† We're On Our Side † Good Omens † Fictober

27 Ángel

Au universidad. Vidas pasadas.

Los colores iban siendo impregnados en el lienzo dándole forma a su nueva creación y esta seguro que una vez que la termine será su mayor obra de arte. A estas horas debería estar dormido pero la inspiración no tiene horario y si lo dejaba para el día siguiente estaría en un complemento bloqueo artístico, eso se debe a que mientras estaba dormido tuvo otro sueño donde encontró a la misma criatura más hermosa que en su vida había visto pero si en sueños, ese sueño se ha repetido durante varios meses, se sorprende como alguien como él pueda soñar con un ángel, él no es del tipo que sueña cosas lindas.

Cada vez que miraba a ese ángel deseaba acercarse, hablar con él, preguntarle su nombre, pero siempre despertaba cuando eso ocurría y un sentimiento de vacío venía por la frustración de no poder acercarse, sentía que lo había perdido cuando en realidad nunca antes había conocido alguien como él, pero esa sensación de "ya nos hemos conocido antes" siempre lo atormentaba, por muy loco que parezca tal vez fue en otra vida.

Por eso decidió preparse un café negro para pasar la noche terminando la obra que durante meses ha estado en su cabeza, la ha intentado hacer durante ese tiempo, pero todo lo que ha logrado no está ni cerca de la belleza de su musa, a pesar de que todos le han dicho que sus obras son magníficas entre otros halagos que para Crowley no tienen importancia alguna si no le convence a él mismo.

Así que como todo artista dando todo de si mismo para llegar a dar su mejor obra, durante este tiempo ha trabajado muy duro por esta pintura, es más complicado de lo que pensó, después de todo él no está acostumbrado a pintar este tipo de cosas, lo suyo es más oscuro y tenebroso, pero ese ángel de sus sueños merece ser plasmado en una de sus obras haciendo justicia a esa belleza.

Además así no tendría que esperar a mirarlo en sueños, lo tendría aquí mientras está despierto.

Y con esa emoción dió los últimos toques a su obra, una vez terminada la miró por un largo rato.

—Mi ángel.

Después de eso ahora sí necesita dormir a pesar que solo le quedan dos horas para levantarse otra vez.

Pasando una semana tuvo que llevar su obra a una exposición en la universidad, realmente no tenía tantas ganas de hacerlo por falta de confianza a qué algo le pasará a su obra, pero había mentido cuando dijo que ese sería su proyecto final para la exposición, en realidad solo mintió para dedicarle más tiempo a su obra y por eso mismo no pudo trabajar en algo más para la exposición además varios estaban fascinados por su trabajo y que Crowley por fin pintara algo que no diera miedo era algo que todos necesitaban ver para creer.

Ya una vez expuesta Crowley no se alejaba mucho del lugar admirando su creación, también para cuidar que ningún idiota la vaya a dañar.

—Me gustaban más tus obras anteriores.

Crowley volteo dónde provenía la voz, encontrándose con Beelz cerca suyo, no había notado cuando llegó.

—No sabes nada de arte, no tienes el derecho de criticar.

—El tipo que pinta solo para conquistar tampoco me va a criticar. ¿Por cierto, ya te decláraste?

—¿De que carajos hablas?

—Por favor, es obvio a quién quieres impresionar, solamente pienso que te miras muy patético en usar este tipo de conquista.

—Sigo sin entender que carajos hablas ¿¡A quién se supone que estoy tratando de impresionar?!

—Aziraphale, duh.

—... No conozco a ningún Aziraphale.

Beelz le mira pensando en un momento que el otro solo está mintiendo para quedar bien, pero al ver su rostro este parece sincero en sus palabras.

—Espera... No conoces a Aziraphale, es amigo de Gabriel.

—No me interesa ningún amigo que tenga relación con el idiota de Gabriel, apenas te soporto a ti y eso que eres su pareja.

—También te aprecio Crowley.

Hablando del rey de Roma, Gabriel apareció igual que Beelz sin que se dieran cuenta hasta que él habló.

—¡Gabriel! Llegas a tiempo –Beelz se hace un lado para darle a su novio más espacio y pudiera ver la pintura –¿dime a quién te recuerda ese ángel?

—Es idéntico a Aziraphale–, respondió Gabriel al instante, no hacía falta mirar a detalle la pintura para notar el parecido.

—¡Te lo dije!

—¡Imposible, no conozco a ningún Aziraphale!

—No entiendo ¿De qué están hablando?–pregunta un Gabriel confundido sin entender de que trata la discusión.

—Crowley pintó a Aziraphale, pero dice que no lo conoce.

—Él jamás se acercaría alguien como Crowley–, menciona Gabriel en defensa de su amigo, piensa que Crowley no es para nada el tipo de Aziraphale –Y menos ahora que sé que está obsesionado con él.

—¿¡Quién está obsesionado con quién!?–Crowley reclama por las acusaciones de Gabriel.

—¿Entonces como es que sabes cómo luce su rostro?–pregunta Beelz mientras que Gabriel le mira también esperando una respuesta.

—... Lo ví en un sueño–Crowley una vez que respondió supo que eso sonaba menos creíble.

Beelz soltó una risa por la respuesta y Gabriel le mira sin creerle.

—¿¡Desde cuándo eres del tipo cursi?!–hablo Beelz todavía entre risas, quién diría que Crowley tenía sentimientos.

—¡Es verdad!

—Supongamos que es cierto, eso como explica que se parezca a Aziraphale.

—No creo que se parezca, deben estar confundidos–responde Crowley hartó de las acusaciones de esos dos y su insistencia que su ángel se parezca a ese amigo de Gabriel.

—Entonces tendrás que comprobarlo tú mismo.

—¿De que hablás?–pregunta Crowley.

—Vamos a traer a Aziraphale para que lo compruebes tu mismo.

Crowley iba a reclamar que no está interesado en ningún amigo de Gabriel, pero la curiosidad de saber si ese sujeto es parecido a su ángel le invade, es posible que sean un poco parecidos o será que Beelz y Gabriel tienen razón y ese ángel en sueños es ese tal llamado Aziraphale. Lo que sea tendrá que verlo con sus propios ojos.

Continuará en la parte 29.