Parte 19 - Cayendo

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Aldrich, quién una noche antes había podido nuevamente contactar con Ethan partió desde la mañana en busca de todos sus amigos para reunirlos, debía darse prisa, pues la carroza que iba a transportar a Moon saldría en poco tiempo.

No demoró mucho en llegar al lugar donde la peliblanca se hospedó durante una noche, se negó rotundamente a permanecer en el hogar de Ethan luego del incidente y tras la supuesta muerte del mismo.

Parecía que era una especie de parada en Dokuro, aunque claramente no la había visitado porque jamás tuvo la idea de salir de allí, sin embargo, había mucha gente, demasiada desde su criterio ¿Acaso estaban huyendo? No lo sabía con certeza, pero ese no era su objetivo en ese momento, sino dar con la peliblanca antes de que fuera muy tarde.

-Disculpe, con permiso, voy a pasar- Todo el rato estuvo tratando de evitar a las personas, pues de verdad había demasiada gente allí. Aldrich no era alguien a quien se le dificultara encontrar a alguna persona por su gran habilidad y concentración mental, pero en ese momento tenía tantas cosas rondando su cabeza que no podía concentrarse para encontrar a Moon.

De pronto, cerca del final, pudo verla allí. Definitivamente era ella, un poco diferente a decir verdad, pues parecía que se encontraba usando un atuendo masculino, o al menos, así se veía para aquella época.

Tenía una cara de pocos amigos mientras esperaba allí, pero Aldrich no debía demorar ni un segundo, tenía poco tiempo para explicarle lo que sucedía pues, además de encontrarla a ella, debía reclutar al resto para pensar en algo que hacer para traer nuevamente a Ethan.

Se acercó hacia ella, Moon al verlo cambió completamente su expresión, parecía que se alegraba de verlo.

-Hey, ¿Qué tal todo?- Preguntó Aldrich, de igual forma estaba contento de nuevamente verla. -Tengo noticias para ti, pero debes evitar irte en ese transporte-

-¿Ah? ¿Qué noticias exactamente?- Moon se veía ahora confundida, debía tener una muy buena razón para tratar de evitar de que ella se fuera.

-Es Ethan, él está bien-

Los ojos de Moon se quedaron abiertos y paralizados por unos momentos, el silencio se prolongó unos minutos entre ambos y fue tan inmersivo que ni siquiera el ruido ajeno de las personas que había allí les irrumpió.

Moon solo se mantuvo callada por unos momentos, bajó lentamente la mirada y sus labios balbucearon un poco y comenzaron a temblar, así pasó unos segundos para después violentamente levantarse hacia Aldrich tomándolo con fuerza del cuello de su atuendo, pero sin subir aún la mirada, claramente vio como la peliblanca estaba presionando sus dientes.

-Dime que no es una broma- Pronunció Moon con una voz claramente más seria.

-No lo es, hay mucho que explicar, pero tenemos que ir por los demás, hay que encontrar una manera de traer nuevamente a Ethan-

Moon se tomó unos segundos en silencio pensando, por su mente pasaba la pregunta de "¿De qué lugar habría que sacarlo?", pero lo importante es que aún se encontraba allí, perdido en algún lugar quizás, pero seguía ahí.

-Vamos- Ella aceptó, contaba con suficiente presupuesto para tomar otro viaje si eso no resultaba, pero confiaba en lo que el castaño le decía, además, definitivamente quería buscar nuevamente a Ethan.

Ambos se dirigieron con velocidad hasta el hogar de Ethan, quien ahora habitaba allí era nada más y nada menos que Gherman, pues Víctor no volvió a ese lugar y todos juntos presenciaron como Ethan dejaba aquel mundo.

Los ojos de un hombre muertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora