Amor Unilateral

Adagio

De Natalia

Tengo una extraña forma de querer, a veces un tanto exagerada y la gente suele confundirlo con un poco de euforia, solo aquellas personas que han convivido conmigo son capaces de detectar cuando realmente soy sincera, y es que uno de mis mayores defectos a veces es intentar encajar en el mundo de los demás para no soltar a las personas. 

Ponderarte, enaltecerte quizá fue mi mayor error, del cual no me arrepiento para nada al contrario, ¿qué dirás de mi?, quizá soy tan ingenua o tonta para ti que te ríes de mis vicisitudes, diciendo: Si ella supiera que pase por ahí, y no es tan difícil como parece. O puede que mi amor por la escritura y el arte, lo haya llevado tan lejos y sea solo una mujer corriente y dramática. 

No es mi soledad la que busco ocupar contigo, porque siempre habrá una canción nueva que escuchar, admirar aquellas personas que te generan un sentimiento de nostalgia, para este capítulo dejare la melodía que escucho cuando pienso en él, sin letra, todo al criterio de quien la escuche. 

Porque siempre que veo algo innovador busco detallar hasta lo más complejo de la persona, pero me has limitado tanto, que ahora me pregunto: ¿podré decirte algún día esto?, tengo un anhelo, y es que un día sin planearlo, te acerques a mi, y me digas: Natalia, ¿que piensas de mi?.

Sabes que las personas tienden a desear aquello que no pueden tener, eso es todo un reto, y aunque al principio te sentía así, hoy me di cuenta que no se trata de quien gane, o de si te quedas o no conmigo, se trata de que un día quiero verte feliz, tranquilo y estable... Si para eso, yo tengo que irme, que así sea, porque el cariño va mas allá, y siempre hay alguien que quiere más.

Créeme cuando te digo, que mi intención jamás fue ponerte en esta situación, que no hay persona que se repita todos los días tantas veces lo que es mi realidad que yo misma, y que jamás te pediré algo diferente mirándote a los ojos... ¿Que no ves, que aun en medio de mi poca malicia, o mis experiencias vividas aun guardo algo de estupidez?, y nuevamente perdóname por eso. 

Jamás pensé que este libro que escribí para ti, se convertiría en una fuente de trabajo, y es que desde un principio no pretendía ganar, y hoy con casi 1000 vistas, he logrado que la gente te conozca, aunque ¿quien podría reconocerte?.

Comentarios  buenos y malos, criticas buenas, criticas malas y entre ellas "un tanto dramático", y es que solo las personas que han estado en este mismo hueco pueden leerlo, suspirar, reír con nostalgia y silenciarse. 

Como le dije a una persona en estos días con la cual me entreviste para un trabajo, podría escribir sin parar de ti, pero busco apreciar y desahogarme porque es una manera indirecta de decirte cosas que no me dejas decirte en persona. 

Cuando nos vemos, dime amor ¿te reclamo algo?, ¿alguna vez te he gritado?, ¿alguna vez te he dicho: Mateo no me dejes?... Creo que es porque te quiero, y me quiero que no permitiría lastimarme de esa manera. Pero a este punto, ¿como logro yo demostrarte que no es solo tu sexo lo que me atrae a ti?... Se me dificulta tanto. 

Como aquella cafetería que suelo visitar casi todos los sábados por la tarde, y aunque cambiaron el personal y ya el café no sabe igual, lo que me hace repetir el lugar sin pensar no es la rutina, son los recuerdos, es el aire, es la calidez, ojalá algún día pueda llevarte.

Irse de un lugar donde la persona a la que quieres no se siente cómoda, por mi presencia es el acto de respeto que una mujer puede conceder, y esto no lo hago por dignidad aunque la gente puede verlo así. Cómo tus palabras, "Sé fría, eso te permitirá evitarte muchas cosas", pero dime, ¿sabes lo difícil que es ser fría con la persona que quieres?, tú más que nadie debes saberlo, y nuevamente perdóname por quererte así.

