「 Segunda temporada de City Lights 」
♢ Desde que Kang se llevó a Rosé, la vida de Jeon cambio rotundamente. Malas decisiones y malas influencias lo acompañan, decepcionando a su dos amigos.
♢ Mientras la ya ahora, chica de 20 años. Luchaba por ocult...
Algunos días pasaban bastante lentos, y otros en un pestañear de ojos, ya era otro día. La rubia se mantenía sana gracias a la ayuda de Aisha. Las semanas que llevaba Roseanne ahí, Kang todavía no se daba cuenta de que ella estaba esperando un bebé.
La castaña de melena hacia todo lo posible para que el canoso no se acercara a la menor. Prefería tomar precauciones antes de que algo malo suceda.
—¿Y como era tu vida en Corea?
Rosé miró a la chica para luego acariciar su nada abultado vientre.
—Pues desde que llegué a Corea, mi vida no eres flores, azúcar y muchos colores....— hablo la rubia.— después estuve en el prostíbulo... Y lo conocí a él....
—¿Él quien?— preguntó interesada Aisha para seguir comiendo el pastel que ella había traído para ambas.
—Él padre de mi futuro bebé...— dijo la rubia para sonreír un poco.— después de que él me ayudará a mi y a mi mejor amiga, él ha sido el al que me he entregado por voluntad propia....
—Cuentame más de él....
—Es un maravilloso hombre, con un gran corazón.— la rubia miró a la chica.— alguien que le apasiona lo que hace, alguien que se preocupa por los demás.
—¿Por cuanto se llevan en edad?— preguntó Aisha para terminar su pastel.
—Ocho años.— la pelicastaña quedó boquiabierta.
—¿¡Ocho años?! ¿Seguro que no es un pedófilo?— la rubia río.
—A decir verdad, su aspecto lo hace ver más joven....— dijo Rosé para recordar todas las facciones del chico.
—¿Él no sabe que estás embarazada....?— preguntó Aisha. La chica se le borró la sonrisa que tenía en su rostro miró para el suelo.
—No... Ni él, ni a mis amigos....
Aisha miró con tristeza a la rubia.
—Pensemos positivamente....— hablo ella.— durante este tiempo... Estuve buscando por internet boletos para un vuelo a Corea....
La rubia miró a la castaña y está apretó sus manos, formando puños.
—P-Pero.... ¿Y Kang? ¿Qué hay con él? N-no quiero que me haga daño a mi y a mi bebé...— dijo con temor Rosé.
—Tranquila Rosie, Jooheon es un estupido al no darse cuenta, y no a intentado nada en acercarse a ti....— dijo la castaña para tranquilizarla.— como decía, el vuelo sería en unos meses más....
—Oh...— la chica suspiró y se mordió el labio. ¿Soportaría unos meses más? ¿Cómo estarían sus amigos? ¿Cómo estaría él?
La vida te da situaciones menos esperadas, una de ella pasaba en este momento y sin la presencia de ella.
En sus manos, traían un montón de papeles que tenía que el firmar. Su trabajo la hacia estresarse mucho, pero se sentía cómoda con él, recibía buen sueldo, le servía para mantener su departamento que tenía ella junto a su novia.
Miró la oficina de su amigo, observo y miró extrañada el puesto de la ahora rubia chica, camino a paso lento mientras seguía mirando el escritorio, hasta que escuchó agitadas respiraciones.
Dejó la pila de papeles en el cercano escritorio, y lentamente se acercó a la puerta de roble oscuro barnizado. Pegó su oreja para poder escuchar mejor. Hasta el momento solo escuchaba aceleradas respiraciones.
Pero sus ojos se abrieron de golpe al escuchar un leve gemido de una chica, su curiosidad la estaba matando, se agachó para poder ver por la cerradura de la puerta, y sintió asco e impotencia lo que sus ojos presenciaban.
Su amigo devorandose la boca de la rubia Yeri.
Se alejó a pasos torpes, y se agarró sus cabellos, ¿Cómo era posible? ¿En verdad lo estaba haciendo? ¿Tan pronto se olvidó de Rosé? Sentía que su cabeza iba a explotar.
De inmediato saca su celular, y teclea el número, y se lo pone en la oreja, escuchando los irritantes pitidos.
—Diga.— sus tímpanos escucharon la voz del rubio y habló.
—¿De que tenemos que hablar Chae?— preguntó extrañado.
—De Jeon. Iré a tu empresa.— la de melena negra cortó y camino a pasos rápidos, rumbo a la oficina de su amigo.
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Mientras hablaba, su estómago se revolvía, no lo podía creer. Está es la primera vez que se sentía decepcionado de él.
Él sabía perfectamente que él no era de tener relaciones en su vida, fue un total caza nova en su época de estudios, era de una chica a otra. Pero con la llegada de la rubia, el antiguo Jeon se había ido, y emergió uno nuevo, uno en el que le importaba solo una persona.
—¿Eso pasó?
—Si Jimin, este no es el Jeon que conocemos.— dijo la de melena.— sabemos perfectamente que él fue todo un caza nova, pero cuando conoció a Rosie... El cambio totalmente....
—No veo que el este interesado en Yeri, nunca lo estuvo, siempre le he dicho que algo me molestaba en ella.
—Lo zorra.— soltó Chaeyoung.— esa maldita estúpida se aprovecha de la situación.
Jimin miró extrañado a su amiga y suspiró.
—¿Yeri sabe que pasó con Rosé?— la de melena negó con la cabeza.— entonces... ¿Qué estará haciendo?
—Al parecer ella siempre estuvo interesada en Jeon, y por lo que he escuchado de los demás, lo que ella se propone, lo obtiene.
—Y lo que se propuso será.... Tener a Kook.— dijo Jimin.
—Exactamente, hay que despedirla.
—Pero Jeon es el único que puede hacerlo....— dijo el rubio para suspirar agotado. Quería que todo tuviera un punto final pronto.
Pero ese punto final, iba a perdurar por mucho más....
Dos meses habían pasado, y el aspecto de Jungkook iba de mal a peor, su cabello había crecido considerablemente, dándole un aspecto a como si fuera una melena, notorias ojeras. Y lo peor de todo, apestaba a alcohol.
Se podría decir que por sus venas, en vez de sangre, corría alcohol.
Nunca fue de esas personas que se emborrachan, se ponía su propio límite, pero el dolor y la tristeza lo cegaban por completo. Dejando que ese límite, se rompiera y se excediera.
Volviendo alcohólico, cervezas, vinos, tequilas, era lo único que bebía, encerrado en su habitación, o junto a su secretaria, que ella en vez de ayudarlo, ayudaba a su alcoholismo y se aprovechaba de él.
