Crystal world 「Kimetsu no Yaiba」

３０「Verdad o mentira」

Tras pasar unos pocos minutos caminando, nos encontramos frente a un río, la corriente era rápida así que sería un problema pasar.

—¿Eso fue...? —Miré hacia el cielo, como si un rayo hubiera caído al otro lado de la montaña, so sonido resonó por toda la montaña—. Zenitsu... ¡¡Debe ser Zenitsu!!

—No pareciera que fuera a llover... —Murmuró Tanjiro oliendo a su alrededor, después miró a Inosuke—. Kessho y yo cruzaremos al otro lado.

—¡¡Como si me importara!!

—Inosuke, tú deberías bajar. Bajar de la montaña.

—¿¡POR QUÉ?¡ ¡NO LO HARÉ, MUÉRETE!

—No, Inosuke. Es que estas gravemente herido.

El de la máscara chasqueó la lengua molesto y le respondió que no estaba herido y mucho menos se sentía mal, reí levemente.

—Iré a buscar a Zenitsu, estoy más que segura que quién es el responsable del rayo fue él. Cuídense mucho, por favor.

Ambos asistieron, me acerqué a Tanjiro lo abracé.

—Hay una de las doce Lunas aquí —Susurré—. Por favor, ten mucho cuidado. Cuando lo veas, hagas lo que hagas no pelees con él. Mantente a distancia.

—Kessho...

Al separarme de él, tomé su rostro entre mis manos y ahora fui yo quien besó delicadamente su frente. Al verlo con las mejillas sonrojadas, no pude evitar reír. Me acerqué a Inosuke y lo abracé, este se tensó notoriamente.

—No te lastimes más, por favor Inosuke... No quiero que te hagas daño...

Me separé de él y le di un golpe en su espalda. Este soltó un pequeño quejido de dolor.

—¿Ves que si estás herido?

—¡¡TÚ...!!

—¡Los veo dentro de unos minutos, griten mi nombre y yo vendré!

Y comencé a alejarme del lugar. Corrí hacia el frente y cuando nadie me veía utilice mi técnica de sangre para cruzar el río sin mojarme. Ahora solo seguía lo que mi intuición me decía.

Corría lo más rápido que mi cuerpo me permitía, debía buscar lo más pronto que podía a Zenitsu. Ese chico me tenía preocupada, era la primera vez que presenciaba su aliento y para que utilizara una fuerza de tal magnitud era algo... asombroso.

¿Pero y si estaba en grave peligro? ¿Y si derrotó al enemigo, pero ahora estaba realmente débil como para continuar?

Las arañas...

—¡¡Ah!! —Logré hacerme a un lado cuando sentí como algo se acercaba a mí y terminó enterrando su brillante espada en el suelo—. ¡¡OYE...!!

Un cazador con un extraño haori mitad rojo y mitad a cuadros. Al mirarme su expresión de seriedad cambio a una de sorpresa. Tenía unos bonitos ojos azules casi inexpresivos y cabello profundamente negro como el carbón, muy guapo físicamente hablando.

—¿¡Qué te sucede?! —Reaccioné rápidamente—. ¿¡Estas loco?! ¡¡Pudiste lastimarme!!

—Yo... —Me miró con confusión, ladeando la cabeza un poco—. Te confundí con un demonio, lo siento.

—¿¡Estas bromeando, verdad?!

Aunque su voz era profunda y llamativa, me molestaba tanto su inexpresión y falta de verdadero arrepentimiento en sus palabras.

—Soy Ubuyashiki Kessho, rango ocho —Me presenté viéndolo con el ceño aún fruncido.

—¿Ubuyashiki? —El hombre se sorprendió aún más—. Pero si Oyakata-sama...