Mientras dure

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El corazón le palpitaba con fuerza a velocidad de vértigo en el pecho. Debo irme se repitió, pero ya no sentía que podía o no quería hacerlo.

- No te vayas, Vegeta, por favor - escucho que tomaba aire - te necesito, no te vayas.

Lo escucho sollozar, sintió que la presión en el pecho aumentaba, maldición odiaba oírlo así.

- Kakarotto yo ....

- Quédate conmigo, no necesito que correspondas a lo que yo siento por ti, me conformo con que te quedes y disfrutemos lo que tenemos ahora mientras que sea cómodo para ambos, por favor disfrutemos esto mientras dure, por favor no te vayas.

Goku sentía que se moriría si Vegeta no se quedaba, al escuchar que quería irse sintio que su corazón se quebraba. No, no, no, puede ser por favor no. Esto no podía acabar así, pensó desesperadamente.

- Yo no sé.... - dudo el príncipe.

Goku sintió una pequeña esperanza nacer en su pecho.

- Quédate por favor, quédate mientras te sientas cómodo con esto. Si ya no te gusta, no te detendré, podrás irte sin reclamos de mi parte, te lo prometo, pero no me dejes ahora - rogó.

Vegeta se sentía extraño, dividido entre querer quedarse al escuchar esas palabras, entre querer irse al escuchar esas mismas palabras o golpearlo por estar rogándole así. ¿Dónde había quedado el orgullo saiyajin de Kakarotto? Y ¿El suyo?, suspiro. Le dolía admitió, le dolía escucharlo rogarle así, le dolía no saber que hacer ante esto. No entendía ¿Por qué solo podía describir la presión en el pecho como dolor?, ¿Qué clase de dolor era este?, suspiro de nuevo. Lo mejor es alejarme de todo esto, penso. De él, de la tierra, de estos extraños sentimientos, de...... Lo escucho sollozar de nuevo, la presión-dolor en el pecho se intensificó, mierda. No podía con esto.

Goku sintió que Vegeta se liberaba de su abrazo, dejó que lo hiciera. Si no quería quedarse, no podía obligarlo. Había sido honesto con él, se separó un par de pasos del principe para que abriera la puerta y se fuera. Sentía que el corazón se le hacia gajos. Dolorosos y horribles gajos que le aprisionaban el pecho y no le dejaba respirar o pensar en nada más.

El sayia tenía los ojos cerrados. Las lágrimas corrían libremente por sus mejillas. No quería ver a su príncipe irse. El tiempo le pareció eterno, hasta que sintió que Vegeta le limpiaba el rastro de lágrimas con el borde de su mano derecha, incluso se había sacado el guante por un momento no creyó lo que estaba pasando. Así que solo abrió los ojos cuando le escuchó decirle.

- Me quedaré por ahora. ¿De acuerdo?, deja de llorar eso no es digno para nuestra orgullosa raza guerrera - finalizo dándole una suave golpecito con el dorso de la mano en la mejilla derecha.

¿Qué acababa de decir?, no podía creerlo. Tenía una expresión de completa sorpresa en el rostro que empezaba incomodar a Vegeta. Repentinamente esbozó una gran sonrisa mientras tomaba al príncipe por la cintura y lo abrazaba con fuerza levantando del suelo por encima de su cabeza.

Vegeta se quedaba, gracias Kami, gracias, gracias. Su príncipe se quedaba con él, no cabía en su felicidad. Sin dejar de estrechar al otro sayia con fuerza haciéndole dar una vuelta por el aire.

- ¡Bajame idiota!.

Grito Vegeta sonrojado, interrumpiendo la celebración y el hilo de los pensamientos del otro sayia.

Goku lo bajó ligeramente hasta que sus labios se encontraron y lo beso. Su príncipe se quedó quieto por un rato, pero lo abrazo por el cuello correspondiendo el beso. Fue un beso dulce y suave al principio pronto se volvió pasional, profundo y lleno de deseo. Vegeta enredo las piernas en la cintura de Goku, éste no pudo evitar jadear, se besaron hasta quedarse sin aliento.

¿Y si.......?            (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora