-Papá estoy muy nerviosa-dije mirándolo a los ojos, los primeros acordes iban sonando
-Yo también cariño, estoy que me va a dar algo- cogió mi mano y la apretó- ambos sonreímos y respiré hondo. Agarré su antebrazo y las puertas se abrieron, nuestra canción estaba sonando y mi corazón latía al ritmo de ella. Aún recuerdo aquel día que me dijo que apagase aquella canción, y siempre la atribuimos a nosotros y aquí está sonando ahora mismo.
"Cuando sea tan viejo y pierda la memoria todavía
te miraré como la primera vez. muchos lo dicen y todo
es mentira pero a pesar de todo te amaré. Eres la razón
para mejorar en todos los caminos, la belleza se va y el
dinero se gasta pero nuestro amor no desvanece..."
Mis ojos miraban fijamente a los suyos, estaba llorando al igual que yo. Mi padre apretó aún más fuerte mi brazo al darse cuenta de la situación, lo miré y también estaba llorando al igual que mamá y Rebecca. Yo sólo escuchaba la canción y era como si todo el mundo hubiese desaparecido y sólo estuviésemos él y yo mirándonos a los ojos. Me paré frente a él y mi padre me entregó a él no sin antes susurrarle
-Cuídala-sonreí al escucharlo, él se limpió las lágrimas antes de cogerme la mano y ambos nos colocamos de frente mirándonos fijamente
-Queridos hermanos y hermanas, estamos todos hoy reunidos ante el altar para que Dios garantice con su gracia vuestra relación. Cómo me habéis pedido iremos a lo importante -todos en la Iglesia rieron al igual que él y yo, mis manos temblaban. -Unan sus manos y reciten sus votos- nos agarramos de la mano y me miró fijamente
-Yo, Adam Pearson te quiero a ti Chloe como esposa y me entrego a ti , prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad; en la salud y en la enfermedad y así amarte todos los días de mi vida. Prometo ser tu ángel de la guarda cada día y cada segundo de mi vida, prometo mirarte como el primer día y prometo cuidarte hasta el último de los míos -sonreí con algunas lágrimas en los ojos
-Yo Chloe Edwinson, te quiero a ti Adam como esposo y me entrego a ti, prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad; en la salud y en la enfermedad y así amarte todos los días de mi vida hasta el último. Prometo aguantarte en tus días malos -la gente reía-Y ayudarte a superar todo, a ser tu confidente y guardar miles de secretos-suspiré mirando sus ojos-Prometo mirar esos ojos marrones como los miré el primer día que los vi
-El señor bendiga estos anillos como símbolo de vuestro compromiso- Adam agarró mi mano derecha
-¿Quieres ser mi mujer? Ahora y siempre
-Sí quiero-me colocó el anillo, agarré el que le correspondía a él-¿Quieres ser mi esposo? Ahora y siempre
-Por supuesto, sí quiero- agarré su mano y coloqué el anillo
-Yo los declaro marido y mujer, puedes besar a la novia- me quitó el velo y cogió mis mejillas
-Lo conseguimos
-Siempre supe que lo íbamos a conseguir- dijo antes de unir nuestros labios de una forma tan dulce que mi cuerpo se retorció de la felicidad, en ese instante se nos olvidó todo sólo eramos él y yo besándonos por primera vez como marido y mujer. Escuchamos los aplausos y caminamos juntos por el pasillo y al salir miles de granos de arroz cayeron por parte de los invitados. Nos dirigimos hacia el banquete mientras nos arreglaban un poco y nos hacían unas cuantas fotos ya que los invitados se habían ido
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Casual love.
RomanceLa vida de una estudiante es dura y mucho más cuando no tiene dinero para permitírselo y tiene que hacer un doble esfuerzo para poder conseguirlo incluso haciendo cosas que nunca antes pensaste. Esa es la historia de nuestra querida Chloe, intentab...