Crónica de un desastre anunciado

Capítulo 50.

6 AÑOS DESPUÉS:

NARRADOR OMNISCIENTE:

Lola y Vicent no podían dejar de mirar aquel artilugio sobre la mesa de café, aquel artilugio era un predictor, que marcaba que el resultado era positivo, Lola a día veintidós de enero del año 2052 había recibido la descolocante noticia de que iba a ser madre junto a su novio, encima si no se apuraba en nacer el futuro primogénito de la pareja sería escorpio, algo que horrorizaba a Lola.

César no paraba de reírse, le hacía ilusión eso de tener un sobrino, y saber que no sería el primero en hacer abuela a Macarena, algo que había manifestado que de momento no le hacía ilusión.

Lola aún no había cumplido los veinticinco, y Vicent tampoco los veintisiete, y se sentían algo abrumados con tanta responsabilidad, Lola acababa de empezar su trabajo como consejera y logopeda de La Salle, un colegio/secundaria de élite, al igual que el Justo Sierra y le comían las dudas de como sus nuevos jefes se tomarían la noticia de que nada más empezar estuviera embarazada, eso también asustaba a Vicent, trabajaba en una tienda de informática al lado del edificio donde se habían establecido juntos hace dos años, su sueldo estaba bien, les daba incluso para pequeños caprichos en aquel año que Lola estuvo en el paro, pero ahora serían tres, ambos gracias a sus padres estaban acostumbrados a una buena calidad de vida, si Lola se quedará sin trabajo podría ser una gran catástrofe en el mundo de ambos, y eso le creaba ansiedad.

-Bueno, lo mismo es un falso positivo- les intento animar Alicia, que estaba presente, junto con César.

A esta pareja no le iba nada mal, Alicia hacía unos meses había empezado a trabajar en el mismo hospital que su padre, solo que ella era enfermera psiquiátrica Practicante y él era practicante, algo que hacía que su hija cobrara más que él y le hacía sentir tremendamente orgulloso, César había sacado un disco con su padre hacía unos años, tuvo un éxito moderado, gusto, pero tampoco fue que lo lanzará al estrellato, algo que agradeció en el futuro, porque su verdadera vocación era la actuación, tras varios papeles insignificantes en series incluso menos importantes consiguió un papel secundario en una película que estaba dirigiendo un gran director de México, intimo amigo de su madre. A la pareja le iba bien, eran vecinos de Lola y Vicent, porque los mellizos eso de la codependencia aún lo llevaban fuerte, aunque poco a poco el vínculo se iba volviendo más sano, César poco a poco ha acabado controlando a su trastorno, casi no lo daban ataques, y cuando le daban sabía llevarlos bien.

-No creo, les traje el test más caro y efectivo del mercado- sentenció César mientras negaba con la cabeza.

-Pues olvídate de la boda, que lo sepas- gruño Lola mientras se cruzaba de brazos- Que fuerte-

-Hombre, si coges sin condón es lo que tiene, se produce el milagro de la vida- sentenció Alicia- Aunque si no quieres tenerlo, mejor que para traer a un bebé desgraciado al mundo abortas-

-No, yo no podría hacer eso, o sea, lo respeto y lo apoyo, pero personalmente yo no puedo- habló nuevamente Lola.

-Pues es tu decisión, yo estaré de acuerdo elijas lo que elijas- habló Vicent mientras colocaba su mano sobre la de Lola.

Lola se sintió bastante acompañado por su compañero sentimental en estos momentos, y eso la tranqulizaba, la calma con lo que se lo estaba tomando Vicent, cuando normalmente era un manojo de nervios.

-¿Vas a decir que estas embarazada?- preguntó César.

-Supongo que en la cena de mañana- resopló está- Voy a ser la primera del grupo, tócate los huevos-

-Nada babe, habrá que darse prisa en darle primitos a ese bebé- César besó a Alicia junto a una sonrisa.

-Ni de coña- sentenció Alicia- No hemos viajado todavía todo lo que quiero-