Dean (+18 - Gay)

Cap 19 - ¿Tú eres...?

[21 de Diciembre, Lunes]

No sabía qué hacer, tenía a la morena pegada a su boca en un gesto tanto dulce como cargado de sentimientos. Él no podía simplemente apartarla porque sabía que la lastimaría, pero tampoco podía seguirla porque eso sería darle falsas esperanzas y serle infiel a su novio. ¿qué podía hacer?

De un momento a otro ella ya no estaba, se encontraba tirada en el suelo y William estaba allí de pie con el brazo en alto.

- ¿Qué coño haces Amelie? - La miró con crueldad desde arriba mientras ella seguía tirada en el suelo agarrándose la barriga - ¿Estás bi....

- ¿Qué coño haces tú? - Exclamó el otro furioso mientras corría a ayudarla - ¿Cómo eres capaz de pegarle a tu propia prima? - Preguntó con los ojos húmedos, la violencia no me gustaba nada.

- Ella no es mi prima y nunca lo será - Sentenció, se podía escuchar a Amelie comenzar a sollozar - Y dejó de ser mi amiga cuando besó a mi novio en mi puta cara.

- Pero no es motivo suficiente para que le pegaras - Murmuró mientras la ayudaba a levantarse - Esto no me lo esperaba de ti William - Dijo decepcionado y se marchó junto con Amelie para ir a la enfermería.

Todo el camino hacia la enfermería Dean estuvo pensando es cuánto miedo le había producido ver a su novio con la mano en alto, a él nunca le había pegado pero, ¿y si lo hacía en el futuro? Él no quería que nadie más le pegara, ya había tenido suficiente con aquel monstruo como para tener que enfrentarse a otro, no podría hacerlo.

William era su único apoyo, el único que se fijó en él, el único que lo ayudó a salir de esa mohosa casa, el único que le dio cobijo a él y a su hermano. En este momento el morena lo era todo para él, no podía simplemente perderlo, debía hablar con él.

Pero por supuesto debía de encargarse de Amelie primero, debía de llevarla a la enfermería y rechazarla de una vez por todas antes de que ocurrieran más problemas.

Cuando llegaron a la enfermería él la ayudó a sentarse en una camilla mientras esperaban a la enfermera.

- Como duele - Se quejó mientras se hacía un ovillo.

- Sabes que te está bien merecido, no debería haberme besado cuando sabes perfectamente que tengo pareja Amelie - Dijo él serio mientras ella agachaba la cabeza.

- Pero Dean, yo te qui - La corté-

- Lo sé, pero no puedo corresponder tus sentimientos, mi corazón ya se lo di a otra persona y lo sabes, lo siento - Aclaró y se fue de la enfermería, aún tenía cosas que hacer.

Lo estaba buscando cuando tocó la campana que marcaba el comiendo de las clases, mierda, sin más remdio, tuvo que ingresar a la clase, ese día él y William apenas compartían clases juntos.

Llegó la hora de la comida y no le vio por ninguna parte por más que le preguntó a todos sus amigos, ¿estaría molesto? Las últimas clases su estado de ánimo estaba por los suelos, no quería enfadarse con él ni mucho menos que dejaran de hablarse por lo que había ocurrido.

A la hora de la salida fue corriendo hacia la puerta para llegar el primero y esperó a que el moreno saliera con nerviosismo, al cabo del rato se preguntó si se habría ido a casa, pero no quería rendirse, esperaría hasta que saliera la última persona.

Entonces lo vio, solo y distante, andando a paso rápido para intentar pasar desapercibido de sus ojos.

- ¡Will, espera! - Gritó corriendo hacia él hasta llegar a su lado - Hablemos, por favor - Le pidió jadeando por la reciente carrera.

- No tengo nada que hablar contigo - Sentenció, le dio un escalofría por toda su columna vertebral.

- ¿Por qué estás enfadado? El que debería estar enfadado debería ser yo - El otro se giró, le dio una mirada de odio y siguió caminando.

- ¿Tu enfadado? ¿Por haberle pegado a tu novia? Lo siento su alteza - Dijo exasperado con tono irónico.

- ¡Ella no es mi novia! - Exclamó cada vez más nervioso.

- ¿A no? ¿Y por qué no la apartaste cuando te beso? ¿Acaso te estaba gustando o que? - Estaba claramente furioso y eso a Dean no le gustaba nada.

- Yo...no quería lastimarla - De nuevo volvió a girarse con el ceño fruncido y la vena de su cuello hinchada.

- ¿Preferías lastimarme a mí? - Dijo con voz profunda y entró a su casa.

Dean se quedó allí plantado, pálido y con los ojos húmedos, en ese momento se había centrado tanto en ella que no pensó en él, la persona más importante de su vida, la había cagado bien grande.

Tras unos minutos entró a la casa decidido a pedirle disculpas, pero, tras abrir la puerta, se quedó quieto mirando confundido al interior de la casa, no sabía si debía entrar o quedarse allí parado.

Un señor un tanto mayor con el pelo rubio se encontraba de espaldas a él mientras hablaba animadamente con Jack, el padre de Will. Nunca antes había visto a ese hombre y era raro porque casi nunca recibían visitas, ¿quién era?

Aún no le habían visto, y pensó en escabullirse hasta el cuarto de William sin que lo vieran. Como lo hicieran iba a tener que esperarse para disculparse con su novio y no quería que eso pasara, quería solucionar las cosas cuanto antes.

Fue de puntillas hasta la cocina, rodeó la isla y comenzó a gatear hacia las escaleras intentando hacer el menor ruido posible. Un escalón, dos escalones, tres escalones.....

- ¿Dean? - Mierda, lo había descubierto, se quedó quieto en su sitio con un poco de temor a girar la vista - ¿Qué estás haciendo ahí? - La voz de Jack  entraba por sus oídos.

- Es que yo... - Dijo comenzando a mirarle, arrugó el ceño - ¿Por qué ustedes os parecéis tanto? -  Preguntó sin siquiera haber pensado la pregunta, simplemente le salió sola.

- Oh, déjame presentarme. Mi nombre es Dennis Brown - Sonrió se parecía mucho a la sonrisa de... - Y me enorgullezco de decir que soy el padre de Jack - ¿CÓMO?