Amor Unilateral

Él

Debut: Es la primera aparición o actuación en publico de un artista.

¿Se acuerdan que en uno de mis capítulos mencione que aun no estaba lista para describírselos?, pues este capítulo el cuál es el ultimo hablara sobre él.

Es un hombre de 31 años, piel blanca, cabello rubio y largo. Su rostro responde a una forma alargada y degada, sus labios finos, una nariz perfilada y unos ojos azules, su rostro llenos de pecas, especialmente una que más me gusta cercana a su ojo derecho. Un hombre inquieto, inteligente, es ese tipo de persona que conoce de todo, cualquier tema que hables sin duda alguna lo responderá, y si no lo sabe no tiene problema en decirlo, humilde, con metas de emprender, de carácter fuerte, no es muy puntual pero llega jajajajajajaja, sus dedos no tan largos y gruesos, la palma de su mano redonda con el monte venus muy resaltado, su pecho blanco y su espalda llena de pecas, una vez intente contárselas y no terminaba. El acostado boca abajo y ella encima de él sin camisa masajeandole la espalda, pudo notar la suavidad de su piel, sus manos rusticas por su trabajo pero fuertes, su bigote bajo y leve perfilando sus finos labios. Su olor indescriptible, su cabello no tan suave pero mis manos se perdían en el, al besarme su nariz era equidistante a la mía, por lo que mis labios se ajustaban a los suyos. Con un timbre de voz bastante particular, dado que era fuerte y su manera de hablar tan detallada y elocuente, sensual, esa voz que con tan solo cerrar mis ojos y oírla ya quería verlo, al día siguiente, sin abrir mis ojos, mientras estaba durmiendo en su pecho el tan solo escuchar "ahorita me levanto", yo solo sonreía, mientras mi mano derecha se afincaba de su pecho, tomaba un suspiro profundo para que su olor me quedara, todo esto suena lindo ¿no?.

Su mirada cautivadora, pero una mirada que así como transmite amor, también transmite odio, venganza, rencor y maldad, sin ninguna pizca de inocencia. Si él se lo proponía, podía intimidarme para bien y para mal en segundos. La combinación de su mirada y su voz me puede llevar al mayor placer, pero también a la mas grande decepción. La primera vez me tomo por el cuello con su mano derecha, mirándome fijamente a los ojos y me dijo "Esa mirada tuya que parece maldad con un poco de inocencia", para luego besarme y iniciar lo que sería el recuerdo mas bonito en lo que va de mi vida. La ultima vez mientras estaba acostada en la cama, y le comentaba que no lo entendía, porque a veces actuaba como de una manera y me confundía, el me miro fijamente con seriedad diciendo: "No entiendo, ¿que más claro quieres que te hable?, debes ser fría así te cuidas tú", esos 10 a 15 segundos se convirtieron en el recuerdo mas doloroso y odiado en lo que va de mi vida. Su voz sensual diciendo: "Quiero ver si logras distraerme mientras intento fumar" y terminando con su voz mintiéndome sin titubear, creyendo quizá que mis ojos de enamorada no discernían sus mentiras. Ocasiones en las que su cuerpo no merecía su alma, y ocasiones en las que su alma no merecía ese cuerpo. Adonis y atroz a la vez, modesto y altivo, afable y perjudicial, nunca sentí un punto medio, siempre o muy malo o muy bueno. Sus huellas como tatuajes en mi piel que no se podrán borrar ni con el agua del mar, marcas impalpables, una persona a la cual quiero y odio al mismo tiempo. Alguien a quien le deseo el bien, y el mal en algunas cosas para que logre aprender unas que ya yo pase. Es de ese tipo de personas que recuerdas cuando estas anciano, y dices "una vez conocí a un hombre llamado...", así. A mi parecer aparenta más que su edad, unos 35 en promedio, con una gran capacidad de aprendizaje, inquieto en indagar cualquier cosa, analista, poco perseverante en algunos temas, o al menos eso es ahora, no confía prácticamente en nadie y duda de cualquier situación, la que menos piensas... esa también. Alguien que cumple las 21 preguntas en la regla de enamorarte en 15 minutos. Así es Mateo.

Alguien a quien puedo ofrecerle muchas cosas, otras que quisiera darle pero no las tengo, sinceridad y una que otra mentira, amor y frialdad, calidad y no cantidad, apoyo y a veces aislamiento porque es necesario, y por último mi retiro.

A ti, a quien debo cada uno de los escritos hasta ahora, a ti a quien debo algunas marcas en mi piel, a ti a quien entregue un par de lágrimas, risas, suspiros y molestias, tú mi reacción en la Química, mi caos, mi éter, el descubrimiento más inesperado como "La Nebulosa del Cangrejo", el debut de mi vida, mi Paraguas de vidrio, con quien dance La mejor pieza, mi liofilización (lo cual significa que me deshidratas para poder sobrevivir un poco más), mi karma, mi sed, mi sueño y mi opulencia, y con lágrimas en los ojos a la 2:07 am escribo mi ultima palabra, "FIN".

"Si eres lo suficientemente fuerte como para decir adiós, la vida te recompensará con un nuevo hola". –Paulo Coelho