Casual love.

Capitulo 23: ¿Que te pasa Chloe?

-Hola- sonreí bajando un pequeño escalón

-Hola Chloe, cuánto tiempo- le di dos besos

-A decir verdad es cierto, ya no querías ni verme - dije en tono de ofendida y ambos reímos

-He estado ocupado, dentro de tres días sabremos si tenemos trato o no

-El gran abogado Alexander Vandamme nunca perderá - me senté en la parte de atrás con él- Hola Marcus ¿Qué tal? ¿Todo bien?

-Sí señorita hacía tiempo que no la veía ¿Usted bien?

-Pues muy bien - sonreí pensando

-¿Qué ha sido de ti?- miré a Alexander

-Pues como siempre- alcé los hombros - No hay nada nuevo

-Y tu trabajo ¿Qué tal?- miré sus ojos- Comentaste que tú jefe no era malo del todo, no te hará limpiar mucho cuando dices eso ¿No?- sonreí negando

-Es muy bueno un poco difícil de tratar pero se le coge cariño

-Pues como al mío supongo- mordí mi labio pensando "si supieras que es el mismo"...

-Al tuyo se le ve un poco más serio

-Un poco pero por varios problemas que tuvo- asentí

-Ya- solté

-¿Ya?

-Quiero decir que tendrá problemas todos tenemos y aunque sea rico tendrá que tener - sonreí nerviosa- ¿Y qué es de él?

-Pues ni idea supongo que estará en casa como siempre, es muy aburrido allá donde lo ves

-¿Lo es?- asintió y bajamos del coche- Hasta luego Marcus, pues yo no lo veo así - dije dándome la vuelta y abrigando mi cuerpo por el frío

-Sólo a veces, bueno ¿Quieres que vayamos a cenar ya?

-Como quieras o si quieres damos un paseo - ya que estábamos por el centro

-Está bien, ¿Quieres mi chaqueta?

-Oh no tranquilo no quiero que pases frío

-Toma yo no tengo frío

-Sólo llevas una camiseta debajo, seguro que tendrás frío y por cierto es la primera vez que no llevas traje ahora que me fijo

-Cógela Chloe y sí me gusta tu atención - sonrió miré chaqueta y negué

-A la vuelta no te la negaré pero ahora quédatela tú y ya cuando comamos y entremos en calor me la das - sonreí

-¿Cenamos aquí?- miré el restaurante de comida china

-Me parece muy bien, entremos hace tiempo que no como

-Pues vamos- abrió la puerta y pasamos

-Que calentito se está aquí- me quité la chaqueta de pelito y nos sentamos en la primera mesa que vimos

-Pues se está muy bien es cierto- cogimos las cartas y poco después pedimos de comer -Bueno cuéntame ¿Qué tal el amor?

-Pues- me puse un poco colorada -Como siempre

-Ese como siempre ¿Cómo es?

-Normal, enfocada en mi trabajo y en mi meta

-Pero ¿No tiene tiempo para el amor?- suspiré

-Siempre hay tiempo para el amor pero es demasiado complicado- sonreí