Capítulo 7 🐰 Odio con sentido

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Dedicado a elieta_17 por adivinar lo que le pasaría a Michi :3


Otra noche más en la que no he podido dormir ni un poco. ¿La razón? La presentación del trabajo. Una de las razones más catastróficas por las que mis notas no son como deseo es que en mis presentaciones soy un desastre. Antes de presentarme frente a demasiadas personas hago una especie de ritual para mantenerme en calma, pero siempre me trabo, no hablo o simplemente digo que algo pasó y no puedo exponer, como dolor de garganta, resfriado, o qué se yo.

Hoy es diferente. Hoy no puedo negarme a exponer. Las razones son simples y tan terribles como puedes imaginar:

1. No puedo sacar otra nota mediocre, Atkins está a la vuelta de la esquina.

2. En la universidad no podré usar las absurdas excusas que doy en el colegio.

3. TENGO QUE DEJAR MI MIEDO A UN LADO DE UNA BUENA VEZ.

Enfrentar lo inevitable me tiene contemplando mis tostadas este triste lunes por la mañana.

—Hija, ¿qué pasa? No has tocado tu desayuno.

Levanto la mirada hacia papá y sin demasiado animo le sonrío. Es de esas sonrisas que buscan decir que todo anda bien en momentos en los que nada va bien. Y mi padre no es tan despistado para quedar conforme con mi respuesta, por lo que añado:

—No tengo hambre.

—¿Y eso? Tú misma nos dijiste que para tener un buen día se necesitan los nutrientes necesarios en el desayuno, que es la comida más importante del día.

—Lo sé, pero hoy estoy demasiado nerviosa como para comer.

—¿Es por la presentación que practicabas el otro día? —pregunta mamá, que todo este tiempo estuvo viendo la televisión. De mala gana asiento y vuelvo a mirar mis tostadas—. Ya veo.

—Me pongo demasiado nerviosa cuando tengo que hablar frente a otras personas, tanto que en cualquier momento creo que les vomitaré encima.

—Michelle —se queja mi santa madre, frunciendo el ceño tras mi desagradable comentario.

—Imagínatelos desnudos —propone papá.

—¡Gabriel! —le regaña mamá.

—A mí me funcionaba —admite él, pero mamá no luce demasiado convencida, así que prefiere no opinar más y prestar atención al programa de la televisión.

—La clave es enfocarte en una persona —dice mamá, de buen humor—. Alguien de tu confianza, como tu amigo o tu profesor. No mires a nadie más, solo a esa persona, y le expones la materia a ella como si fuera una plática casual.

En los recovecos de mi cabeza la imagen de Anne se presenta ante mí junto a un coro de gloria y una luz casi celestial. ¡Eso es! En vista de que no somos pareja, puedo dirigirme a ella al presentarme, y estoy segura de que ella no se sentirá incómoda, sino que me alentará.

Con esa brillante idea me voy a Jackson. En el bus avanzo con la idea de mi proyecto para la feria creativa. He planeado hacer un juego de mesa con temática espacial, que sea educativo y ayude a concientizar a sus jugadores. Si tengo algo de suerte y gano, tal vez alguna empresa de juego famosa compre mi idea.

Bueh, se vale soñar, ¿no?

Le estoy dando forma al tablero cuando una conversación proveniente de los asientos de atrás llama mi atención.

Rompiendo tus reglas ✨Nueva versión✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora