One month.
Habían pasado exactamente dos meses, dos meses desde que los malos problemas se esfumaron para los dos jóvenes padres, ya no estaban ni Yeri, ni Kang.
Los curiosos ojos miel de la embarazada miraban como dos chicos construían la cuna de su hijo Soobin.
—¿Quieren algo de beber chicos?— preguntó la rubia.
—Sí, por favor Rosie.— hablo el rubio para sentarse en el sofá agotado, la chica entró en la cocina, sacó dos vasos y agarró el jarrón de jugo que había en el refrigerador, volvió a la sala y extendió el jugo a Jimin y el otro a su lindo chico de sonrisa de conejito.
—Gracias pequeña.— dijo Jeon para darle un sorbo al jugó y sentarse al lado de la australiana.— nunca pensé qué hacer una cuna iba a hacer complicado...
—Hubieras llamado a alguien que la construyera.— dijo Rosé para mirar al castaño, y este suspiró.
—Yo quiero hacerle la cuna a mi hijo...
—Eres un testaduro Jeon Jungkook.— hablo su amigo para negar con una sonrisa. Rosé río bajamente, y dejó su cabeza apoyada en el hombro del castaño, mientras sentía las suaves caricias en su vientre.
—Aún no creo que ya en un mes, lo tendré en mis brazos.— dijo Jungkook para sonreír.
Y así, tiempo después, ambos amigos terminaron de construir la cuna de Soobin, mientras que la rubia se había quedado dormida en el sofá, los grandes ojos de Jeon brillaron al ver a la chica.
—Qué lamentable.... Pero, ¿Qué piensas hacer ahora?— preguntó la chica platinada para darle un sorbo a su café y luego dejar la taza en la mesa.
—Supongo qué conseguir un trabajo...
—Kim, no es un supongo.— hablo la chica.— vas a conseguir un trabajo...
—Si no me hubiera despedido nada de esto estuviera pasando....— hablo la rubia con su ceño levemente fruncido.
—Pero te lo ganaste, por joderle la vida a tu jefe.
—Eso no fue así Taeyeon, fue por esa perra que ahora está esperando un bastardo.— hablo enojada la chica.
La contraria suspiró y se rasco su nuca.
—Yeri, en esta vida no todo lo puedes tener, y tú jefe es algo que no y nunca vas a conseguir, de partida nunca deberías enamorarte de él.— hablo la platinada.
—Eso es por qué nunca te has enamorado como yo.— dijo incrédula Yeri.
—Tu no estás enamorada de Jeon, estás completamente obsesionada con él.
—¿Me citaste para solo venir a decir que estoy loca?— preguntó la rubia sin ninguna expresión en su rostro.
—Solo te pido que los dejes en paz, aparte si estás tan enamorada de él. Déjalo ser feliz con su novia, o lo que sea.— contestó Taeyeon.
—No son nada, la mosquita muerta odia a mi Jungkookie.
—Pero te despidió por qué el ahora quiere hacer las cosas bien.— dijo Taeyeon para cruzarse de brazos.— como buena amiga te digo la verdad.
—Tampoco pedí tu opinión.— dijo Yeri.
La platinada suspiró, se colocó sus costosos lentes de sol, se levantó y luego miro a la rubia.
—La cuenta ya está pagada, espero que pienses bien las cosas.— y con esas palabras, la chica se retiró del lugar bajo la oscura mirada de su testadura amiga.
—¿Quedé a Jungkook y a esa perra en paz?— se preguntó la rubia.— el día que me muera los dejaré en paz, mientras siga respirando, no los dejaré vivir tranquilos.
Y con eso la chica se retiró con su sonrisa pegada en su rostro.
—Gracias Chae.
—De nada Rosie, todo por el bebé.— dijo la de melena para abrazar por los hombros a la embarazada.
—A veces pregunto si el que tiene hambre es Soobin, o es ella.— la rubia y la pelinegra miraron al guapo castaño apoyado en la pared y la rubia hizo un puchero.
—Tu hijo quería pizza.
Chaeyoung río y volvió a mirar a la rubia.
—¿Cuánto queda para que nazca?— preguntó interesada la chica para sonreír.
—Un mes, y de paso avisale a mi madre.— hablo Jeon con una burlesca sonrisa al ver como su amiga lo miraba seriamente.
—La abstinencia le está haciendo muy mal.— la rubia río levemente para acariciar su vientre, y sentir como su hijo se movía en su interior.
Como si aquella criatura sintiera lo mismo que ella.
—No entiendo como Mina te soporta, Son Chaeyoung.— hablo Jeon para ver a su amiga y a la australiana masticando una rebanada de pizza.
—Por que ella me ama y yo la amo.— dijo la chica de melena.— es como que yo diga que Rosie te soporta por qué está completamente enamorada de ti, de pies a cabeza.
Park se sonrojo y bajo su mirada para seguir comiendo en silencio.
—No ves que sonrojas a mi mujer, a la madre de mi hijo.— dijo Jungkook para acercarse a las dos chicas, y tomar asiento al lado de la rubia para luego besar su mejilla.
—Jeon posesivo al ataque.— dijo Chaeyoung con una sonrisa.— te tengo noticias sobre Chanyeol.
—¿Como está Channie?— preguntó Rosé para sonreír, y tener sobre ella una mirada penetrante.
—Él se fue a Japón, en una de nuestras agencias, se fue a fotografiar allá.
—Por eso ya no lo veía en la empresa...— dijo un poco apenada.
—Al principio no estaba muy convencido, pero alguien lo convenció y se fue.— dijo la pelinegra para mirar de reojo a su amigo.
Pasaron unos minutos y Son ya había abandonado el departamento, dejando a los futuros padres solos, Rosé aún comiendo de otra rebana de pizza y Jeon a su lado acariciando el vientre de la rubia.
—Te quería comentar algo...
—¿Qué es Kookie?— preguntó la rubia.
—Yo quiero que tengas una mejor vida...— habló él.— una lejos de todos los problemas.
—Pero si ya no los hay...
—Lo sé, pero quiero que vivamos los tres juntos.— Jungkook tomó las suaves manos de la embarazada y acariciaba su dorso con sus pulgares.— una linda casa alejada de la ciudad...
—Kook...— la chica apartó sus manos de las del mayor y luego las puso en sus mejillas.— es una linda idea.
—¿Entonces aceptas?
—Claro que si, por Soobin, y por nosotros.— y con eso, Rosé junta sus labios con los del mayor, en un lento beso lleno de amor y confianza.
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City Lights ²┊Rosekook
Fiksi Penggemar「 Segunda temporada de City Lights 」 ♢ Desde que Kang se llevó a Rosé, la vida de Jeon cambio rotundamente. Malas decisiones y malas influencias lo acompañan, decepcionando a su dos amigos. ♢ Mientras la ya ahora, chica de 20 años. Luchaba por ocult...