A raíz de una TRAICIÓN

#22 Secreto que mata

El auto paro en la entrada de una vereda, si llegaba con el auto sería fácil de detectar, pensó Naraku bajando y caminando por la calle polvorienta, avanzo sigilosamente entre árboles, decidió entrar por la parte de atrás para evitar ser visto con facilidad.

-maldita sea Bankotsu manchaste todo de sangre- escucho decir a Inuyasha y lo vio jalar el cuerpo hasta la cocina, donde lo dejo y lo escucho subir.

Apretó los puños por lo visto, una vez que ya no escucho pasos, abrió lentamente la puerta y entro, se acercó donde Bank se encontraba, lo vio bañado en sangre, con los ojos cerrados, se arrodillo a su lado y verifico el pulso, este era muy lento, el moreno apenas abrió los ojos al sentir el contacto.

-Ki... Kikyu… arriba- murmuro contrabajo.

-debo llevarte a un hospital Bank, estas muy mal- dijo Naraku preocupado por el joven ojiazul.

-no… sal… va... la - murmuro y quedo inconsciente.

-maldición Inuyasha- dijo entre dientes.

-no te gusto HERMANO- menciono Inuyasha y le dio una patada a Naraku en su costado.

Esté lanzo un grito por el dolor causado y termino sentado golpeándose con la meseta, se agarró las costillas y se obligó a levantarse, Inuyasha estaba enloquecido podía verlo en su mirada.

- ¿Qué has hecho Inuyasha? Ahora serás un asesino- dijo Naraku.

-no me importa si tengo que matarlo o a ti, al fin de cuentas no me importa en absoluto sus míseras vidas- exclamo Inuyasha.

-él era tu amigo- le grito Naraku.

- ¿amigo? Bueno pues mira que miarda de gente tengo a mi alrededor, hermano y amigo enamorados de la misma mujer- rio Inuyasha al ver la cara de sorpresa de Naraku- no lo sabias, ese- apunto a Bank- ha amado por años a Kikyu, lástima que ella ahora lleva en su vientre a mi hijo.

-esa es una mentira- dijo Naraku- ella jamás tendrá un hijo tuyo.

-después de las cogidas que le he dado a la zorra, dudo que no lo haga- dijo arrogante Inuyasha.

-te dije que nunca vuelvas a tocarla- exclamo Naraku y se lanzó sobre Inuyasha.

De una tacleada lo aventó al piso de la sala, donde le golpeo la cara sin parar, este logro empujarlo, enseguida ambos se pusieron en pie, mientras sus puños chocaban sin parar, el ruido, llamo la atención de Kikyu.

-no sabes cómo me hundí en ella, mientras gemía por mis caricias- Se burló Inuyasha y recibió un golpe en la boca, la sangre cayo por ella.

Un golpe más en el estómago le saco el aire, este se dobló, aprovechando ello Naraku le golpeó la cabeza y lo hizo caer al piso, donde le dio una patada en su costilla, Inuyasha se revolcaba de dolor, mientras tanto Naraku subió por las escaleras.

- ¡KIKYU! - grito desesperado- ¡KIKYU!

- ¡NARAKU! -respondió está pegada a la puerta.

- hazte para atrás- le dice, patea la puerta con tal fuerza que cede y se abre.

POV NARAKU

¡DATE POR MUERTO INUYASHA!!!

Después de un mes por fin la veía de nuevo, estaba irreconocible, esa no era mi Kikyu, apreté los puños, avance a ella, pero solo retrocedió, la vi temblar y sus preciosos ojos amielados se humedecieron, verla tan vulnerable me partió en dos.

-estoy sucia- susurro- no, podría dejar que me tocaras después de todo lo que él hizo.

-y disfrutaste querida- menciono Inuyasha detrás de Naraku.

Naraku se apresuró y se paró delante de Kikyu, miro a Inuyasha con rabia, esté elevo el arma directo a la cabeza del peli ondulado.

-de nada servirá que me mates- dijo Naraku viendo a su hermano con pena.

-no me importa que ella no me ame, eso es lo de menos- rio Inuyasha.

-Inuyasha jamás podrás ser padre- soltó Naraku- eres estéril.

Era cierto, Inuyasha tambaleo por la impresión, el segundo de distracción sirvió para que Naraku le quitara la pistola de la mano, lanzándola lejos de ellos, Inuyasha cayo de rodillas con las manos en la cabeza, sacudía con desesperación su melena plateada, tratando de borrar esa maldita verdad, él lo sabía, pero no estaba seguro, sus recuerdos eran vagos, era tan pequeño, pero recordaba a su padre Inu no llorar en los brazos de su madre por aquello.

-mi hijo no será nunca un verdadero hombre- decía su padre.

-no digas eso, amor él es un niño y será un hombre-respondió la dulce mujer.

-nunca sabrá que es tener hijos- murmuro entre lágrimas- ninguna mujer lo querrá.

Y eso marco su vida, las palabras de su padre, se tatuaron en su mente, ninguna mujer lo querrá, entonces para que amar, no entendió entonces, pero después, en la escuela militar, las palabras retumbaron en su cabeza, sin estar seguro, sin saber de la razón, su mente se programó para mantener a raya a todas las personas, vivir por él, así tuviera que pisotear a quien sea. Tal vez un psicólogo dijera que el poder que tanto deseaba fuera para compensar su limitación.

-no voy a dejarte ser feliz con ella- menciono parándose con los ojos llenos de furia- ella es mi esposa, te guste o no.

-ella me ama- respondió Naraku- y yo también.

Ambos se volvieron a agarrar a golpes, esta vez Naraku no se midió, la visión de Kikyu en tal estado lo habían afectado mucho, despreciaba a ese que llamaba hermano, su mano cayo una y otra vez en la cara de Inuyasha, quien reí desquiciado sin importarle el dolor o la sangre que empezaba a surgir.

POV KIKYU

Estaba paralizada, mirando a ambos hombres golpearse sin piedad, mi mente se fue a esos días meses atrás en que era feliz viviendo en la mansión de los Taisho, cuando compartía en ocasiones el desayuno, el almuerzo y la cena con su esposo, ese quien siempre estaba deseoso de sexo, ese a quien una vez amo tanto, ¿Cómo todo había terminado así? ¿Cómo había acabado sin cordura? El elegante, arrogante y distinguido INUYASHA TAISHO había caído bajo.

Si tan solo, él, nunca la hubiera engañado, si Kagome no se hubiera metido entre ellos, ella nunca habría conocido a Naraku, esta disputa nunca se hubiera dado, tal vez juntos habrían llegado a un acuerdo que beneficiara a todos, pero maldita sea la hora en que él decidió que ella no era la mujer perfecta en su vida, tenía que acabar de una vez con esto, porque Bank también había sufrido, y todo A RAÍZ DE UNA TRAICIÓN.

Mientras esos dos se daban de golpes, patadas y palabras, ella se agacho a tomar el arma, su mano temblaba al pararse con ella en mano.

-alto- susurro- ¡ALTO!

Ambos hombres se soltaron y separaron al ver a Kikyu con el arma en la mano.

-no me hagas reír querida- dijo con dificultad Inuyasha- acaso piensas dispararme.

-Kikyu no lo hagas- abrió grandes los ojos Naraku.

-TE ODIO INUYASHA-murmuro y lo miro fijamente con dolor en los ojos- JAMÁS TE PERDONARE.

-mátame- reto Inuyasha-zorra infeliz.

EL DISPARO SONO TAN FUERTE QUE LAS PALABRAS DE INUYASHA NUNCA SE LLEGARON A ESCUCHAR.

Continuara…