¿Y si fuera real? - RIZHENE

Capitulo 4

¡Gracias por leer mi fic!

Asegúrese de comentar, ¡quiero saber lo que está pensando!

Poco después, alguien llamó a la puerta para traer el desayuno. Tamara fue a abrir la puerta e Irene se quedó en la cama. Dejaron un desayuno harto en la mesa y se fueron.

Tamara cerró la puerta y llamó a Irene:

-¡No sé sobre ti, pero me muero de hambre!

-¡Tengo hambre también, pero soy demasiado vago para levantarme! La cama es muy acogedora!

- Hola Cris, ¿eres tú? Tamara dijo, riendo.

-Sí, siempre soy Cris cuando me levanto.

Tamara entonces preparó una bandeja y la llevó a la cama.

-Bueno, puedes parecerte a Cris, pero este desayuno no tiene nada que ver con su tostada. - dijo Tamara y ambos se rieron.

Tamara se sentó junto a Irene, tomó una fresa de la bandeja y dijo:

-Cierra los ojos. - Ella mordió una fresa y besó a Irene.

-Huuummm... ¡Qué fresa tan maravillosa! - Dijo Irene, lamiéndose los labios.

-Verdad. Solo falta un detalle... - Dijo Tamara, tomando la crema batida. Pasó en la boca de Irene y la besó.

-Si... ¡Ahora es aún mejor! Pero déjame probar algo más... - dijo Irene.

Tomó un poco de crema batida con los dedos y la extendió sobre la cara de Tamara. Luego lamió cada parte hasta llegar a la boca. Se besaron una vez más.

-¡Eso es tan bueno! - Dijo Tamara.

Las dos se divirtieron besándose con crema batida y sabor a fresa.

Cuando terminó el "desayuno", Irene se levantó para ir al baño. Cuando Irene regresó a habitación, vio que Tamara estaba mirando su móvil con una cara triste.

-¿Qué sucedió? ¿Algún problema?

-No es un problema, pero hoy tendré que viajar. ¡Y quería tanto pasar más tiempo contigo!

-Oye, no es así, tendremos otras oportunidades. - dijo Irene, sentada en el regazo de Tamara.

-Espero que no tarde mucho... ¡Te extrañaré mucho! - dijo Tamara y la besó.

-¡Yo también! Mejor disfruta el tiempo que todavía tenemos... ¿Qué tal un baño relajante? - dijo Irene, levantándose y dándole una mano a Tamara.

Tamara ni siquiera se molestó en responder. Entraron en la bañera y se sentaron una al lado de la otra, abrazándose. Se miraron por un momento. Hasta que Tamara dice:

-Recuerdo el día que filmamos la escena de la piscina... Nunca me sentí tan nerviosa como ese día.

-¡Yo también estaba muy nerviosa! Se sintió como mi primera vez en un rodaje.

-Pero no creo que nadie se haya dado cuenta, ¿verdad? ¡La escena quedó hermosa!

-Sí, quedó maravillosa ¿Sabías que desde ese día ya no soy la misma? Algo me dijo que había encontrado a alguien especial... - dijo Irene, un poco avergonzada.

-También me sentí así, pero pensé que no era recíproco. ¿Qué tontos somos, verdad? Ocultamos nuestros sentimientos y después de perder a la persona, lamentamos.

-Cierto. De hecho, debería agradecerle por insistir en reunirse conmigo... Lo lamenté y yo no tendría el coraje de haber hecho lo que hizo.

-¡Haría 84 millones de veces si tuviera que hacerlo! ¡Usted es muy importante para mí!

Irene tenía lágrimas en los ojos y no pudo responder. Miró a Tamara a los ojos, le acarició la mejilla y la besó. Tamara respondió al beso de Irene y la atrajo a su regazo. Después de varios besos y caricias, Tamara dijo:

-Así nunca volveremos a salir de aquí...

-¿Quieres que pare entonces?- Preguntó Irene.

-¡No, ni lo pienses! ¡Quiero disfrutar hasta el último minuto! - Dijo Tamara.

-¡Yo también! No puedo imaginar cómo será sin ti otra vez...

-Entonces no piensas en nada ¡Solo bésame!

MUSICA SUGERIDA: COME OUT AND PLAY – BILLIE EILISH