Noche estrellada; Así es como quiero morir

01. bonyurg (o como sea que se escriba, no sé, no soy francés)

lunes 8 de agosto de 2021

acabo de volver de un viaje a Francia, pasé un año entero ahí, muchos dirán que es casi como un sueño estar en ese país.

No lo es, todos huelen como si no se bañaran. 

Me metieron a athena temis, es de esas escuelas pretenciosas que por desgracia luce como que la colegiatura fue bastante justa.  (Mencionarlo es casi como si necesitaras un cliché estúpido del primer día de clases, pero mi mente solo puede repetir lo que pienso para matar los nervios) 

 Estaba nervioso. Mi mamá me había dejado en la entrada hace más de 10 minutos y yo aun no podía entrar, pero siendo sincero, sentía más nervios al estar parado, soportando las miradas de los alumnos que empujaban la puerta para entrar y me miraban curiosos o sin expresión alguna. 

Dios sabe que espere hasta el último minuto para entrar.

Todo era muy limpio y pulcro, los colores que predominaban eran neutros y lisos. Si los siguientes pisos no tienen un minimo de color, me voy a matar.

Después de pedir algunas indicaciones, llegué a la oficina del director, donde me dijeron que esperara afuera y que alguien vendría a enseñarme la escuela. Al cabo de un rato llegó alguien que en el resumen; era guapo.

—Hola, un gusto, mi nombre es Henry Sato—. ¿Quién te pregunto?

—El gusto es tuyo—le devolví el saludo—¿soy el único al que enseñaras la escuela? —. pregunté con cierta curiosidad.

—Sí—Respondió con rapidez. Lo observé en silencio durante unos segundos para que entendiera que quería saber por qué—. Los de primer semestre son guiados por los representantes de clase de los de tercero, 1A, es guiado por 3A, 1B es guiado por 3B y así hasta la D. Tú estás ingresando a quinto semestre, claramente los de tercero no pueden hacerse cargo. 

Me explicó apresurado, y empezó a mostrarme la escuela. Necesitaría arrancarme los ojos si veía otro tono en una escala de grises. Un poco de beige no los mataría. Fuera del marrón natural de las puertas de madera todo era plano. Seguramente visto por alguien más: Elegante.

Al menos los uniformes tienen un poco de azul. 

Mi parte favorita fue el jardín, era casi mágico, las flores, los árboles, todo era perfecto. 

Como si todo el color lo hubiese robado el jardín para sus flores.

Conocía a una persona que amaría esto.

Al finalizar el recorrido Henry me dio algunos folletos de la escuela y me guio hasta la clase que tenía en ese momento.

—Bueno aquí finaliza esto, aquí tienes tu horario—tras decir esto me entregó una hoja de papel con mis clases de toda la semana—. compartimos especialidad, así que voy a asegurarme de que no faltes, pilluelo. Tu especialidad es administración en recursos humanos —escuchar la palabra ''pilluelo'' desbloqueo una nueva expresión que no sabía que tenía.

—Voy a asegurarme de no faltar, solo si prometes no usar la palabra pilluelo de nuevo—. bromee con un tono falso de amenaza.

—Está bien, lo prometo—dijo poniendo su mano derecha en su pecho mientras ponía una voz dramática—¿nos vemos en el descanso?—. Preguntó, a lo que yo solo asentí y me despedí.

(...)

 Un par de clases y el timbre para el receso había sonado. Un montón de adolescentes—incluyéndome— habían salido como si les dijeran que había una araña de 2 metros en el aula, y no la había. Pero la víbora de la maestra que tal.

No, espérate, no puedo andar insultando a la maestra. 

En Francia podía hacerlo porque la maestra no hablaba español.

 Aunque, puedo insultarla en francés.

Gracias a mi mami por está variedad lingüística.

Llegué a la cafetería de la escuela, estaba llena de alumnos (lo normal) pero ya me estaba arrepintiendo de venir. 

 llevo 2 minutos parado en la puerta viendo a la nada, pensando idioteces. A este paso voy a joder mi vida social.

 Empiezo a caminar directo a las mesas, buscando una para sentarme, hasta que veo a Henry haciéndome señas desde de su mesa, así que me acerco a él.

—Hola—. me dice apenas llegó.

—Hola—.Le respondo con una sonrisa, sentándose.

—¿Te puedo preguntar algo? —. Pidió apenas me senté.

—lo acabas de hacer—. argumente mientras llevaba una papa a la boca.

Él puso una mueca y pregunto otra cosa

—¿Te puedo hacer dos preguntas? —. Enunció con una sonrisa divertida en su rostro.

—Las acabas de hacer—, Su cara no tenía precio así que seguí comiendo mientras intentaba no burlarme, dicen que si respiras profundo no te dan ganas de reír. Miami me lo confirmo.

—Está bien, ¿te puedo hacer 4 preguntas? —. dijo rodando los ojos como si buscara paciencia, estaba pensado en rendirme, pero no.

Después de todo, ¿dónde quedaría mi orgullo?

—Acabas de hacerla—. yo tenía una sonrisa ladina al decir esto.

—¿Cuando? —. suspiro exasperado.

—Ahora—, dije ahora soltando una risa divertida. Pero al ver su cara de cachorro regañado me rendí—Está bien, pregunta —. su cara pareció iluminarse en cuanto dije eso.

—¿Por qué elegiste esta escuela?Es muy exigente pero en tus papeles decía que tú elegiste estar aquí—. Soltó de inmediato.

—Porque aquí están mis amigos—. respondí en seco.

—Entiendo, claro, pero ¿Tú porque quieres estar aquí?

...

—Eso es adorable, Leo —. dijo una voz familiar detrás de mí.

Sonreí al instante

...

¿Ya vieron que rojo blanco y sangre azul tendrá película? casi se me baja la presión cuando lo escuche

edit: no me gusto tanto