Summer [Hariana] ✔️

Veintidós

Harry's pov

Traté de moverme lo menos posible, para evitar que alguien abajo, se despertara. Coloqué una de las almohadas de la cama, en medio nuestro y ella hizo un puchero.

— ¿Por qué? –gruñó.

Reí ante su actitud de niña, pero sin embargo no me moví.

— No querrás saberlo –le dije.

Ella me miró, y en su boca apareció una sonrisa traviesa.

Cuando menos me lo esperé, la sábana que cubría mi desnudez, había sido arrancada de mi cuerpo. Coloqué mis manos tapando mi parte, a la velocidad de un rayo. ¡Joder!

— Oh... –dijo. Vi sus mejillas teñirse de rojo.

— Te lo dije –susurré.

Me cubrí con la almohada, mientras ponía la sábana en su lugar. Ella rió.

— Bueno, ya que tú puedes, también yo –dijo.

La miré confundido, pero mis ojos se abrieron al ver lo que hacía. Era cono una película de streapper's, se quitó la maldita falda blanca, y casi me da un infarto. Llevaba bragas negras, ¡negras! Mi maldito color favorito. Y ni decir de cuando se quitó el top y me dejó ver sus redondos senos.

Se dio la vuelta, y me encaró. Su sonrisa de pervertida estaba plasmada en toda su cara. Se relamió los labios, matándome aún más.

— Veo que te gusta –susurró–. A mi también.

Subió a la cama, en sus rodillas. Venía directo a mí. Su sonrisa parecía imborrable, y su mirada no se despegaba de mis ojos.

Colocó las piernas a mi alrededor, y se sentó... ahí. No había notado el dolor de mi pelvis, hasta que ella se movió. No pude evitar soltar un gemido fuerte. Llevaba meses sin acostarme con nadie, y llega ella, descontrolándome a la primera.

Me miró fijamente, y acercó sus labios a mi boca. Coloqué mi mano en su nuca, acercándola para besarla. Esto era el paraíso, de eso estoy seguro.

Tomó mis manos y las colocó en el broche de su sujetador.

— Estoy lista, Harry –susurró agitada–. Si me van a castigar luego, que sea por algo.

Ella me ayudó a quitarlo, dejando a la vista sus deliciosos senos, desnudos. Los tomé en mis manos, juntándolos, para luego pasar mi lengua por ellos. Sus pezones rosados, se pusieron duros contra mi lengua, invitándome a pasarla por ahí muchas veces. Sus gemidos se mezclaban con mi respiración dificultosa, y podía sentir que mi pene estaba cada vez más duro.

La recosté en el colchón, y me coloqué encima de ella. Sonreía, parecía feliz. Bajé mis manos por su vientre, hasta llegar a sus bragas. Colé mi mano, entre ella, percibiendo la humedad de sus piernas.

Ella soltó un gemido bastante fuerte, cuando metí un dedo por su orificio. Estaba caliente, y apretada, y eso me gustaba demasiado. Bajé la tela, y pude ver sus rizos oscuros, tapando la piel sensible.

Escuchamos unos pasos en el pasillo, y luego mi puerta ser tocada.

— ¡Harry Styles! ¿Qué estás haciendo? –la voz de mi madre interrumpió.

Miré a Ariana con los ojos abiertos.

— Recoge tu ropa, y escondete en el baño, yo lo arreglo –dije bajito–. ¡Ya voy mamá!

Tomé la laptop, y la tiré en la cama, mientras me ponía unos bóxer. Saqué los discos porno que tenía en la mesita de noche, y los esparcí por la cama. En carrera abrí la puerta, y por ella apareció mi mamá de brazos cruzados.

— ¿Qué está pasando aquí? –gruñó.

— Lo siento mamá, estaba viendo porno. Le bajaré el volumen, lo prometo –dije.

Ella me miró y se abrió paso. Observó los CD's esparcidos por la cama.

— Debería darte una charla por eso, pero estoy cansada. Hablaremos mañana –dijo.

Suspiré cuando cerró la puerta. Ariana apareció con su ropa interior puesta, por la puerta de mi baño.

— Eso estuvo cerca –dije.

Ella se acercó colorada, y me abrazó.

— No sabía que hacia tanto ruido, lo siento –susurró.

La abracé contra mí.

— Me gustan esos ruidos, pero este no es el lugar para que tengamos eso. Deberíamos esperar –admití.

— Pero yo quería –dijo haciendo un puchero.

— Yo también, pero será mejor que durmamos. Ya habrá tiempo –susurré.

Aún semidesnudos, nos acostamos en la cama, arropándonos.

— Buenas noches, nena –le dije.

— Buenas noches, corazón –susurró.

De ahí, solo sé, que sería la primera noche que dormiría con quien amo.