El día que estuve en tu casa, y abrace tu espalda mientras preparabas eso que te gusta, pude sentir lo caliente de ella, y aunque esto suene repetitivo, son muy pocas las personas que logran mantener su calidez aun en época de frió, y no en todo eres excepción. No eres cobarde, eres prudente, me he dado cuenta que para ciertas cosas has aprendido a tener tacto, en hablar te has cuidado de cosas, escucharte hablar de tu trabajo en estos días te hizo ver muy sexy, y dirás: ¡Que ladilla con ella, que no entiende que no hay que tener tanto afecto!. 

No es lástima, sino que te doy lo que puedo ofrecerte, esta soy yo, descuidada, paranoica en algunas cosas, inmadura para ti, dramática, impulsiva, me encanta comer, duermo un poco mal, amante del café, nerviosa, y lamento que esto no haya sido suficiente, de verdad discúlpame por haberte hecho pasar esto, cuando ambos estábamos desde un principio en igualdad de términos. 

Si tú piensas que no entiendes porque hay ciertas mujeres que se enamoran de ti, ¿como podría yo saberlo?, y no es que me trates mal, es que no se exactamente que es lo que me hace sentir feliz cuando te veo, a veces imagino que pasarán años, y si es del destino volverte a ver, te vería de la misma manera que ahora, son muy pocas las veces que he buscado desahogarme contigo, y aunque hay ocasiones en las que me has visto y he estado a punto de volverme loca con tantos problemas, te he mostrado mi mejor cara, ¿por que abrumarte con mis problemas?, y si me ves justo ahora cuando escribo esto, fingiré no saber nada, y me comportare como la persona que has conocido hasta ahora, pero a veces el huso horario no es igual entre personas. 

Deseo que desahogues tus deseos en todas las mujeres que quieras, y que puedas obtener aquellas que de verdad te gusten, deseo que comas todo lo que te provoque, que si quieres estar solo que así sea pero no solitario, que sigas teniendo tu independencia como hasta ahora, pero que aprendas a soltar un poco y te darás cuenta que entre dos la carga no es tan pesada, como lo que esperamos de un hijo para un padre, por supuesto que tus hijos estén bien, que aprendas a quererte un poco más y conocerte mejor, muy pocos son los compradores que valoran un producto sin que él que lo  creo lo ofrezca de la mejor manera, que aprendas a expresar cuando sientas algo, que no huyas sino que te mantengas, que no le tengas miedo a cerrar ciclos por muy difícil que parezca, que seas mas fuerte de lo que crees, que logres notar que jamás serás como aquellas personas con las que puedan compararte que eres más que eso, y que no se trata de ser mejor que los demás sino de ser mejor cada día. 

Siempre habrá gente mala que busque dañarnos, siempre tendremos que confiar Mateo aunque sea un poco, y aunque perdemos tiempo, sentimientos y nos lastimamos cuando alguien nos traiciona, aprendemos de eso, y no es ir a la defensiva por la vida, sino a conocer nuevos tipos de personas, pero no todas son iguales. Nuevamente disculpa si todo esto lo hablo desde una mujer sin experiencia y joven en comparación con las tuyas, quizá me haga insensata por eso.

Adagietto 5th Symphony de Gustav Mahler, es la sinfonía que escucho cuando quiero recordarte,  porque en ella se puede expresar el tacto en ciertas cosas, lo malo, lo bueno, lo triste y lo incierto de tu personalidad. Y que al pasar de los años si aún esta página existe, releas este libro y al menos te quedes con la sensación de como hiciste sentir a una mujer de 23 años.

Decirte te quiero a ti es importante para mi, pero quizá signifique para ti una muestra de afirmación de mis inseguridades contigo,  y que es necesario decirlo para que que tú me creas, y la verdad es que no... Sé que lo sabes, y sé también que no hace falta que me veas llorar, gritar o pelear para que lo sepas y por ello lo callare. Sólo una sola vez te lo he dicho despierto, y fue aquella vez que nos vimos,  y muchas veces mientras duermes, para que tu espíritu me oiga. 

Espero no haberte causado muchos problemas, y te lo he dicho esta siempre será tu morada, si tienes un problema búscame, si te sientes mal, si quieres desahogar tus penas hazlo, que yo tratare en medio de mi imperfección tratarte bien y atenderte. Pero aunque quiero decir algo más, por la prudencia que me has enseñado lo callare, a no ser que los meses me traicionen y se note. Valiente como me pediste que fuera si yo decidía un sí.