Reading [ CS ]

II

—¿Quién era él? —preguntó Kyungsoo, refiriéndose al chico con el que Jongin hablaba.

—Bueno, como ya escuchaste, su nombre es Chanyeol. No lo conocía hasta hoy, lo hice caer al correr y le ayudé a recoger los libros que terminaron en el suelo por mi culpa y entablamos una corta conversación sobre un libro que está leyendo. Es todo —dijo encogiéndose de hombros.

—Es lindo —reconoció Kyungsoo y Jongin negó con diversión. A Kyungsoo todo el mundo le parecía lindo.

Kyungsoo era un chico de 17 años que, a diferencia de Chanyeol, le gustaba estar rodeado de personas. Claro que a veces le gustaba pasar tiempo a solas, pero le gustaba más estar en compañía de sus mejores amigos, Jongin, Sehun y Baekhyun.
Kyungsoo era lo suficientemente popular en la escuela para ser conocido por gran parte de los alumnos de cada grado. Solía llevarse bien con todos y le gustaba entablar conversaciones porque no era fanático del silencio, lo que lo orilló a crear varias amistades.
Siempre fue un chico curioso, y le gustaba aprender cosas nuevas, le gustaba estudiar, e incluso daba tutorías a veces.
Sus padres se divorciaron dos años después de que naciera, pero aún así mantenía una buena relación con ambos, y también con su hermano mayor, aunque no tenía tanto contacto con su papá y su hermano al vivir con su mamá.

—Cambiando el tema —dijo Jongin—. Si le pido a Sehun que vaya a una cita conmigo, ¿crees que aceptará?

—Pienso que sí, pero no puedo asegurarte nada. Deberías preguntarle en el almuerzo.

—No lo sé. ¿Imaginas que me rechace? Adiós amistad y adiós amor.

—No seas tan extremista. Sehun aprecia mucho tu amistad, no creo que dejaría que se estropeara tan fácilmente.

—Sí, también pienso eso. Pero no hay que descartar las posibilidades.

—Sólo pregúntale —dijo volteando los ojos—. Piensas mucho las cosas, Kai, deberías aprender a arriesgarte más sin tener que pensar en todo lo que pudiera pasar después. Sólo hazlo y ya.

—De acuerdo, lo intentaré —dijo finalmente, después de suspirar.

—Así me gusta —dijo satisfecho—. Si me disculpas, voy a ir al jardín trasero a tomar un poco de aire fresco sin tener que escuchar el bullicio de los demás.

Dicho y hecho, llegó al jardín trasero y se sentó debajo de un árbol. Sacó de su mochila su jugo de mango favorito y le dió un trago.
Sólo entonces se dio cuenta de que no era la única persona ahí. El chico con el que Jongin había hablado, Chanyeol, se encontraba sentado debajo del mismo árbol que él, sólo que del otro lado. Se encontraba tan inmerso en el libro que tenía en sus manos, que no se dio cuenta de su presencia, incluso después de haber hecho tanto ruido con su mochila.

—Claudia está harta de derrotas. Le duelen cada día un poco más. Y empieza a germinar en ella la envidia, la semilla del odio. Ha sido ella quien lo vio primero, el chaval mayor, el chico con moto, el hombre
en el que ha posado su primer deseo de mujer —lo escucha leer en murmullos apenas audibles.

—¿Qué lees? —lo interrumpió y Chanyeol lo miró con el ceño fruncido.

—¿Te importa?

—Sí —dijo sonriendo y el otro volteó los ojos, volviendo a su lectura—. ¿Puedes seguir leyendo en voz alta?

—¿Puedes dejar de joder?

—Sólo quiero saber la historia también —dijo encogiéndose de hombros.

Chanyeol suspiró y volvió a voltear los ojos. Lo miró por unos segundos, frunciendo el ceño, y luego regresó sus ojos al libro para seguir leyendo.

—Se lo ha dicho a la amiga, ha confiado en ella, me gusta, acompáñame, me da vergüenza, pero es Abigail quien se convierte en el centro de todas las miradas. Al principio lo hace de un modo inconsciente, no puede evitarlo, es más guapa, se ha hecho mujer antes, sus pechos, su cuerpo, pero poco a poco decide que a ella también le gusta, que no puede hacer nada si él se ha fijado en ella y no en Claudia —tomó aire y continuó—. Intercambian miradas, alguna palabra suelta, quizás los números de teléfono. Tiempo después, Abigail y Claudia regresan para celebrar el cumpleaños de Abigail. Le ha confesado que esa noche se atreverá, lo besará, dejará que la explore con sus manos, acaba de cumplir catorce, quién sabe si le dejará algo más, su madre ya había follado a esa edad (no sabe que su padre la violó). Abigail no percibe la humillación en el rostro de Claudia (si siquiera la adivina), sólo piensa en ella, tú quédate con Gustavo, paso, es un pesado, llévatelo para que podamos estar solos, por favor, hazlo por mí, yo lo haría por ti. Claudia sabe que miente, pero claudica al fin, como siempre hace cuando se trata de su amiga. Al rato, Abigail recibe una llamada y sale del local para escapar del ruido, Claudia deja a Gustavo con la excusa de ir a buscar a la amiga. La localiza fuera, le dice que tiene que hablar con ella, las dos van hacia el parque, allí discuten, allí se increpan, allí la abofetea, allí descarga sobre ella un torrente de dolor, de rabia, de frustración, la empuja y Abigail se golpea la cabeza al caer —Chanyeol se vio obligado a poner su separador entre ambas páginas y cerrar el libro cuando sonó la campana que anunciaba el final del receso.

—¿Claudia ha matado a Abigail? —pregunta Kyungsoo, perturbado—. ¿No se supone que eran amigas? ¿Qué pasa antes de ello? ¿Cómo descubrieron que Abigail estaba muerta?

—La encontraron en un parque —respondió cortantemente—. Los amigos son así, te apuñalan por la espalda.

—Yo tengo buenos amigos —dijo Kyungsoo sonriendo.

—¿Sí? Pues qué suerte —respondió desinteresado y comenzó a guardar sus libros en la mochila.

—Por favor no continúes sin mí, me he quedado con la intriga. ¿Puedo venir mañana a la misma hora?

—Da igual. Yo comienzo a leer desde que empieza el receso. Tu problema si vienes a tiempo o no.

—Al menos no te has negado a leer conmigo —dijo Kyungsoo sonriendo con victoria—. ¿Está bien si vengo todo los recesos?

—No.

—Vendré entonces. Sólo a escucharte leer —dijo sonriendo—. Me llamo Kyungsoo.

—No recuerdo haber preguntado.

—No importa, quería que lo supieras. Tú eres Chanyeol, ¿verdad?

—¿Eres algún tipo de acosador o algo así? ¿Cómo sabes mi nombre? —preguntó fastidiado.

—Soy el amigo que buscaba a Jongin cuando chocó contigo. Escuché tu nombre y luego Jongin me lo dijo confirmó —Chanyeol se sonrojó ante la mención del moreno, pero trató de disimularlo.

—Como sea —murmuró y salió de ahí para dirigirse a su aula.

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Sí, bueno, la actualización no fue tan lenta como tenía pensado que sería, pero da igual... creo jajaja
Probablemente publique un capítulo por cada capítulo nuevo que escriba, así no me quedaré sin contenido para publicar en caso de que llegue a entrar en un bloqueo creativo (espero que no suceda, pero puede pasar). Debido a esto, puede que las actualizaciones sean más rápidas, si bien me va.
En fin, gracias por leer. Espero tengan (o hayan tenido) un gran día.

—Sootiny.