fred sonrió.

¿Qué te ves jodidamente bien? ¿Que estoy feliz por ti? ¿Por tu boda? ¿que me llenas de orgullo?...¿Qué?

— con un "felicidades" bastaba

— idiota — masculló.

— También te quiero

[•°•°•]

Gold terminaba de arreglarse.

listo — dijo la chica pelirroja de grandes ojos verdes, terminado de acomodar la corbata negra lisa del albino.

Así es, Janette estaba invitada a la boda.
Cabe mencionar que fue ella quién diseñó los trajes de ambos.

Gold contemplaba su reflejo en el espejo de cuerpo entero que había en la habitación.

Estaba hecho un manojo de nervios...

¿Y quién no lo estaría?
¡Dios, se iba a casar!

Nunca imaginó que eso llegase a pasar.
Siempre creyó que sería el tío soltero, pero con dinero que se la pasa consintiendo a los sobrinos.

Pero al parecer se equivocó y siendo sinceros, qué bueno que fue así.

¿Ya estás listo? — preguntó, Golden, asomándose por la puerta. Gold asintió.

[•°•°•]

Y ahí estaban, de pie frente al altar, tomados de las manos y a punto de casarse.

La ceremonia había empezado hacía ya un rato.

Todos los invitados permanecían de pie.

Joy lloraba de felicidad, mientras Freddy sostenía una caja de pañuelos.

Golden veía con orgullo a la pareja que por tanto tiempo acosó, y que por fin estaban realizando su su sueño.

Y el señor Golden trataba de no quedarse dormido.


Por el poder que me confiere el estado, los de claro unidos en sagrado matrimonio— dijo el hombre, dando por concluida la ceremonia.

¡¿Y el beso?! — se escuchó un grito. La vista del hombre se fijó en ambas chicas que sonreían, con la cámara lista.

Ya pueden besarse —  asintió con una sonrisa, dirigiéndose a los ahora, esposos.

Ambos se miraron entre sí, para después unir sus labios.

Los gritos de alegría de las hermanas no tardaron en escucharse, así como los aplausos de todos los demás y que el llanto de Joy aumentara, así como su dicha por su jefe y amigo.

¡Vivan los novios!

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Fin

Gracias por haber leído de principio a fin.

Espero y les haya gustado la historia.

Por último

Haré un par de aclaraciones, si tienen alguna pregunta o duda acerca de cualquier cosa dígame   ;)

Gracias~

La Luz De Mi Vida [Goldfred]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora