Cumpliendo sus Fantasías Sexuales

Capítulo 54

Narra Gabriela.

Miré la hora, ya casi eran las 12 de la noche y yo seguia haciendo trabajos para la escuela, eso me pasa por tomarme días libres como si la tarea no iba a estar esperandome al volver. Los maestros me dieron la oportunidad de entregar los trabajos faltantes ya que me consideran buena estudiante.

Mire la pantalla de mi laptop y no llevaba más que el título del ensayo que necesitaba escribir para dentro de dos días. Respiré lento y me dispuse a escribir, pero mi mente seguia divagando y no lograba entrar en concentración.

Al final decidi empezar al día siguiente con la mente más descansada pues llevaba todo el día haciendo tarea y mi cerebro pedía un descanso con urgencia.

Guarde mis cosas y me puse pijama para dormir, le envie un mensaje de buenas noches a Daniela esperando no despertarla si ya dormia y me acosté cerrando los ojos e intentando dormir. Minutos después los abri molesta pues no lograba coinciliar el sueño.

Tome mi telefono y vi que tenia respuesta de Daniela

Dani: Buenas noches cariño, espero hayas terminado tu tarea

Dani: Que descanses, dulces sueños

Dani: Te amo

Vi la hora del ultimo mensaje y solo habían pasado tres minutos por lo que tal vez aún no dormia

Yo: Sigues despierta?

Dani: Sí, por qué aun no duermes?

Yo: No puedo dormir, me dio insomnio

Dani: ¿Te marco?

Yo: Aún no vas a dormir?

Dani: No tengo sueño

Yo: Entonces sí

Daniela me marco y dejamos de mensajear para hablar

-Hola Amor, por qué no puedes dormir?- preguntó ella

-No lo sé, mi cerebro está cansado pero no puedo

-Tal vez porque me extrañas, eso explicaría por qué tampoco puedo hacerlo

-Sí, eso debe ser- dije sonriendo, enserio amo a esa mujer

-¿Cómo te fue con tus trabajos?

-Pues casi terminé todo, solo me faltó un ensayo, era demasiado y aunque pase toda la tarde en eso, era imposible lograrlo en un solo día

-Por supuesto, ¿para cuando es tu ensayo?

-Pasado mañana

-¿Quieres ayuda?

-No amor, tú tienes tus propios pendientes

-Sí pero si mi Novia ocupa que haga un ensayo para ella, lo haría sin dudar

-Lo sé amor pero no, gracias de todos modos, sé que cuento contigo

-Para lo que sea, así sea enterrar un cuerpo sabes que iria a prisiòn por ti

-No exageres- dije riendo por su ejemplo –además yo no mataría a alguien asi que no tendrás que ir a prisión

-Dios! que bueno que dices eso, en cuanto lo dije me imagine cómo sería y no quiero ser la perra de ninguna prisionera

-No amor, solo puedes ser mi perra- solte una carcajada al decir eso, sonó peor de lo que imaginaba

-Obvio, solo tuya

-No amor, eres mi mujer, no una perra

-Pero cuando quieras puedo serlo, ser tu perra

-Solo si es para ponerte en cuatro- dije sonrojandome