𝐓𝐈𝐂𝐂𝐈 𝐓𝐎𝐁𝐘

21.3K 1K 604
                                    

(Tú)

Había vuelto de una agitada tarde, el instituto era agotador, pero por mis padres -Los cuales adoro con todo mi corazón- he decidido seguir con mis estudios. Un largo suspiro se escapa de mis labios. Levanto la vista para ver el pequeño apartamento que era un desastre en este momento, soy emancipada debido al trabajo de mis padres -Deben viajar demasiado y hemos tomado la decisión de emanciparme. Eso fue hace un año, ya voy a cumplir diecisiete- así que no tenía quien me ayudara con la limpieza, y mis padres quieren que madure.

Fui a mi habitación para seguir con mis tareas, mientras escribía y leía, con música Lo-fi de fondo, el tiempo pasó volando, desde las 16:00pm hasta las 19:40pm. Apague la música del Notebook que estaba conectado a la radio, y me dispuse a bajar para comer. Abrí el refrigerador y había un paquete de Gofres, sonreí con melancolía al recordar que mi amigo de la infancia amaba esta especie de galleta, lo conocí en unos de los tantos viajes de mis padres, era un chico Introvertido, tímido y poco hablador, sufría de Bullying en el colegio y tras el accidente de su hermana se volvió mucho más cerrado que antes y desde eso no nos veíamos a menudo. Luego tuve que volver a viajar, meses de eso me emancípe, había recibido una llamada de mis padres diciendo que la casa de Tobías, mi amigo, se había incendiado y él había desaparecido, y no encontraron su cuerpo, solo el del padre.

Tome el paquete y me dispuse a a prepararlos. Cuando estaban listo les unte caramelo y me senté a comer mientras pensaba, yo era su mejor amiga, lo defendía de todo, lo apoyaba y él a mí. No debí dejarlo solo en ese momento, el sufría, debí haber sido una mejor amiga.

Me revuelvo el pelo y dejo los Gofres a medio comer. Me dispongo a irme a dormir, pero siento una penetrante mirada, lentamente muevo mi cabeza en varias direcciones buscando la extraña parecencia.

Nada.

Aguanto la respiración, atenta a cualquier sonido... Pero nada, suspiré aliviada. Recupero la compostura y voy a mi habitación, donde me cambio por una camisa de tiras y un short de deporte que me llegaba hasta los muslos. Apagó la lámpara que está sobre mi mesa de noche, prosigo a acostarme, y taparme con algunas sábanas, estaba haciendo calor.

Cerré los ojos, y dejé mi mente en blanco, antes de caer dormida me vino la imagen de mi amigo sonriendo.

Escuché movimientos en la cocina, abrí los ojos de golpe y espere a que nos vista se acostumbrara a la oscuridad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Escuché movimientos en la cocina, abrí los ojos de golpe y espere a que nos vista se acostumbrara a la oscuridad. ¿Me estarán robando? Lo dudo, no tengo muchas cosas de valor, retengo la respiración, teniendo la falsa esperanza de que así no me escuchará.

El revoltijo de cosas cedió tras varios minutos después, en un acto de valentía (Y adrenalina) me levanto con el corazón en la garganta, palpitando rápidamente. Le rezo a todos los dioses que dicen haber, aún no quiero morir, y comienzo dudar sobre me decisión de salir de la cama y exponerme.

Camino lentamente por el pasillo, hacia el living comedor, con la esperanza de que todo haya sido mi imaginación o que sigo soñando, pasos livianos, tratando de hacer el menor ruido posible. Al llegar a la entrada de ese pasillo, que conectaba con el living comedor, examinó el entorno, parecía estar todo bajo control, hasta que dirijo mi mirada al plato que deje sobre la mesa anteriormente, estaba vacío y jure haber dejado un poco más de la mitad. Comienzo a respirar rápidamente, me tapo la boca para evitar hacer ruido por si el intruso sigue en el apartamento. De un momento a otro me encuentro acorralada en la pared por un cuerpo más alto que yo, ante la sorpresa di un grito ahogado.

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 𝐂𝐑𝐄𝐄𝐏𝐘𝐏𝐀𝐒𝐓𝐀𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora