Capítulo 8

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Chanyeol tomó el cabello ajeno entre sus manos como tuviera la intención de sujetarselo con una coleta, de este modo podía controlar la cabeza femenina a su gusto. Esa posición le facilitó usar su boca para masturbarse, le causaba mucho placer meterle gran parte de su pene en la boca ajena, e incluso le provocaba arqueadas.

Estuvo así varios minutos, aunque para ella fue una eternidad: le dolían las mandíbulas por el grosor de su pene, pero debía se soportar el dolor, debía de hacerlo por Kyungsoo, por salvarle. (__) tenía un plan en mente y estaba segura que no fallaría en absoluto, así que vendió su cuerpo al mismo diablo.

Después de que usara la boca ajena a su antojo, Chanyeol le ordenó que se deshiciera de su atuendo, cosa que hizo con rapidez, y mientras éste se ocupaba de quitarse su propia ropa, volvió a ordenar que se situara a cuatro sobre la cama. Enseguida Chanyeol optó por un rol más dominante, ambos estaban completamente desnudos. Se dirigió hacia ella y se colocó detrás suya mientras masajeaba profundamente su cintura.

—Te gustará, estoy seguro— dijo él.

—Relaja tus putas hormonas de una vez, señor Loey. Y acaba con esto pronto.

Chanyeol recorrió la espalda femenina con sus dedos, besó sus hombros, y mientras le mordía el cuello, fue introduciendo lentamente sus dedos en la vagina. Un leve gemido fusionado con suspiro salió de la boca de (__) ante tal acto tan ardiente pues el alto respiraba a propósito cerca de su oído.

—Te llevaré al infierno— susurró con una voz grave. Movía sus dedos con suma lentitud, los introducía y sacaba constantemente a la misma velocidad hasta sentirlos húmedos. —Estás completamente mojada— añadió sacando sus dedos finalmente.

(__) reprimía lo más posible para evitar darle el gusto, así que por ese mismo motivo tuvo que morderse el labio inferior. Pero una inesperada y feroz acción provocó que ese esfuerzo se fuera rápidamente directamente a la mierda. Chanyeol se posicionó correctamente, sujetó el cabello ajeno y la penetró en un solo acto. Ella, ante aquello, no pudo evitar soltar un pequeño grito de placer y dolor.

Chanyeol no se movió por un momento. —No, no— inclinó un poco su cuerpo hacia su oreja. —Te recuerdo que aquí nadie va a oírnos..., si tienes que gritar, gemir o llorar, hazlo— añadió.

Él comenzó con movimientos lentos pero a su vez ejercía cierta presión al tocar fondo. (__) estaba excitadísima, realmente estaba haciendo un buen polvo, pero ni siquiera quería pensar en algo tan vulgar. Siguió un tiempo con esa dinámica, metidas fuertes pero lentas. Chanyeol salió de ella y se levantó unos segundos para coger algo, volvió a la cama y se incorporó introduciendo de nuevo su pene.

—Tengo algo divertido para ti, ¿te gusta este succionador de clitoris?— extendió su brazo y se lo mostró. —Es el último modelo— añadió.

—Loey...— mencionó después de suspirar intentando controlar sus impulsos.

—Tranquila, estoy en ello— murmuró mientras situaba el succionador correctamente. —Quiero que grites mi nombre— añadió.

Chanyeol activo el aparato al mismo tiempo que iniciaba un nuevo movimiento. El placer que estaba proporcionado no era ni siquiera medio normal. La espalda femenina se arqueó ante el disfrute corporal, cosa que excitó al mayor. (__) sentía su clitoris muy atendido, ardía.

—Uhm..., Loey— gimió en voz baja a la vez que agarraba la sábana con fuerza. Retener el placer era casi imposible.

—¿Qué ocurre, (__)?— preguntó aún sabiendo a qué se debía. Entraba y sacaba su polla cada vez con mayor intensidad. —¿Te gusta? Dímelo, quiero oírlo, (__)— él sonrió. —¡¡Dímelo, joder!!— gritó por excitación y dominación.

—Es..., patético— dijo con un hilo de voz, devolviéndole la sonrisa a pesar de saber que no la vería.

Chanyeol mordió su labio inferior y apartó el aparato de su clitoris bruscamente, lo que provocó un gemido en seco por parte ajena; por un segundo sintió la necesidad de masturbarse. El placer había tomado el control de su cuerpo..., un error que sin duda tomaría en cuenta para la próxima vez. El mayor salió de ella y giró su cuerpo, ahora ambos estaban frente a frente; la identidad de Chanyeol se ocultaba bajo una simple y sensual máscara. Éste se detuvo por unos segundos a mirar el rostro ajeno, por un momento permaneció tan embobado por ella que temió a seguir follando por gusto en vez de por venganza. Una venganza aún enigmática.

Ante esta inesperada sensación, Chanyeol respondió con cierta furia. Tensó la mandíbula y entró en ella de una sola vez, sujetando fuertemente la cintura. Por cada embestida, un suspiro y gemido salía de la boca de cada uno; sus pechos se movían al compás. Yeol inclinó su cuerpo para poder alcanzar los labios ajenos, y la besó con ansias, desesperación, placer y odio. (__) intentó sujetar el cabello ajeno pero éste se lo impedió sujetando sus manos con fuerza.

Chanyeol aumentaba cada vez más la velocidad, ambos cuerpos estaban bañados sobre una fina capa cristalina de sudor..., no faltaba mucho más. (__) sintió cómo una ola de calor invadía su cuerpo, estaba exhausta. En el momento que el pene de Yeol volvió a tocarla una vez más, soltó un pequeño grito y gemido acompañado de su nombre al llegar al tan esperado orgasmo.

El mayor, ante tan inesperada acción y la acogedora calidez y presión que le regaló (__) al llegar al climax, jadeó la embistió un par de veces más antes de expulsar el semen en su interior. Gustoso, ardiente y placentero.

RUN  | Chanyeol y tu | 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora