Capítulo 11; "No todos tenemos un final feliz"

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Y lo que nadie quería sucedió, esa misma noche Liam se levantó asustado por los constantes gritos de dolor que mantenía Zayn. Prendió la luz, y corrió hasta su novio, el castaño pudo sentir como su cuerpo ardía en fiebre, lleno de sudor, y de su nariz fluía abundante sangre.

Con mucho cuidado lo tomó en brazos estilo nupcial, siseaba para poder acallar sus gritos de dolor, pero era imposible. El castaño lo miró con pánico al escuchar el gran grito que dio.

-¡Duele Liam, haz que pare por favor!

Lo único que pudo hacer Liam es correr hacia la puerta ambos únicamente con pantalones de chándal puestos sobre ellos salieron así a la oscura calle.
Liam rogaba a Dios que un taxi se apareciera frente a ellos, y milagrosamente este pedido se cumplió, rápidamente Liam le dijo el lugar donde debían ir. En el camino Liam iba acariciando la cabellera de Zayn, tratando de apaciguar sus quejidos pero nada funcionaba, un blanco papel que se iba tiñendo de sangre tapaba la goteante nariz del moreno, hasta que de pronto Zayn ya agotado de tanto dolor cerró los ojos.

-¡No Zayn! ¡Abre los ojos bebé, ábrelos para mí!.- Liam miró al conductor y le golpeó el asiento.- ¡Vaya más rápido por favor!

Al llegar Liam le tiró todo el dinero que tenía al conductor del taxi y sacó despacio a Zayn del auto aún cargándolo, corrió hasta la puerta del hospital mientras estas se abrían, Liam gritó.

-¡Ayuda por favor, ayúdenme!.- Lágrimas corrían por su rostro.

Unas enfermeras llegaron con una camilla y rápido depositaron a Zayn esta, le quitaron el papel manchado de la nariz y le pusieron una máscara de aire, revisaron sus signos vitales y decían palabras raras para Liam, quien no soltaba la mano del moreno.

Las enfermeras comenzaron a correr hasta el quirófano y le pidieron por favor a Liam que no entrara ya que esa sala es privada y el castaño afligido aceptó. Se dio la vuelta para caminar hasta las sillas que se encontraban ahí con ambas manos en la nuca y una gran tristeza pegada en su rostro lo hizo.

Así fue la noche de Liam, llena de preocupaciones y tristeza, después de un momento tan especial para ambos, todo se fue a la mierda.

*****

A la mañana siguiente, Liam sintió un cobertor envolver sus hombros y una presencia al lado suyo, levantó la vista y una cabellera rubia se encontraba a su lado, una voz ya muy conocida para él hablaba por teléfono con ese acento irlandés que tanto lo caracterizaba.

-Sí mamá ya sé que debo ver al primo George, oye espera.. en primer lugar yo vine aquí a ver a Liam.. sí ya sé que tú me das de comer pero.. No madre no estoy siendo egoísta...¡Que no madre!... ¡Una semana! pero no me puedes castigar ya soy mayor de edad... está bien mamá también te quiero.

-Hey Niall, no deberías retar a tu madre.- Dijo Liam.

-¡Maldito bastardo, por fin abres esos ojos!.

Liam y Niall se abrazaron tiernamente al reencontrarse después de tiempo, Liam sonrió por fin al ver a su amigo Niall junto a él.

-¿Quién te dijo que estaba aquí?

-Tu padre, al parecer se entero de lo sucedido con tu novio y me mando hasta aquí, y pues aquí estoy.

-Vaya mi papá te ha mantenido al tanto de todo ¿eh?

-Claro que sí, soy tu mejor amigo Payne y tengo que saber todos tus movimientos.- Liam sonrió y Niall pudo notar las lágrimas contenidas en sus ojos marrones.- ¿Quieres un abrazo de Horan?.- Liam asintió y se acurrucó en sus brazos

Llorando Liam se sentía algo protegido en los brazos de Niall, quien le sobaba delicadamente su espalda buscando reconfortarlo ante esa mala situación que estaban pasando, recordaba como su amigo lloraba unas cuantas noches por Zayn y su distancia que los separaba.

Beside You - Ziam PalikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora