[8 de Octubre, Jueves]
La puerta se abrió y un moreno sudado y con la respiración irregular irrumpió en la comisaría azotando la puerta con fuerza la cual chocó contra la pared dejándola algo abollada, miró a su alrededor con rapidez y nerviosismo, pero se serenó al ver esa pequeña figura de ojos lagrimosos mirándole como si fuera lo más importante en el mundo, o por lo menos en el mundo del rubio.
Dean se levantó del asiento y corrió hacia William dejando caer la chaqueta, aunque no le importó demasiado, el más alto abrió los brazos esperándolo y ambos se unieron en un fuerte abrazo. Dean lloraba desconsoladamente mientras el otro acariciaba su espalda y hundía una de sus manos entre sus cabellos.
- Ssshhh ya pasó - Intentaba calmarlo pero él sin quererlo dejaba escapar lágrimas de alivio, había estado tan preocupado por él que verlo sano y salvo le produjo una satisfacción inmensa.
- Lo si..ento muc..cho - Lloriqueaba el pequeño, William lo rodeaba entre sus brazos para calentarlo, era consciente del frío que debía de haber pasado y de los pequeños espasmos que tenía - No es tu culpa, ya todo está bien - Ambos quedaron de rodillas en el suelo mientras se abrazaban con fuerza el uno al otro.
- ¿Sabes? Mientras estabas perdido he estado pensando y ya sé lo que me gusta de ti - Dean, aunque aún hipaba por haber estado llorando, se serenó un poco y le miró a los ojos.
- Me gusta que seas frío, tu sarcasmo, que seas taaan distraído, lo gruñón que te pones a veces, cuando comes con ansias y se te cae algo en la ropa, cuando me quitas la manta por la noche y me entra frío, también cuando maldices al agua de la ducha por estar muy fría o muy caliente o cuando te enfadas - El rubio fruncía el ceño confundido, todos esos son sus defectos, y él no le entiende - Pero también me encanta cuando sonríes, te ríes, te sonrojas, cuando hundes tu cara en mi pecho para que no vea que te has avergonzado, cuando cedes y me das la mano, cuando me abrazas, o cuando te quedas mirándome por las mañanas - Dean lo miraba con esa chispa en los ojos, estaba emocionado.
- Sabes, creo que me gusta todo de ti, las cosas buenas y la malas, así que si tuviera que elegir una cosa que me gusta de ti tendría que decirte a ti entero - El moreno con su pulgar apartó las lagrimillas que quedaban en sus mejillas y plantó un tierno beso en sus labios que lo hizo enrojecer - ¿No vamos a casa? - Preguntó con una sonrisa radiante, Dean le imitó y asintió con la cabeza más feliz que nunca.
- Nos vamos t..¡Julie! - Gritó William avergonzado al ver que su tía los estaba grabando - Es para tus padres... y tía Sara, tío Gabriel, Daniel, Fran, Hayden.....¡Y para mí! - William suspiró con fuerza y ayudó a Dean a levantarse, se quitó la sudadera y se la puso a Dean pese a que le quedaba bastante grande.
- Sube - Se agachó frente a Dean indicándole que se subiera a su espalda, Dean lo pensó por un momento y terminó accediendo, estaba agotado. William lo sujetó por los muslos y se fueron camino a casa mientras Dean se acomodaba en la espalda de su novio en pruebas con una sonrisa en la cara.
Cuando llegaron a casa Dean se había quedado dormido en su espalda y todo el mundo, pese a estar muy aliviados de que estuviera bien, se quedó en silencio o susurró para no despertarlo - Papi ¿te importa subir a mi cuarto la cena de Dean? - Susurró el adolescente y Jack asintió en respuesta.
Llevó al que estaba dormido al baño de su habitación, se lo sentó en las piernas y comenzó a desvestirlo pese a que Dean se quejaba entre sueños. No se atrevió a quitarle los bóxers por vergüenza aunque ya había visto su miembro anteriormente y que ambos eran hombres.
Llenó la bañera de agua caliente, y William se desvistió como pudo cuidando que Dean estuviese cómodo. Cogió al rubio en brazos y se metió con él en la bañera, Dean entreabrió un poco los ojos al contacto del agua caliente.
- ¿Will? - Murmuró frotándose los ojos con la mano quien estaba tumbado bocarriba sobre el mayor - Estoy aquí - Este con la mano mojada acarició su mejilla dejándola caliente - ¿Ya estamos en casa? - Preguntó somnoliento y se movió un poco estirándose - No te muevas mucho - Dijo William con urgencia sujetando el cuerpecillo de Dean - ¿Por qué? - Preguntó el otro inocentemente, el otro rió incómodo.
- Mmm, ¿sabes encima de qué estás sentado? - Dean miró debajo suya y contempló en cuerpo de William, fue bajando su mirada y comprendió de repente, se puso muy rojo, quiso levantarse de inmediato pero el otro lo pegó a su cuerpo - No pasa nada, no seas tímido - Susurró en su oreja y depositó besos en su cuello con cariño, Dean comenzaba a coger calor con rapidez, aún así se sentía a gusto y echó la cabeza hacia atrás entregándole todo su cuello.
Sus besos se volvían más húmedos y Dean exhalaba el aire extasiado llegando a soltar pequeños gemidos que William disfrutaba y recibía con gusto. Giró a Dean para quedar frente a él tumbado sobre su cuerpo, ahuecó su cara con las manos y le besó con pasión mientras frotaba su miembro con el del otro.
- W..ill - Jadeó el rubio pegándose a su cuerpo al punto de parecer que fueran a fusionarse, recorría con sus manos la ancha espalda del moreno y movía inconscientemente sus caderas sobre el miembro duro del del abajo.
William entonces se separó, empujó suavemente a Dean y salió de la bañera con los bóxers abultados - ¿Po..Por qué paras? - Preguntó Dean con excitación aún en la bañera. El otro no le respondió y salió del baño con una toalla enredada a la cintura. Dean le siguió aún con los calzoncillo empapados mojando el suelo a su paso.
- William - Dijo tocando su espalda con delicadeza, sus músculos se contrajeron - ¿Estás bien? ¿Por qué has parado? - Este se giró y miró a los ojos del más bajo - Paro ahora porque después no podré hacerlo - Dean arrugó la frente confundido - No quiero hacerte daño - Dijo y se sentó en la cama con la cabeza apoyada en las manos.
- ¿A qué te refieres? - Preguntó aún sin saber lo que estaba diciendo.
- ¿Y si...Willem sale?
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Dean (+18 - Gay)
RomanceUna vez que descubres qué es estar acompañado por muy solo que hayas estado toda tu vida ya nada volverá a ser como antes. Lo necesitas a tu lado, te sientes lleno, así se sentía Dean cuando vio por primera vez al moreno. Segunda parte de "Te odio y...