Capitulo 44

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El otro día, Tamara se despertó emocionada, miró a Irene a su lado y sonrió, la besó y la despertó.

-Buen día, amor.

-Buen día. - dijo Irene, somnolienta.

-¿Vamos a levantarnos? Tenemos que irnos en breve.

-Ay, no. - escondió su cabeza en el cuello de Tamara - Por favor, quiero dormir más.

-Durmamos más tarde, amor. Vamos a ducharnos juntas.

-Hum... - Irene besó el cuello de Tamara - ¿Baño con besos?

-¿Por qué no? - besó a Irene - Y otras cosas también. Lo que quieras, mi amor.

-Vamos ahora - besó a Tamara - Porque me dio un impulso incontrolable de bañarme.

-Sé... - besó a Irene - Ven.

Tamara se levantó y le echó una mano a Irene. Fueron abrazadas para el baño. Se metieron juntas en la ducha y se enjabonaron, intercambiando besos y caricias. Luego salieron del baño y se vistieron.

-Wow, Tam. - Irene abrazó a Tamara - Esa ropa tuya se ve increíble.

-Todo para ti - besó a Irene - Siempre.

-Para volverme loca y querer sacarla, ¿verdad? - besó a Tamara - Le encanta provocarme.

-No sería una mala idea. - besó a Irene - Pero, solo tienes que mirarme.

-Voy a mirar  - besó a Tamara - y babear.

-¡Guapa! - besó a Irene - ¡Te amo!

-¡Te amo!

Salieron de la habitación de la mano y encontraron a Chesko.

-¡Buenos días, pelotudo!

-Buenos días, Chesko.

-Buen día. ¿Dormiste bien?

-¡Muy bien! Tuvimos una noche maravillosa.

-No tienes que decirme los detalles.

-Empezó... - Irene cubrió la boca de Tamara.

-Para amor. - dijo ella avergonzada.

-No iba a decir nada grande.

-Bien, porque no quiero saberlo. - Dijo Chesko.

-Iba a decir que comenzó en la cama y terminó en la ducha.

-¡Tam! - Irene la palmeó - Cállate.

-¡Tomatito! - besó a Irene - ¡Te amo!

-¡Te amo idiota! - besó a Tamara.

-Ya llega. - Dijo Chesko - Solo está empeorando. Será mejor que vuelvas a la habitación.

-¡Tonto! - dijo Tamara - ¿Estás celoso?

-¿Cómo no sería? Dormí muy mal, con un gato de compañía.

-¡Pobrecito! La próxima vez que te acuestes con mi papá.

-No gracias. Deja.

-Tomemos el desayuno pronto o llegaremos tarde, Tam - dijo Irene.

-Tomemos el desayuno pronto o llegaremos tarde, Tam - dijo Irene

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¿Y si fuera real? - RIZHENEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora