Eres Humano también?

El pasado...

—Que....quien es hye? —susurro—. Acaso será...la persona que lo lastimó en el pasado....morir? Ella murió? Porque?....necesito saber la razón por la cual mi Junho está llorando en silencio...quiero ayudarlo....pero como... —siguio susurrando mientras le acariciaba las mejillas para secar las lágrimas.

(...)

Yohan y Junho se encontraban durmiendo abrazados como ya era costumbre, y como todos los días la alarma los despertó, se alistaron y se fueron a clases. Cuando llegó la hora de receso se sentaron a comer con los chicos en el mismo orden de siempre.

—Hyeonjun no te metas tanto helado a la boca! —Dijo Seungyeon.

—Dongpyo no quites mi comida, tienes la tuya.
—Vamos! Seungwoo Hyung, no pasa nada solo es un poco de comida menos.

—Eunsang! Te he dicho que no me pellizques las mejillas cuando estoy comiendo!!! —musito dohyun.

—Seungyeon estoy guapo? —dijo gyul.
—Si lo estás.

—Yohan pásame el arroz que ya no quieres.
—Esta bien toma!
—No le quites la comida a Yohan Wooseok —dijo minhee.
—No te metas Otaku!
—No me digas así tortolo!
—Oye! —le hizo una seña de silencio a lo cual el Otaku solo sonrió.

—Hyung quiero más helado —dijo hyeonjun a seungwoo.
—Mas? Ya comiste mucho

—Yo también quiero —dijeron los más pequeños.
—Yase....el último en hacer aegyo irá por más helado —dijo hangyul.

Todos hicieron alguna cosa tierna menos Junho quien solo se quedó viendo como todos tenían la mirada en el.

—No.
—Pero Hyung perdiste!
—No hice nada porque es tonto.
—Vamos yo te acompaño —dijo Yohan.
—Esta bien, ya venimos.
—Yo quiero de chocolate.
—Vainilla
—Fresa
—Melon
—Y yo de crema.

Ambos se dirigieron a la zona de postres e hicieron la orden, mientras esperaban el pedido miraban que a unos metros se encontraba una mesa de 9 chicos discutiendo y jugando alegremente.

—No se cuándo pasamos de 2 a 11.
—Yo tampoco pero me agradan.
—Esa.... Esa es nuestra mesa y ellos son...nuestros amigos —sonrio.
—Lo es...me alegro de a verlos conocido, en especial a ti...tu me has enseñado muchas cosas y gracias a ello ahora estoy rodeado de personas tan buenas, locas y divertidas como ellos.
—Aunque no quiera admitirlo me acostumbré a sus personalidades.

—Aquí están sus pedidos! —dijo la señora.
—Muchas gracias —tomaron los helados e hicieron una reverencia para marcharse.

—Aquí están los helados chicos.
—Siii
—Tardaron mucho tiempo Hyung.
—No se quejen y coman antes de que se acabe el receso.
—Bueno Hyung.

Todos metidos en su mundo mientras Junho observaba a sus ahora nombrados por el amigos, sin darse cuenta se rodeo de personas únicas y aunque el se negaba a hacer amigos se acostumbro a su presencia y ahora los conocía mucho la razón era que eran muy predecibles pero no faltaba un momento donde hacían algo diferente y eso le agradaba, "tal vez llegó el momento de dejar el pasado atrás y concentrarme en el presente" fue lo que pensó.

—Bueno ya es hora de irnos a clases nos vemos mañana.

Más tarde.

Como ya era costumbre Junho salió a correr junto a Yohan, compraron helado y platicaron, luego llegaron a casa comieron y bañaron para después ir al cuarto a hacer sus tareas.

—Termine!
—Yo también
—Que hacemos ahora?
—Bueno voy a limpiar el cuarto que tiene seguro, está bien?
—Que? Ese...ese lugar esta prohibido, no podemos entrar quedó claro?
—Pero que hay dentro?
—Cosas que no importan.
—Es sobre tu pasado?
—Si, ire a la tienda por mi hilo dental vienes?
—No...voy a hacerme mantenimiento últimamente estoy muy caliente, puedes ir tu.
—No necesitas ayuda?
—No, yo puedo hacerlo solo, gracias.
—Esta bien, ya vuelvo.

Despues de que Junho se fue, Yohan se dirigió a ese cuarto que tanto le llamaba la atención y ahora que sabía que había adentro, más quería entrar.

—Solo será rápido, además me servirá para ayudarlo...si...

Entro al cuarto y lo primero que pudo observar fue una enorme foto de Junho y una chica abrazados, volteó a ver a otros lados y miro ropa, peluches, juguetes, cajas cerradas, se acercó a una caja que parecía tener notas y cartas tomo varias de ellas y se sentó en un sillón aun lado de un enorme peluche blanco para comenzar a leerlas.

"Te parece si nos escapamos después de clases?".

"Claro."

"Hay no seas gruñón oppa."

"Lo siento! Te comprare
Helado si?."

"Será de chocolate?"

"Claro que sí."

"Entonces te perdono, no quiero que el maestro nos caché mandando notas, adiós oppa."

"Adiós pequeña!."

—Vaya...no sabía que se llevaban tan bien —siguio buscando algo interesante que le ayudará hasta que encontró una carta cerrada que decía jihye.

"Hola pequeña, te preguntarás porque está carta cierto? Bueno pues quiero decirte algo que he tenido guardado para mi durante un largo periodo de tiempo pero creo que es momento de decírtelo.... Me gusta tu cabello, tus ojos, tu sonrisa, tus pestañas, tu altura, tus hoyuelos, tu personalidad...me gustas tu! Se que debes estar muy sorprendida pero desde hace mucho deje de verte solo como una amiga, no se si tú sientas lo mismo pero si no es el caso lo aceptaré con la condicion de que no cambie nuestra amistad....sabes, te tengo una sorpresa nos vemos en nuestro lugar?...

—Que haces aquí —dijo el chico que recien llegó—. Que estás leyendo....dame eso... P-porque tu! La leíste?
—Junho yo....
—Te pregunte algo... responde! —grito.
—Lei la mayoría, no tenía malas intenciones...
—Que raro tu nunca tienes malas intenciones!
—No digas eso junho.
—Estoy arto....confíe en ti, te dije que cuando estuviera listo te contaría todo....no pudiste esperar?
—Que... Que querías que hiciera....la otra vez hablaste dormido incluso lloraste que querías? Que me quedara viendo como sufres? Y no poder hacer nada por ti? Eres mi amigo la persona que más aprecio y odio no poder ayudarte, la intriga de saber...de ayudarte a superarlo me está matando....
—Solo tenías que esperar...no te has dado cuenta? No importa si sufro tu siempre apareces y me haces sonreír...solo necesitabas estar a mi lado sin preguntar nada...solo eso pedía de ti....solo eso —lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, a lo que Yohan se acercó y le dio un abrazo.

—Perdon...sabía que te ayudaba pero no era suficiente para mí...como siempre hice que te molestaras conmigo... Realmente lo siento, soy un tonto.
—Te contare todo, es lo mejor —dijo correspondiendo su abrazo.