MI BEBÉ

ME LLUEVEN LOS BOMBONES

                                     CAPÍTULO 4

Piper

De nuevo al despertar sentí eso besos tan exquisitos y el último término en mi boca que fue el que acepté inmediatamente

-—Mm.. creo que despertó la princesita.  - Me tocó la nariz.

-—No..no del todo necesito más besos. - Dije aún con los ojos cerrados.

Alex empezó de nuevo con sus besitos en mi cara, luego de un rato abrí mis ojos.

-— Pero te falto el último beso. - Terminé de decir eso y la besé en la boca  -  Ahora sí.

Mi mami me cargó yendo al baño a ducharme, me encantaban las duchas siempre amo estar limpia, supongo que lo heredé de mi mamá. La sexy madre que me tocó. Dios mío era tan bella vestida como secretaria cachonda de aquellos vídeos de chicas sucias. Con una delicada falda de tubo, camisa desabrochada hasta la mitad blanca, tacos puntiagudos negros y unos lindos y ya conocidos lentes junto a ese cabello largo.

—¡Ah! ¿Pero que haces Pipes?.  - Tire de su cabello sin pensarlo.

—Disculpa ma, no lo pensé. - Mordiendo mi labio inferior, a lo que ella siguió refregándome.

-— Y.. ¿Qué pasaba por esa cabeza loca?.  - Dice con voz ronca.

-— Es solo que me encanta tu cabe..llo.  -  Expreso nerviosa.

-—Pipes.  - Advierte.

-—Bueno, está bien. - Pinsa Pipes, piensa.... - Pareces actriz porno. - Hablo rápido. Aja eso fue lo mejor ¿No?.

—-¿Qué?, ¿Por qué dices eso?, ¿Sabes lo que eso significa?, ¿Quién te dijo eso?. -  Me dice furiosa y sonrojada.

—Mamá no te enojes solo..no sé que decir.  - Bajo la mira apenada y sonrojada.

-—Solo dilo.  - Me toma con una toalla y me encamina hasta mi cama.

-— Es..que..  - No sabía cómo decirlo así que jugaba con mis manos.  - Ví un vídeo.  - Solté rápido nuevamente.

-—¿Qué tipo de video?- Dice vistiéndome con mi ropa de escuela.

—- De esos sucios. - Digo mirándola a apenada.

-—¿Sucios?. - Frunce sus cejas.

-—Sí, de esos pornográficos.- Me tapo mi cara.

-—¡Qué!, ¿Cómo viste eso?.  - Dice aterrorizada sacando mis manos de mi cara.

—- Unos compañeros en la escuela los veían. - Expresé entrecortadamente sabiendo que le mentía.

—- Dime quienes son para hablar con la directora. - Se paró yendo de un lado a otro con su mano en la frente.

—- ¡No!, Por favor no quiero que se enojen conmigo. - Digo abrazándola.  - Por favor
-  Susurro suplicante.

-—Solo prométeme que cuando vean eso te alejarás.- dice comprensiva.

-—Lo prometo.- cruzo mis dedos.

-—Te creeré. Ven acá, que te haré dos trenzas.
-  Obedezco.

Me encantan sus manos, son tan delicadas que con cada toque me relajo más, pero esa fantasía termina con un " listo".
Bajamos a comer y luego nos fuimos al colegio. Ella tomó rumbo a su trabajo y yo entré a la escuela.

-—¡Niki!.  - Veo a ésta a lo lejos.

-—Chapman. - Saluda ésta una vez cerca. - ¿Qué tal?