¿Y si fuera real? - RIZHENE

Capitulo 15

Tamara quería ver a Irene y decidió ir a su casa. No te había advertido antes, pero pensó que no tendría ningún problema. Cuando llegó, la madre de Irene abrió la puerta.

-¡Buen día! ¿Todo bien con la señora?

-Buen día. ¿Bien si, y tú? Entra.

-Todo bien ¿Está Irene?

-Si Está en el dormitorio, puedes irte.

Tamara fue al dormitorio y llamó a la puerta.

-Puedes entrar, mamá.

-No soy tu madre, pero entraré. - Dijo Tamara, riendo.

-¿Qué? ¿Qué haces aquí?

- Vine a verte, ¿puedo? ¿O debería irme?

-Si puedes. Solo me asusto. ¿Enviaste un mensaje y no lo vi?

-No. Tenía muchas ganas de sorprender.

-Muy buena sorpresa. - Besó a Tamara - Lástima que mi madre esté en casa.

-No hay problema, no haré mucho. - le guiñó un ojo a Irene - ¿O pensaste en algo?

-Me encantaría Pero con mi madre aquí, de ninguna manera. - cerró la puerta y le guiñó un ojo a Tamara - Aun así, es mejor no correr riesgos, puede que no me resista.

-¿Está todo listo para mañana?

-Si Me preguntaba qué ponerme. Hay muchos outfits para elegir.

-En realidad no cambias. Llevará la maleta como siempre, ¿verdad? - Dijo Tamara, sentada en la cama.

-¡Claro! Imagina si voy a estar en una pieza todo el tiempo.

-Oh, claro... Como si hubiera un problema. Yo, por mi parte, no me importa eso.

-Yo sé. Pero tampoco lo necesitan. Todo lo que llevas te queda bien. - Se sentó en el regazo de Tamara.

-Te ves hermosa de todos modos. - Besó a Irene.

-Oye, mejor para No respondo por mi mismo.- Se sentó un poco más lejos.

- Está bien. Esperaré hasta mañana. - dijo Tamara y se rio.

-Veo que ya estás entrando en el personaje. Tienes el piercing de Joana.

-Sí Y ya tienes las uñas de Cris.

-Yo tengo.  La forma en que te gusta. - Pasó las uñas sobre el brazo de Tamara.

-¡Para! Sabes que no soy fan. - Dijo Tamara. Ambos se rieron.

-Así que... Ayúdame a elegir el outfit de la noche. Pensé en esa remera aquí, pero no sé qué pantalones usar.

-Hay una que creo que se vería genial. Pero, ya te advierto que tomarás riesgos.

-¿Es cierto? Entonces esto es lo que voy a poner. ¿Cuál?

-Realmente quieres volverme loca, ¿no?

-Estoy aquí para eso. - le guiñó un ojo a Tamara. - Vamos, habla.

- Esto Pero por favor, no te vistas ahora. No me contendré.

-Si es así. La dejaré para mañana. No te desperdiciaré loca por mí.

-¡Ay Dios! He visto que sufriré mañana.

-Prepárate, mi amor. Mañana hablamos. - Dijo y le guiñó un ojo a Tamara.

-Mejor me voy o no puedo dormir hoy.

- Cálmate... No te vayas todavía. Almuerza conmigo.

-Bien. Ya que insistes...

-Ah, te daré tu llave antes de que la olvide. Está bien guardado aquí.