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Llevaba una semana completa yendo a la playa por las mañana para ver de nuevo a su amigo el ser acuático, sin embargo siempre volvía desilusionado porque nunca lo encontraba.

— ¿Le habrán hecho daño por hablar conmigo? – se cuestionó preocupado, si ese había sido el caso se sentiría demasiado culpable. Ya se sentía mal por el hecho de que una de las trampas de su abuelo lo había lastimado, no quería sumar su muerte o terminaría confesando a su madre entre lágrimas lo que había hecho.

Esa mañana se levantó como siempre, se bañó, se vistió y fue a desayunar. Iría nuevamente a la playa a esperar a su escamoso amigo atractivo.

—Thor, ¿A dónde vas todas las mañanas? – pregunto su padre con cierto tono de advertencia. Sabía que si no tenía cuidado con lo que decía su padre, no solo volvería a llenarlo de trabajo por las mañanas, sino que también le asignaría guardias para que lo vigilaran el resto de su vida.

—Recorro el pueblo, me gusta estar al tanto de lo que pasa en el pueblo y ayudar siempre viene bien – dice astutamente con una sonrisa.

—Es verdad, un buen rey debe conocer bien su pueblo – dijo orgulloso el anciano.

El desayuno transcurrió sin más conversaciones. Al acabar, el rubio se fue corriendo. Estaba a mitad del camino cuando su madre se apareció.

— ¿Pueblo? ¿De verdad le mentiste a tu padre? – Su madre se veía algo decepcionada.

—Madre, si le dieras una oportunidad verías lo hermosos que son – se excusó frunciendo el entrecejo, le había dolido escuchar que la había decepcionado – nunca fue mi intención decepcionarte, te amo mucho, madre, pero amo el mar y por fin pude ver uno de esos seres, pude estar cerca – se notaba en su voz lo entusiasmado que estaba al hablar de ese tema, sin embargo su madre parecía horrorizada.

— ¿has estado en contacto con estas bestias? – pregunto exaltada, Thor la tomo de las manos y le sonrió.

—Si algún día me lo permites, y él quiere, me gustaría que lo conocieras – acariciaba con suavidad las manos de la mujer – es muy hermoso – Frigga lo pensó, luego de un momento suspiro.

—Ten cuidado, si algo te llega a pasar ten por seguro que le diré todo esto a tu padre –.

—Lo prometo – le dedico una radiante sonrisa a la mujer y se fue corriendo en dirección a la playa. Estaba feliz, su madre lo apoyaba, a medias, pero lo hacía y eso era motivo para estar feliz el resto del día.

Al llegar a la playa se quitó el calzado para sentir la arena en sus pies. Camino un poco y pudo verlo, nadando tranquilamente en la orilla como si estuviese enojado.

— Me pregunto dónde estará, quizás se murió o lo mataron por tarado — lo escucho murmurar, se aguantó la risa y se acercó lentamente al agua.

— ¿A quién mataron? — dijo de manera divertida. Lo vio alarmarse y mirar hacia el mar como si buscara a alguien, pero al no ver a nadie lentamente volteó a ver hacia la tierra. En sus ojos se veía algo de temor, aunque parecía tratar de disimularlo.

— Que te importa, monstruo — respondió a la defensiva mientras se alejaba un poco. Eso le había dolido, él no era un monstruo.

— No soy un monstruo, tu eres un monstruo — le respondió tratando de no hacer un puchero — De todas formas, me alegra verte, quiero hacerte unas preguntas — sonrió como solo él sabía hacer, de una manera genuina y feliz.

— ¿Y si no quiero responder? — el ser extraño se cruzó de brazos mostrándose desinteresado, eso hizo que su corazón se acelerara, necesitaba tener la oportunidad de conocerlo un poco mejor. De alguna manera quería empezar una conversación pero no sabía cómo, no quería sonar como alguien peligroso.

— ¿Cuál es tu nombre? —se sorprendió bastante al escuchar que el había iniciado la conversación. — Mi nombre es Loki. –.

— Loki...Es un nombre muy bonito – pensó el rubio viendo al contrario con una sonrisa boba. Iba con su aspecto tan fino.

— Soy príncipe y futuro rey de Jotunheim, el reino bajo el agua —.

Así que también es príncipe.

— Soy Thor, príncipe y futuro rey de Asgard, el reino sobre la tierra — respondió con orgullo, con una sonrisa hermosa.

La conversación inicio bien, con algo de burlas por parte del pelinegro, pero todo eso fue dejado atrás cuando empezó a contar sobre su reino. Se escuchaba como si fuera un lugar maravilloso, un lugar en el que desearía estar al menos en sus sueños.

Cuando el sol comenzaba a ponerse en su punto máximo Thor tuvo que cortar la conversación, si bien escuchar a Loki hablar sobre su reino era muy interesante no había tenido oportunidad de preguntar más sobre él, después de todo era un sujeto muy interesante y su voz lograba relajarlo.

—Lo siento, Loki – murmura sacudiéndose la arena de su ropa a la par que se paraba – pronto será la hora del almuerzo y debo dar un pequeño recorrido por el pueblo –.

—De acuerdo – se notaba que quería decir algo más pero parecía indeciso.

— ¿Quieres...que mañana nos encontremos aquí de nuevo? – Los verdes orbes del ser acuático se iluminaron.

—Si... no estaría mal – hablo con un tono de indiferencia, sin embargo Thor sabía que estaba tan o más emocionado que él.

—Entonces... Nos vemos mañana – se despidió mientras se ponía sus botas.

—Nos vemos mañana – lo escucho decir antes de que desapareciera bajo el agua.

Seterminó de calzar las botas y corrió hacia el pueblo. Ayudaría a unos cuantosgranjeros y luego iría a almorzar, si su padre preguntaba sobre la gente delpueblo podría responderle con lo que sea que viera en las granjas.


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Se que hace mucho que no me paso por acá pero han pasado muchísimas cosas, de entre las cuales puedo mencionar que tengo un gatito nuevo QwQ y que voy bien en la universidad

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