Capítulo 29

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Zack se da la vuelta tan rápido que hasta creí que se dislocaría el cuello. Kerr también me ve y corre a abrazarme. Yo le correspondí rápidamente a él.

—Hola nene—

—¿Por qué te fuiste?— Pregunta.

—Por nada, solo necesitaba un momento para mi— Dije —Ahora ve a jugar, yo tengo que hablar con Zack— Dije.

—Pero... —

—Nada, ve— Dije, él asiente suspirando.

Cuando se va yo sigo caminando hacia ellos pero Zack se me adelanta y corre hasta mi.

—Nissa ¿Cómo estás? ¿Te sientes bien? ¿Necesita algo?— Pregunta preocupado.

—Lo que necesito es hablar contigo— Dije.

—Está bien—

—Zack... —Mi voz se estaba quebrando —¿No soy lo suficiente para ti?— Pregunté con los ojos cristalizaron.

Él pasa su cabeza por la mía.

—Tu eres más que suficiente, soy yo quien no te merece— Dijo.

Suspiré aliviada.

—Claro que me mereces Zack—

Le doy una lamida en su mejilla y nos separamos.

—¿Qué te sucedió?— Preguntó.

—Kara— Le respondi.

Él gruñe y luego me da un lamida por la herida que me hizo. Miramos a un lado y vemos a Kerr jugar con los demás niños.

Luego veo a Hanna quien nos mira desde lejos.

—Ya vuelvo— Le digo a Zack, él asiente y yo camino hacia Hanna quien se levanta al verme caminar hacia ella.

Me siento en frente.

—Hola— Le digo, ella se sienta.

—Nissa, lo siento, no quería que tengas problemas con Zack, yo... — La interrumpi.

—Hola Nissa ¿Cómo te sientes?— Imité su voz —Es broma, Hanna, no importa, yo soy la que se puso a pensar en muchas cosas que no son. Tu solo estabas consolandolo porque yo no sabía lo que que ocurría, tú si—

—¿No estás enojada?—

—No, me alegra que Zack pudiera tener a alguien como tú, eres una muy buena amiga enserio— Dije.

—Gracias Nissa—

—Por nada—

—¡Mamá!— Kerr corre hasta mi con una cachorra a su lado.

¡¿Qué?!

—Hola nene ¿Qué pasa?—

—Ella es Mayka, y quería que la conozcas— Dijo.

—Hola Mayka— Le dije.

—Hola señora—

—Ay llamame Nissa, Mayka, me haces vieja— Le dije.

Kerr se acerca a mi y me hace agacharme para hablarme al oído.

—¿Verdad que es linda?— Me dijo en un susurro.

¡¿Qué?! ¡Se supone que yo soy la única a la que puede decirle linda!

—Si, si, es muy linda— Le Respondí entre dientes —Bueno vayan a jugar—

Ellos se van y Hanna se ríe, pero yo la fulmino.

—Creo que ya no eres la única hembra en la vida de Kerr, Nissa—

—Tu callate— Le dije.

—¿Ese es mi cachorro?— Pregunta Zack acercándose.

—Si— Dije gruñendo.

—Que grande mi campeón— Dijo y yo lo fulminé a él. Zack agacha la cabeza —Lo siento—

Gruñi.

—Ay ya, no te pongas así amor— Me dice y lame mi mejilla.

—Aun no puede tener amigas— Dije.

—Puede pero tu no quieres— Le volví a gruñir y el vuelve a agachar la cabeza.

Hanna se reía de nosotros.

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