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XIII

Chanyeol y Minseok se habían quedado charlando el resto de la tarde, hasta altas horas de la noche, sobre su pasado y su presente. Lloraron juntos, recordaron y también rieron juntos.
Chanyeol descubrió que Minseok tenía un novio llamado Yixing y que estaban pensando comenzar a vivir juntos. Sin embargo, cuando le contó al mayor lo que había sucedido cuando su padre se enteró de que salía con un chico, decidió que se saldrían de esa casa lo antes posible y que rentarían un apartamento juntos, mientras tanto, ambos irían a dormir al apartamento de Yixing.

A la mañana siguiente, Chanyeol tomó el autobús a casa de Kyungsoo. Se sentó junto a una ventana, se colocó los auriculares y contempló las calles repletas de gente a las 7:21am.
El cielo estaba gris y hacía mucho viento, lo que le hizo pensar que llovería más tarde y, en parte, le entristeció más de lo que ya estaba.

Al llegar a la estación que le correspondía, bajó del autobús dando las gracias y deseándole un buen día al conductor, caminó unas cuantas cuadras y tocó el timbre de la casa del menor al estar frente a ésta.

Se dio media vuelta, rascando su nuca mientras miraba a los niños que correteaban en el parque de en frente, y a los segundos sintió que era rodeado por unos delgados brazos. Volvió a darse media vuelta, sabiendo que se trataba de Kyungsoo y lo correspondió con fuerza a su abrazo.

Las lágrimas comenzaron a salir de los ojos del alto cuando escuchó los apenas audibles sollozos del menor. Se meció levemente de un lado al otro mientras acariciaba los suaves cabellos de su pequeño y dejo un beso sobre estos.

Pocos minutos después, cuando Kyungsoo pudo tranquilizarse un poco, se separó del mayor y sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas al darse cuenta de que él también lloraba.

—No llores, Channie —susurró con la voz entrecortada, limpiando las lágrimas de las mejillas del alto, y éste mostró una sonrisa temblorosa, para después acercar su rostro al de Kyungsoo y besar sus labios cortamente.

—Entremos —susurró Kyungsoo después de sorber la nariz—. Hace frío aquí afuera.

—¿Y tu mamá? —preguntó cuando entraron.

—Le pedí que se quedara con papá porque yo tengo escuela hoy —dijo cabizbajo, caminando a su habitación seguido de Chanyeol—. Es irónico que, de toda esta terrible situación, algo bueno sucediera. Al parecer papá y mamá están saliendo de nuevo, y me hace feliz, pero no puedo sentirme del todo contento por lo de Seungsoo —dijo recostándose en la cama.

—No es para menos —dijo Chanyeol, recostándose junto a Kyungsoo.

—No merecía esto, debí haber sido yo y no él —susurró.

—Por favor no digas eso, bebé —dijo con voz suplicante y los ojos llorosos—. Seungsoo se convirtió en otro hermano mayor para mí en poco tiempo, me hizo ver cosas que yo ignoraba, y perderlo ha sido lo más doloroso que me ha sucedido hasta ahora. Pero perderte a tí, Kyungsoo —susurró con la voz rota—. Sé que no sería capaz de soportar un dolor tan inmenso.

—Lo siento, Channie —susurró en un sollozo.

Chanyeol se acercó más a Kyungsoo para abrazarlo, enterró su nariz en sus cabellos y suspiró.

—Todo mejorará pronto, lo prometo —susurró Chanyeol.

Mientras Kyungsoo lloraba en silencio, aún abrazando a Chanyeol, éste tarareaba una suave canción, intentando que el menor lograra tranquilizarse un poco.

No pasó mucho tiempo para que Kyungsoo se quedara dormido. Chanyeol se separó levemente de él para poder mirarlo y acarició su mejilla con suavidad. Tampoco tardó mucho en quedarse dormido, pues ver a Kyungsoo durmiendo tan tranquilo, hizo que su corazón sintiera algo de alivio y eso le permitió dormir.

Cinco horas después, Kyungsoo despertó antes que Chanyeol, fregó sus ojos con las yemas de sus dedos y miró el rostro dormido del mayor. Sonrió levemente al ver sus labios semi abiertos que dejaban salir suaves ronquidos y suspiros.

Después de tomar una gran bocanada de aire, se sentó en la cama para buscar su celular y se quejó en silencio al ver lo tarde que era.

—Channie —susurró moviéndolo suavemente—. Despierta, Chanyeol-ah.

—Mmm —se quejó—. ¿Qué hora es? —preguntó adormilado.

—Es casi la una —dijo después de bostezar—. Tenemos que desayunar algo, muero de hambre.

—Espero que sepas cocinar porque yo no —dijo el mayor con un deje de diversión.

—No es tan difícil, vamos —susurró poniéndose de pie y ambos salieron de la habitación.

—¿Cómo te sientes? —preguntó el alto cuando entraron a la cocina.

—Tranquilo —admitió sin mirarlo, sacando leche del refrigerador y Chanyeol lo abrazó por la espalda.

—¿Seguro? ¿te sientes un poco mejor?

—Sí —dijo sonriéndole levemente para tranquilizarlo—. Necesitaba llorar contigo y lo hice, eso fue suficiente para calmar un poco el dolor.

Chanyeol no pudo evitar sonreír ante la respuesta, pues él se sentía de la misma forma.

—¿Puedo decirte algo y no pensarás que soy raro? —preguntó después de algunos minutos de total silencio, ya que se había sumido en sus pensamientos.

—Sí —respondió sonriendo con curiosidad, aún sin mirarlo, pues estaba ocupado cocinando los panqueques, y su espalda seguía pegada al pecho del mayor.

—Te amo.

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Aaaaaah había extrañado tanto actualizar, pero ya no tengo capítulos así que tengo que agarrar inspiración, y con los p*tos cólicos menstruales nada más no podía.
Ojalá lo hayan disfrutado <3

—Sootiny