-Ya sin rodeos weón...¿Qué te traes con el ruso?
México y Rusia, dos países bastante reconocidos en todo el mundo, dos naciones totalmente diferentes ante cualquiera al que se le preguntara, y sin embargo, dos amigos que sienten algo el uno por el o...
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—Y entonces...¿Rusia puede venir conmigo...? —Preguntó cierto chico mexicano con un toque de incomodidad dirigiéndose a la organización.
El de piel azulada apartó la vista de los documentos que sus manos sostenían para posarla sobre ambos countrys frente a él, este les dirigió una mirada seria y enarcó una ceja ante la pregunta esperando recibir una respuesta coherente.
—Y...recuerdame ¿Por qué Rusia iría contigo?
Los países se quedaron callados y se miraron mutuamente tratando de pensar en alguna excusa lo suficientemente buena como para engañar a la ONU, México sudó frío y cuando estuvo a punto de abrir la boca para decir cualquier excusa pendeja Rusia lo interrumpió.
—Bueno, recientemente México y yo habíamos estado comentando sobre una posible inversión entre nuestros países, he de admitir que me veo interesado en acordar una especie de tratado en la que podamos apoyarnos principalmente de manera económica y en la que ambos podamos vernos beneficiados. Es por eso que me gustaría encontrarme con su presidente y discutirlo de manera pacífica.
México, al escuchar tal respuesta por parte del ruso no hizo nada más que asentir con la cabeza y soltar un «Wow» únicamente para sí mismo.
—Ya veo...—Contestó la organización mientras posaba su vista sobre el mexicano, este solo le sonrió de manera incómoda—En ese caso supongo que no hay problema, pero deberán ponerme al tanto de lo que suceda cuando regresen, no pueden ser más de 4 días, México tiene junta con Estados Unidos el sábado.
El latino bufó molesto ante la última oración.
—Claro, no tardaremos más de cuatro días —Afirmó.
—Bien, entonces supongo que deberán de apurarse, el vuelo sale en un par de horas y no quiero tener que retrasarlo —Dijo ONU mostrando una pequeña sonrisa y relajando su mirada.
—Bueno, gracias —Se despidió el de emblema de águila levantándose de su asiento y saliendo de la sala.
—Спасиб [Gracias] —Imitó el ruso.
—Si, no es nada.
[...]
—¡Weón! ¡¿Cómo qué te vaí a ir?! —Cuestionó cierto chileno con un toque molesto en su voz.
—Si carnal ¿Cómo vez? el Peje me mandó a hablar para hacer no sé que mamadas.
—¡CTM! No me dejes con este pedazo de mierda —Se quejó señalando a Argentina con la mirada, este escuchó el insulto y le miró molesto.
—Wey ¿Qué pedo? —Cuestionó México en un susurro totalmente desconcertado.
—Eh, mejor te cuento cuando regreses —Mencionó volteando su mirada.
