Capítulo 17. ¿Cómo fue su luna de miel?

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- ¿Cómo fue su luna de miel?

- JAJAJAJAJA. Que directa, primita.

- Eres un infantil, Alex.

Dejé el sartén con los huevos en la estufa y miré con los ojos muy abiertos a Tania. Si su abuelo la oye, Toño es hombre muerto.

Verán, considero que la luna de miel es algo visto exclusivamente para tener sexo. (Puedo incluir a Alex y Bruno entre esas personas, a este último lo hubieran visto cuando éramos jóvenes y me entenderían.) Pero yo creo que va más allá de eso. Es el celebrar el comienzo de una nueva etapa de tu vida con quién ahora, es esposo o esposa, es el conocer una parte de tu pareja que no habías visto antes. O bueno, al menos eso era en mis tiempos ya que ahora todos se pueden ir a vivir juntos y no hay lío. Uff, si yo hubiera hecho eso, mi papá me encierra en una torre cuál princesa Fiona.

Además de eso, Bruno apenas había "aceptado" a Toño.

- ¿Qué quieres decir con eso, mija? ¿Toño y tú ya han...? -Moví las cejas intentando darle a entender el mensaje.

- ¿Hemos...? ¡Ay, no! No, abuela. Es que, nunca había preguntado eso, me da curiosidad.

Miré a Alex, el muchacho estaba sentado comiendo galletas que había robado de la alacena.

- Efo ef mentiga, ega y Toho quiegen cuchiplancheag.

- Que no hables cuando tengas comida en la boca, Alex. -Rodó los ojos y tragó rápido- Nada más no te me vayas a ahogar, eh.

- De eso pido mi limosna viejita.

Di un brinco, Bruno se asomaba por la ventana de la cocina. Ventana que daba al patio.

- ¡Por el amor de Dios! Casi me das un infarto -Toqué mi pecho con una mano- te voy a poner un cascabel en el cuello, eres experto en llegar en momentos inoportunos. Y no digas eso de Alex, chismoso.

- ¿Inoportunos? Ah chirrión ¿pues de qué hablaban?

- De cómo Tania y Toño quier...

Cubrí la boca de Alex con rapidez metiéndole una galleta. Mi pobre muchacho casi se ahoga, pero mientras le servía un vaso con leche para que pudiera tragar, Tania aprovecho y habló con un poco de nerviosismo.

- De su luna de miel, Tete, ¿Cómo fue?

Alex tosió un par de veces, mirándome mal. Susurrándole una disculpa hice mi camino a la estufa, los huevos podían quemarse.

- Fue...Bueno, fue un asco, había un mesero en el restaurante del hotel haciéndole ojitos a mi Abby.

- No me hacía ojitos, viejo loco. Era amable.

- Amable mis nachas, ese te coqueteaba abiertamente y tú no hacías nada.

Dejé de remover los huevos y miré a Tania después de rodar los ojos.

- Fuimos a manzanillo...

Nuestros papás habían ayudado un poco para pagar la luna de miel, ya que con la boda, los gastos habían sido algo grandes. Habíamos acordado que no tendríamos luna de miel, pero nuestros papás insistieron y entre los 4 nos ayudaron a pagarla; No sería nada extravagante, solo iríamos a una playita cercana a pasar 4 días.

Nunca habíamos hecho un viaje solos, cabe aclarar. Así que estaba muy nerviosa y emocionada. Iría de viaje, con mi esposo. Se sentía tan bien decirlo, era muy feliz.

- Me duelen las pompiiiiiis.

- Bruno, ya casi llegamos. -Me acomodé mejor en el asiento del camión donde íbamos, como dije, esto nos habían ayudado a pagarlo nuestros padres.

Porque si no preguntas, no respondo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora