Capítulo 21: El Funeral. (Alternativo)

97 5 3
                                    

Era un día cálido, el cielo se hallaba con pocas nubes, había un ligero viento.

Era un día perfecto para quizá salir a pasear o quedarse en casa hasta una hora considerable viendo Netflix.

Era un día perfecto... Pero no lo era para un funeral.

Mucho menos un funeral de cazador.

Y peor si la cazadora que aquella mañana se volvería cenizas para que su alma no quedara penando era tu prima. O, en el caso de Castiel, el amor de tu vida.

Estaban en un pequeño bosque cercano al búnker. Los hermanos Winchester terminaban de preparar todo, el cuerpo de Victoria se hallaba ya listo. Sólo estaban terminando de acomodar los troncos.

Ninguno decía nada, mantenían una expresión seria. Pero claro que les dolía todo lo que pasaba.

Incluso llegaban a sentirse culpables, hasta cierto punto. Si hubieran atendido la llamada de Cas a tiempo, quizá algo se hubiese podido hacer para salvar la vida de la nefilim. Pero el "hubiera" no existe.

El viaje de Hellven City al búnker había sido pesado. Dean tuvo que mantenerse al margen y procurar que sus emociones y sentimientos no lo hicieran desconcentrarse mientras iba al volante en el Impala. Sam simplemente venía pensativo mientras que a ratos veía el cadáver de Victoria que Cas llevaba en brazos en los asientos de atrás. Castiel, durante todo el viaje, no soltó una mano de Vic, el tacto era frío, y eso destrozaba al ojiazul por dentro. Ninguno de los tres habló, no hasta que llegaron al búnker al amanecer y el mayor de los Winchester hizo mención de que tenían que preparar el cuerpo de la castaña.

Castiel veía de lejos cómo Sam y Dean preparaban todo, no quería acercarse. Ciertamente, le dolía. ¿Y cómo no? Victoria estaba muerta.

Le partía el alma tan solo con ver la escena.

Cuando los Winchester por fin terminaron de acomodar los troncos, Dean sacó su encendedor y miró a Sam, él le devolvió la mirada. Ninguno quería ser el que lanzara el encendedor. Dirigieron su mirada hacia atrás, donde estaba Castiel.

El ojiazul bajó la mirada y se alejó. No, mucho menos él quería hacerlo.

El mayor de los Winchester, con todo el dolor del mundo, sacó la llama del encendedor y lo lanzó hacia los troncos.

El fuego empezaba a crecer, las llamas empezaban a envolver el cuerpo de Victoria.

Sam y Dean observaban cómo el fuego comenzaba a consumir el cadáver de su prima.

Mil recuerdos corrían por la mente de ambos: el día que Vic llegó con ellos y con su padre, los primeros casos que compartieron, las risas, las bromas... Todo aquello ahora no eran más que simples recuerdos.

-Te vamos a extrañar, enana -comentó Dean viendo cómo el cuerpo de Victoria se consumía lentamente.

Sammy aprobó el comentario asintiendo con la cabeza.

-Sí... Fuiste la mejor. Compartimos muchos buenos momentos juntos -dijo el menor.

-Quizá tus últimos días no fueron los mejores, que todo lo que te tocó vivir antes de esto fue demasiado pesado. Pero... -el mayor hizo una pausa para tomar aire, tenía los sentimientos a flor de piel -. Vic, fuiste muy valiente por todo lo que hiciste.

-No fueron una, dos o tres veces... Un montón de veces te dedicaste a salvar la vida de quienes te rodeaban...

-Y esta vez no fue la excepción...

Los hermanos Winchester dirigieron su mirada hacia donde se suponía que estaba Castiel. Pero el ojiazul había abandonado el lugar.

Era comprensible. Vic significó tanto para Cas que la partida de la nefilim le dolería profundamente, quizá incluso más que a los hermanos.

Supernatural: Un Amor Angelical.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora