17. Unα hıstorıα escαlofrı́αnte ミ☆

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Xiaojun no estaba seguro de qué pensar ya, por un lado, la desconfianza que le provocan los humanos quiere mantenerlo alejados de Kun y cualquier conocido suyo, por otro, las insistencias de Hendery y Yangyang le dicen que debe bajar la guardia y permitir la entrada de Kun a su vida.


El humano tiene ideas erróneas de él, contrario a lo que todos piensan Xiaojun no guarda sentimientos de odio hacia los humanos. Su cara siempre le ha llevado a situaciones incómodas —una vez, recuerda con gracia, Hendery pensó que estaba enojado con él y que el motivo de su insistente mirada era el de planear su muerte, cuando la realidad es que estaba pensando que su cabello lucía ridículo ese día—, y es cierto, él no ha hecho mucho por desmentir la imagen que ha proyectado, no obstante, reconoce que el humano ha cuidado bien de ellos, les ha consentido cuando no tenía obligación alguna.


No es una mala persona, pero ese será su pensamiento secreto, porque hacérselo saber implica hablar usando más de tres palabras seguidas, cosa que no sucederá jamás.


Es otro día en que Kun debe trabajar, resulta alarmante que cada vez sea más difícil no sonreír cuando lo despeina antes de salir del departamento, sus padres jamás son tan afectuosos.


— Hoy Ten no podrá venir, ¿Estarán bien solos? —Les pregunta el humano una vez que han terminado de comer.


Ya es costumbre que los tres lo acompañen hasta la puerta, nunca tan cerca como para ser vistos cuando el humano la abre, es un poco vergonzoso también ser parte de esto. Cuando esos dos se burlan diciéndole que también quiere recibir atención del humano, él los amenaza con romper las cosas de la colección de Hendery y no ayudar a Yangyang cuando haga sus travesuras.


— Claro que sí, ¿No confías en nosotros? —Yangyang hace una expresión decepcionada cruzándose de brazos.


Xiaojun ni siquiera confía en ellos mismos, Hendery no se encuentra de buen humor porque el amigo de Kun faltará hoy, debe darle un punto a su favor, aquel joven era entretenido y jugaba siempre con ellos. A medida que los días pasan sus camaradas se acostumbran también a la presencia aleatoria de ese joven, en especial Hendery, lo cual le aflige pues nunca se sabe cuándo dejarán de verlo. No quiere que ninguno de ellos pase por otro momento amargo de abandono.


— Voy a ignorar tu pregunta. —Es lo que responde el más alto.— Ya saben, si algo sucede, llamen.


Sus dos amigos regresan al sofá de la sala apenas el dueño del departamento aparta la mano de sus cabezas, estaban viendo una película muy interesante sobre humanos con poderes mágicos, uno de ellos es parte de una profecía o algo así, la abuela decía que no creyeran que nada de esas cosas en la televisión, pero a Xiaojun le gustaba creer que había magia de ese estilo para los humanos y sus frágiles vidas.


La abuela también era frágil, quizás la magia le habría permitido quedarse con ellos.


— ¿Xiaojun? —Los ojos del humano están fijos en él, con cejas un poco alzadas en duda cuando su demonio más callado no sigue el paso de sus amigos.


Kun es un humano, no confía en él, toda su especie es vulnerable y él es demasiado apegado a pesar de que intenta no serlo. Su única familia, una familia real por quien se preocupe y no lo vea como un accesorio para la guerra, son esos dos tontos en el sofá. Pero Kun también está ganándose su lugar, y Xiaojun teme que no pueda seguir apartándolo, porque el día en que comience a esperar a que Kun regrese a casa y les platique sobre cómo le fue hoy en su trabajo, también temerá que sea otra persona que los abandone.

𝗤𝗶𝗮𝗻 𝗞𝘂𝗻 𝘆 𝘀𝘂𝘀 𝗱𝗲𝗺𝗼𝗻𝗶𝗼𝘀 】⛧ミ { Lukun ; Tendery ; Xiaoyang }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora