Capitulo 10.

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No puedo quedarme.

La azabache despertó en la mañana como es habitual, la pena de la noche anterior había pasado, se colocó su traje ejecutivo y bajo a la planta alta para comenzar con sus acticidades.

El desayuno ya estaba siendo alistado por orden de Jessie que curiosamente esta mañana había llegado más temprano de la usual, la mujer saludo a su amiga y luego se retiró a su escritorio para comenzar a trabajar.

Tras unos minutos de trabajo alistó unos papeles y fue hacia el despacho de su jefe, al llegar se percató que la puerta estaba entre abierta, la curiosidad le ganó y se asomo para ver que pasaba, era extraño que el platinado dejará la puerta a medio cerrar.

Dentro del lugar estaba este con Adrien, ambos se miraban fijamente y estaban en completo silencio, parecía que el adulto le iba a dar un sermón al joven, pero la azabache no entendía porque.

─Hijo─ rompió el silencio en tono firme ─Te llame aqui para hablar de algo muy serio─ el chico atiende y la mujer se intriga, a que se podía estar refiriendo ─Ya sos todo un hombre, y se que tenes necesidades─ hace una leve pausa ─¿Pero no crees que la señorita Sancoeur es algo mayor para ti?

─¿Papa de que diablos estas hablando?─ se quejo este muy molesto ─Entiendo que estas con un problema pero esto ya se excede, Nathalie es como una madre para mi─ musitó cruzándose de brazos

─Pero no lo es─ réplica ─Los vi ayer, eso no es normal, hijo, puedes tener a cualquier chica, así que no te metas con ella

─Padre─ se levanta ─No puedo creer lo descabellado que sos─ frunce el seño ─Es hora de que despiertes, ¡¡Nathalie esta enamorada de ti, y nos llevamos así porque es tu novia!!─ grito enojado no podía contenerse más, ya estaba harto de que su padre sea tanto tonto y por su culpa la azabache sufra

─Por favor Adrien déjate de bromas─ contesto con semblante tranquilo ─¿La señorita fría y yo?─ se animo a bromear ─Ni en un millón de años─ agrego decidido

Afuera Nathalie no podia creer lo que escuchaba, su pecho dolía y sus ojos se humedecieron rápidamente, dejó caer los papeles y se retiró a su habitación, podía con todo pero no con esto, lentamente sus sospechas se iban confirmando, el no la amaba.

─No digas eso─ mete su mano en el bolsillo de su Jean y saca su celular ─Quería hacerle caso a los doctores pero no me queda de otra─ entra en la galería y busca el video que Alya tomo ─Velo por ti mismo─ reproduce el video y le pasa su celular

En la escena estaba el sentado cerca de aquella mujer de facciones frías, aunque en ese video se veía muy contenta y sonrojada, de pronto este se prepara y saca una caja del bolsillo de su chaqueta, instantáneamente un nerviosismo recorre el cuerpo del hombre, no entendía porque; parecía como si estuviera viviendo dicha escena, que por mas que se esforzará no recordaba.

Nathalie. . .¿Quieres. . .ser mi novia?─ abre la caja y nuestra el collar ─Se que es algo apresurado, y el ambiente cero romántico pero no podía aguantarme─ el video concluye con este besando a la mujer apasionadamente

Un dolor de cabeza intenso invade al platinado este lleva sus manos hacia su cien y cierra los ojos, el joven se acerca hasta su padre y lo agarra ya que este amenaza con caer.

─¿Estas bien?─ pregunto

─S~Si─ respondió, en su mente veía a Nathalie con un hermoso vestido, luego cierra sus ojos con fuerza y la escena cambia, los dos almorzando en un restauran ─No puede ser─ llora ─Me niego a creer esto─ agrego, bruscamente se separa de su hijo y se gira para mirar el cuadro, su cabeza aun dolía ─Te amo a ti, a nadie mas─ grito

─Por favor deja de decir eso─ lo reto ─Mama lleva tiempo muerta, rehiciste tu vida con Nathalie y sos feliz─ suspira ─La estas lastimando─ su corazón se estruja al escuchar eso

─Tengo que hablar con ella─ se aleja y va hacia la puerta ─Si esto es verdad lo quiero escuchar de su boca─ abre la puerta y se encuentra con unos papeles tirados en el suelo─ su corazón late fuertemente y sin saber porque corre hacia la escalera la sube con rapidez y se apresura a llegar a aquella habitación ─Nathalie─ llamo y entro, el lugar era un desastre, ropa tirada por todo el suelo, el patinado se agacha y levanta un collar que había tirado sobre un montón de ropa, era el del video

Automáticamente su mente es invadida por todos los recuerdos que le faltaban, sus doce años perdidos pasaron por sus ojos como si fueran un simple parpadeo; su corazón se estruja y unas lágrimas rebeldes se escapan de sus ojos, este apreta el collar y entra en el baño esperando encontrar a su amada allí, pero todo estaba vacío, resignado el de lentes se gira y baja las escaleras mientras grita el nombre de su asistente desesperdamente.

─Jessie has visto a Nathalie?─ pregunto desesperado

─Acaba de salir, ¿por que?─ pregunta tranquila

─No puede ser─ el hombre sale a la entrada y busca con su vista pero no había señales de la mujer, aun alocado corre hasta la cochera para pedirle a James que lo lleve, y se percata que el auto no estaba ─Por favor no─ se lamento y salió a la calle, buscando desesperadamente una señal que le indique hacia donde se habia ido su novia

Miraculous: Nuestra Vida JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora