V E I N T I T R E S

139 14 0
                                    

Llegamos a la entrada y nos piden la invitación, luego podemos entrar. Siento mi celular vibrar, así que lo saco.

Numero desconocido: Rodrick esta aquí.

Me quedo quieta, estatua, en shock.

Fleming esta aquí, y quien sabe que podría decir de nosotros.

-Elizabeth -me llama Tory- ¿estas bien?

Levanto la mirada del celular y con dificultad asiento.

Mi celular de nuevo vibra, pero decido ignorarlo y sigo con mi familia.

La fiesta se celebra en la parte trasera de la casa, y cuando llegamos al patio ¡Dios mio! Esto es monumental, hay mesas por todo el lugar, unas mas grandes que otras, por la parte del bosque hay mesas del bufette con meseros tras de estas. Una amable señora se acerca a nosotros.

-Vengan, por aquí esta su mesa -nos sonríe y mi familia comienza a caminar, voy a hacer lo mismo, pero siento una mano que toma la mía, así que me volteo.

Se me escapa un suspiro y siento que pierdo el control en mi cuerpo, allí esta Jordan con un traje azul oscuro, tiene un chaleco plateado y una corbata negra; lleva un extraño antifaz que cubre la mitad de su rostro, sus labios, su barbilla, y la mitad de arriba queda a la vista, sus preciosos ojos.

-Ven -el sujeta con mas firmeza mi mano, así que yo me agarro bien a él y lo sigo. Llegamos a su grandiosa habitación y allí él tira sobre la mesa de centro su antifaz.

-Estas impresionante -digo en un suspiro, esto parece gustarle porque me sonríe.

-No mas que tu -parece pedirme permiso, el cual le doy, y sus ojos me recorren completamente-, mi hermano tiene buenos gustos.

Siento que me sonrojo, así que dejo de mirarlo a los ojos y miro la mesilla en la que hay tres cajas, una grande, la otra solo un poco mas pequeña, y la ultima es del tamaño del cofre en el que entregas un anillo.

-¿Qué son?

-Lo que vas a usar -me sonríe-, no tengo tan buen gusto como mi hermano, pero siento que es mas tu lo que hay ahí, ademas de que los colores... digamos que favorecen la situación -me guiña un ojo y siento que me voy a desmayar.

-Claro -le devuelvo la sonrisa. Recojo todo y me dirijo a su armario, siento como su aroma me rodea y lo aspiro. Me deshago de mi vestido negro y abro la caja, dentro hay un vestido azul rey totalmente opuesto al que llevo, deja mis hombros al aire, pero es recto en vez de en corazón y en la parte de arriba tiene algo de encaje. El encaje baja por mis brazos hasta mis muñecas, es pegado hasta la cintura y toda esta parte tiene igualmente encaje sobre la tela azul, luego cae la falda hasta el suelo tapando mis pies.

En la otra caja, la mediana, encuentro un antifaz, igual al de Jordan. Y en la ultima encuentro unos lentes de contacto azules... 

Tomo los lentes y camino hasta la puerta que une el cuarto con el baño, y allí en el espejo me coloco los lentes, que para mi sorpresa son recetados. 

¡Dios! Se siente como si me hubiesen echado un hechizo, es fantástico ver claro. 

Recojo el antifaz y salgo, y para mi agrado es ahora Jordan quien suelta un suspiro.

-Estas preciosa -me sonríe-, y te vez mas como... tu.

Le devuelvo la sonrisa.

Veo que tiene algo en la mano y me lo extiende, son unos zapatos que combinan a la perfección con mi vestido, y cuando me los pruebo descubro que son mucho mas cómodos que las sandalias.

SwirldaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora