◎Mαɾʋҽʅ αƈαԃҽɱу◎

culpas y Navidad

La enemistad entre los antiguos amigos crecía a medida que avanzaba la semana. Las culpas volaban, y casi siempre recaían en el genio. Quien había tenido la idea de atacar la Academia y dejarles sin luz. Nadie quería asumir su propia responsabilidad.

—Ya estoy arto, si no queríais venir, no haberos apuntado. ¡A nadie le parecía mala idea antes! —Se defendió el genio mientras se cruzaba de brazos. Esa vez, nisiquiera contaba con el apoyo de su pareja.

—Oh vamos, todos sabíamos que iba a pasar. Nunca tenemos que seguir los planes de Tony. —Comentó Loki aún más enfadado que antes.

Ninguno de los presentes añadió nada más.

—¿Por que no mejor enterrais el hacha de guerra? —Susurró Bruce, pues se daba cuenta que aquella discusión seguramente acabaría en mayores si no la ponian final.

—Por que están expulsados por seguir su plan. —Murmuró Clint. En un principio el iba a asistir a la venganza, pero en el último momento decidió que no.

—Barton, no jodas. Tu también estarías en nuestra situación de no ser por que en el último minuto decidiste no venir. —Acusó Thor.

—No, haber. No había sitio en la furgoneta. —Se excusó el arquero.

—¡Como sea! Esta discusión no va a ser útil. Solo nos va a separar más. —Suspiró Wanda.

Y el silencio volvió a reinar en aquel grupo de amigos. Nunca duraba demasiado, pues siempre había alguien que dijera la última palabra, o abriese de nuevo el tema. Pero iba a empezar las navidades, solo faltaban dos días para el final de las clases y ellos seguían sin poder asistir.

—Solo quedan dos días y por fin dejaremos de estar expulsados.

En el campo, los tres jugadores de fútbol americano se dedicaban a mirar el entrenamiento de sus compañero. Sam y Bucky permanecían en silencio, sabiendo que su amigo rubio seguramente estaría preocupado por su puesto como capitán.

—Seguramente no me vuelvan a admitir como capitán. —Suspiró entonces.

—Es probable. Como capitán tienes que ser la voz de la razón, y la verdad es que no pensaste demasiado. —Murmuró Bucky, quien recibió un severo golpe de Sam.

—A si no ayudas. Steve, tu siempre has mantenido la calma y te has comportado de la forma más madura posible. Por dejarte llevar una sola vez por tus emociones no creo que te sustituyan de porvida.  —Le animó Sam.

Pronto, Thor se unió al grupo. Parecía realmente enfadado, y eso no era normal en el. Siempre había sido un chico afable y sonriente.

—A ver, ¿Que ha pasado? —Suspiró Steve.

—Nada. Que seguimos expulsados, y los nervios empiezan a romper amistades. Y al paso que va... Relaciones.

—No creo que llegue a tanto. —Opinó Sam.

—¿No? Wanda y Natasha están enfadadas. Natasha está de lado de Tony, y Wanda está de lado de que es el culpable... Y Loki está de lado de Tony, y yo no.

—Vaya. —Se limitaron a decir.

—Solo dos días más... —Suspiró Steve. —Solo dos, y ya verás como todo se tranquiliza.

Pero no fué así. Cuando solo quedaba un día para que las clases terminasen, todo se descontroló. 

—¡Admite de una maldita vez que fué tu culpa! —Gritó Peter Q.

—¡Callate piloto de cuarta! —Gritó Rhodes.

—¡¿Piloto de cuarta!? —Repitió ofendido.