Capítulo 8: Experiencias...

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Lengua, clase P.

- Julia, ¿podrías compartir tu respuesta con la clase?

- ¿Julia?

- ¡¿Julia?!

La profesora había estado gritando el nombre de mi amiga durante minutos hasta que se acercó a donde esta se hallaba dormida.

Normal, el día anterior habíamos tenido entrenamiento físico en la academia y estábamos más cansadas que una tortuga después de un maratón.

- Puedo hacerlo yo...- trato de salvar a mi amiga.

- Gracias, - bufa la profe.

Después de corregir el ejercicio, sonó él timbre.
Todos nos levantamos y yo fui hacia mi amiga para despertarla.

- Julia...- susurro, pero pronto remplaza a mi expresión calmada una pérfida sonrisa,-  ¡Julia!- grito, acompañando el berrido de una colleja bien dada en el cogote.

- ¡Abdominales!- grita ella sobresaltada, mira a su alrededor, me mira a mi, - ¡Capulla!- empieza a hacerme cosquillas y me caigo encima de la mesa de un compañero.

Ostia... no me podía caer en otra.
Pues no.

El rostro de Demon se alzaba sobre mi, con una sonrisa ladeada dibujada en el rostro.

Hasta boca abajo está bueno...

Vale, mis pensamientos me perturban.

- Perdooooooon... - me voy a levantar, y me fijo en que mi sudadera que ocultaba el uniforme de la academia se me ha descolocado, de manera que se ve perfectamente la camisa blanca con la falda negra. - mierda...- murmuro, corriendo al baño.

Mierda...

Me encierro en el baño de las chicas y me reviso en el espejo, si. Debajo de mi enorme sudadera (que en este caso hace de vestido), sobresale un cacho de camisa y la falda negra entera.

- Joder... -murmuro.

Me lo coloco todo bien y me reviso en el espejo, estoy roja, ¿Por que estoy roja?

Demon...

Oh... ¡no! ¡ no no no ! ¡ No con ese mujeriego, que le he visto cientos de veces comerle la boca a cualquier guarra, no con el tío que me mira con aires de superioridad cada vez que puede, no con ese chaval que me habla con susurros!

¡NO VOY A PERDER EL  TIEMPO CON DEMON!

Salgo del baño cabreada con mis pensamientos y cuando entro en clase, todos se giran a mirarme. Demon entre ellos, con su típica sonrisa ladeada.

¡ Pues no !

Me yergo, camino contoneando me hacia una sonriente Julia, y al pasar al lado de Demon le dirijo una sonrisa igualmente ladeada.

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Gimnasia:

Oh... dios voy a morir...

Estoy practicando defensa con Julia, una chica que... vamos a aclarar, lleva años entrenándose para pelear contra alguien 3 veces más grande que yo.

Julia lanza una patada en mi dirección que me encaja en el estómago y me echo hacia atrás. Trato de agarrarle la pierna, pero lo que consigo con eso es en un codazo en las costillas, y seguidamente, un empujón que me hace perder el equilibrio y caer.

- ¿Estás bien?- corre Julia hacia mi.

- Joder...- mascullo.

Me empiezo a erguir y veo de reojo a ... no.... a mi antigua clase.

Deseo mortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora