Después de un lindo día en el cine con Seba viendo Toy Story 4, El Rey León y Spider-man llegamos a las 12 de la noche y no se quieren ni imaginar la cara que tenía el señorito gruñón cuando salió a recibirnos en la puerta.-¿Que se supone que haces llegando con mi hijo a estas horas de la noche?
-Lo siento, se nos hizo tarde, pasamos de película en película y no nos dimos cuenta de la hora que era.
-No me interesa que estuvieran haciendo, se supone que pasarían solo la tarde fuera y que llegarían para la cena.
-Amor no te enojes- le digo para que se calme.
-¿Que no me enoje?, sabes lo preocupado que estuve todo este rato que, si les había pasado algo, que donde estabas.
-Perdón, ¿sí?, te juro que esto no volverá a pasar
-Obvio que no va a volver a pasar, porque de partida no debería porque haberte dejado ir con mi hijo, ni nos conocemos lo suficiente para que te deje hacerlo, fue un error dejarlo ir, no te quiero ver más, lárgate- fue lo último que me dijo y se dio media vuelta y se fue.
Me quedo anonadado parado en medio de la sala, ¿Qué se cree que soy?, una persona a la que puede tratar como se le dé la gana, ¿un día sí y al otro día no?, si de verdad piensa que conmigo puede hacer lo que se le dé la gana está muy equivocado, puede que sí, que todo sucediera muy rápido y lo entiendo si fue todo muy rápido, tiene razón pero no por eso voy a dejar que me hable como se le dé la gana.
Me doy media vuelta y salgo de esta casa para no volver.
POV Mark
Hoy no ha podido ser un peor día, la verdad es que todo ha estado mal esta semana, desde que recibí esa llamada.
Se suponía que esa mujer no debería de haber vuelto nunca, y menos a lo que volvió, jamás la dejare cumplir lo que quiere, no le daré a mis hijos, ella ya les a echo sufrir lo suficiente como para que ahora vuelva como si nada y deje otra vez mi vida echa un caos, no fue mi intención hablarle así a Alexander, solo me descargue con él y fue lo peor que pude haber hecho, lo he llamado toda la semana desde que lo eche de mi casa y no me contesta ya me estoy desesperando no sé nada de él y Sebastián está cada vez más enojado conmigo por haberlo echado, porque si él escucho cuando lo hice justo estaba despierto y no me había dado cuenta de esto.
Estoy en mi oficina en este momento hablando con mi abogado para saber qué hacer con esa desgraciada, la muy hija de perra me amenazó con contarle a todos que soy gay si no le doy la tutela total de seba y Benja, la verdad es que me da lo mismo que todos se enteren que soy gay pero lo que me da miedo en realidad es como se lo tomen mis hijos ellos aún son muy pequeños para entender este tema y ni quiero que crean algo erróneo, sé que tengo que hablar con ellos sobre esto pero me da temor hacerlo solo y es por eso que necesito saber de Alex siento que con él a mi lado todo será mejor que voy a tener la suficiente confianza de compartir este momento con él ya que me lo ha demostrado con la manera en la que trata a mis hijos, por como mis hijos lo aceptan cuando están con él.
-Mark, MARK, ¡MAARK!
-¿Qué quieres hombre?
-¿Que te pasa que no me escuchas?
-Es que estaba pensando en otra cosa... lo siento necesito hacer algo y después te doy toda la atención que quieras, pero ahora de verdad necesito arreglar unos asuntos - con esto me paso y me voy.
Salgo corriendo del edificio y veo a mi chófer afirmado en la parte delantera el auto hablando por celular, en el momento en que me ve corta lo más rápido y corre para abrir mi puerta para que pueda subirme.
-¿Dónde vamos señor?
Trato de decirle lo más rápido donde quiero que me lleve para que arranque rápido, al momento de llagar a mi destino corro a buscar lo que necesito.
-Sebastián, Benjamín vengan ahora mismo que los necesito y rápido por favor- espero menos de un minuto para que aparezcan los niños y la nueva empleada con Connor en brazos.
-¿qué pasa padre?- sí, desde ahora a Sebas se le ocurrió llamarme padre para demostrar su enfado.
-Necesito que me acompañen a ver a Alexander- digo y la cara de los niños cambia.
No necesito decir nada más para que sebas tome la mano de su hermano y se lo lleve al auto por lo que yo tomo al bebe en brazos y los monto en el carro en cada una de sus sillitas para después poner en marcha a mi verdadero destino.
Después de los 15 minutos que me tomo cruzar la ciudad para llegar a la casa de sus padres que por cierto me la se ya que al estúpido de mi hermano se le ocurrió salir con el hermano de Xander, me encuentro frente a él gran portón de su casa en el que se encuentra un guardia caminado hacia mi así que bajo la ventana de mi lado para poder hablar con él.
-Buenas tardes, ¿a quién desea ver?
-Buenas tardes, busco a Alexander.
-¿Tiene una cita agendada con él?
-Si, se supone que tiene que cuidar a mis hijos el día de hoy y no llego así que decidí traérselos yo- mira a los chicos y estos lo saludan.
-Bueno, pasen a delante.
El portón se abre y piso el acelerador mara volver a frenar varios metros después, nunca me espere a que Alex viviera en una casa tan grande, bueno en realidad no tenía como saber dónde vivía ni varias cosas de él.
Bajo a los niños del auto me encamino a las escaleras, al final de esta ya se encontraba una señora esperando a que llegara a la sima de esta.
-Buenos días, señor el señor Alexander se encuentra en la piscina, ¿quiere que le avisemos que lo quiere ver en otro lugar o prefiere pasar a esta?
-No se preocupe, prefiero yo ir a él, me puede hacer el favor de ver a los niños por unos minutos vuelvo por ellos en unos minutos más.
Me señala por donde queda esta y me voy hacia ella, al llegar a la puerta de vidrio que da a la piscina me quedo pegado al ver esa escena, a mi hombre apoyado en la orilla mirando el agua.
-No te quiero aquí - dice sin mirarme.
-No creo que a los niños les guste irse de esta casa sin verte si se supone que veníamos eso- se ríe y después me mira.
-¿Es en serio?¿usaras esa carta?- me mira con sus cejas alzadas- ¿Cómo han estado?
-¿La verdad? enfadados, Seba no me habla y si lo hace, me dice padre y no papi como antes- digo mirando el piso- él... escucho todo lo que te dije esa noche- digo ahora si mirándolo a los ojos.
-Así que para eso vienes, para que tus hijos te perdonen, bueno te ayudare- se levanta de un salto y camina hacia mí, al estar pasando por mi lado lo agarro del brazo y lo acerco a mí.
-No vine solo por eso también vine a por esto- le tomo la cara y lo beso.
Él se hace el difícil y trata de alejarse, pero yo lo acerco más a mi lo dejo que respire un poco y cuando me va a alegar lo vuelvo a besar y ahora si me lo sigue a gusto y lo disfruta sí que mis manos bajan a su cadera y después a un poco más abajo para dejarlas en esa posición y apretar.
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Mi Sexi Jefe
Novela Juvenil-Hola, vengo a una entrevista con el señor Haynes. La historia es 100% original mia y no se permiten copias o cualquier otra cosa sin antes consultar