Capítulo 1: Obsesion.

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Pov. ______:

Ya no quería ir a trabajar, se me hacía indeseable la hora, de saber que me toparía con unos de mis empleados de alto grado, lo sé, todos me dicen lo mismo:

- pero ¿por qué lo no despides _____?

Pero no puedo, lamentablemente no. El maldito tipo se llama Ronnie Radke, hijo de un gran empresario y para más, su padre era colega de mi padre; debo reconocer que no esta nada mal el tipo, para ser un mujeriego lleno de tatuajes.

Hostigante, indeseable, molestoso, sexy y pervertido, había algo de él, que me llamaba la atención, además de sus tatuajes, yo creo que es su actitud de chico malo, pero, será.

Llege a mi trabajo una hora atrasada, pero, no le demos valor, soy la principal; mi padre, me heredó la empresa antes de fallecer, y ahora me encuentro, embaucada en el puesto de superiora, que gana millones al mes.

Entro al acensor tranquilamente, mientras me quito mis lentes de sol.

- Ronnie: vaya vaya, pero si aquí está mi jefa.

Me mira con una sonrisa coqueta y una mirada lujuriosa. (Debo manifestar que, este hombre me calentaba muy rápido, aunque lo odiaba)

- ____: Buenos días, Ronnie, ¿vas llegando tarde o estabas en la recepción haciendo papeleos, o elogiando a las empleadas?

Se acerca y me acorrala contra la pared del ascensor, comienza a pasar sus labios por mi cuello, mientras que con una mano libre comienza a subir mi falda poco a poco.

- Ronnie:¿ te he dicho cuanto me gusta sentir el olor de tu piel?- Me mira con una sonrisa lujuriosa poniéndome nerviosa cada vez mas.

- _____: Ronnie aléjate de mi, si alguien nos ve...

No alcanze a terminar cuando comenzó a besarme, pasaba sus manos por mis muslos,  inicié jugando con su pelo y de pronto sonó el tiembre del ascensor avisando el último piso, reaccioné y alcancé a alejarlo de mi; arreglé mi ropa y mi cabello antes de salir.
Me imagino el gran espectáculo que, hubieran presenciado mis empleados, de no ser, por ese bendito sonido.
Salgo tranquila del ascensor y me dirijo a mi oficina, se acerca Érica, mi secretaria y me da un itinerario con todo lo que se aproxima en la semana:

- Érica: buenos días señorita, _____, aquí están las reuniones que fueron anotadas.

- ______: gracias, Érica. - Es una persona muy cordial y afectuosa, la adoro, es casi como una amiga para mi persona.

El día paso rápido, hasta que llegó la noche, no es de costumbre permanecer hasta tarde, como hubo mucho que realizar en la empresa, decidí dejar que los empleados saliesen temprano. Creí que estaba sola, pero no era así, alguien toco la puerta, debe ser uno de los empleados de aseo:

- ______: adelante.

- Ronnie: preciosa, ¿que haces aquí tan tarde? - Me mira con dulzura.

- ______: vaya, se nota que sabes leerme la mente, la misma pregunta te hago a ti, se supone que le dije a "todos" los empleados, que se retirasen temprano. -Lo ultimo lo destaque entre comillas con mis dedos. Lo miraba seria y comenzó a ponerse nervioso.

- Ronnie: Eeh, y-yo? Nada, pues como crees, jeje. Solo venía a ver a mi princesa, Érica, me dijo que te quedarías sola hasta tarde y decidí hacerte compañía.

- _____: jódete Ronnie, no me vengas a interrumpir ahora que estoy terminando.

Guardo todo en mi pendrive, Ronnie me da mala espina, sospecho de que quiere dar un golpe bajo. Comienza a acercarse pausadamente.

- Ronnie: me encanta hacerte enfadar, preciosa.

Me mira y comienza pasar una de sus manos en mis piernas, haciendo que me recorra un escalofrío en todo mi cuerpo, se apega más a mí y por inercia,  me levanto y lo tiro al sillón.

- ______: te dije, que te jodas.

Lo miro airada, pero, él toma mi muñeca y me sienta a horcajadas sobre sus piernas, cierta parte de mi mente, ansiaba que hiciese eso.

- Ronnie: vamos preciosa, yo se que te gustaría tenerme en tu cama.

Lo ultimo lo dijo tan excitado, mientras pasaba una mano en mi pierna derecha y la otra la tenía fija en mi trasero, empezó por mi debilidad, me daba pequeños besos en el cuello mientras bajaba a mi blusa y comenzó a desabrocharla.

- ______: Ronnie detente.... Ronnie.

Apenas podía hablar, los besos en el cuello hacían que se me hiciera irrealizable el hablar; terminó de desabrochar mi blusa y contempló la imagen que tenía en frente suyo:

- Ronnie: no sabes cuanto, deseaba hacer esto.

Me miraba con una sonrisa pícara y llevo una de sus manos a mi brasier, me empezó a sobar lentamente, sobre la tela de éste, haciendo que se me escaparan pequeños gemidos inaudibles, lleve mis manos a su pelo y comencé a divertirme con el.

- Ronnie: preciosa, deberías quitarte la blusa, esta estorbando y el brasier también.

Me tomó de la cintura haciendo, que me moviera en círculos sobre su miembro, mientras apretaba mi trasero, no podía pensar, quería alejarme de él, pero, el solo hecho de querer estar en la cama, me hacía seguir, es un pensamiento de hetera, pero, anhelo eso.

Iba a comenzar a quitarme la blusa, cuando derrepente sonó mi iPhone, lo iba a tomar cuando Ronnie me interrumpe.

- Ronnie: no contestes, estamos en medio de algo importante. - Dijo a mi oído suplicando.

Me aleje de él y tome el celular, mire la pantalla y me estaba citando Austin, mi mejor amigo, desde pequeños, jamás lo dejaría colgado en una llamada así que contesté:

- ______:Austin, hola ¿Qué sucede?

- Austin: ¡¿Que qué sucede, ______?! ¿Qué no ves la hora que es? ¿Acaso lo olvidaste? Hoy íbamos a ir a un pub a divertirnos...

Lo último lo dijo con un poco de melancolía.

- ______: oh Austin, lo siento, me voy corriendo ahora mismo a tu casa y nos vamos juntos ¿ok?

- Austin: si no llegas aquí en 30 minutos, hechare a la basura todo tu maquillaje ese, el de Coco Chanel.

- ______: ya, Austin, me voy ahora, adiós.

Colgué y me di cuenta de que Ronnie me miraba celoso, con rabia.

- ______: Eeeeh, Ronnie yo me voy ahora y antes de que yo salga tu te vas o si no llamare a seguridad.

- Ronnie: me voy, pero, sólo si me dejas ir contigo a ese pub.

Me observaba con molestia, los celos lo consumían por dentro.

- _____: y tú ¡¿Quién te crees?! No eres mi novio y te pones autoritario, sal de aquí ahora, Ronnie, si no quieres que llame a seguridad y no estoy bromeando.

Me miró entre irritado y abatido, me levanté abrochando los botones de mi blusa, no pude evitar sonrojarme al recordar lo que sucedió hace un momento.

- Ronnie: nos vemos, bonita.

Me agarra el trasero y me da un beso en el cuello, antes de salir se gira y me giña un ojo. Un suspiro de alivio se me escapa, tomo mis cosas y me voy corriendo al estacionamiento, sin antes pedir a los guardias que impeccionen todas las cintas después de que todos los empleados saliesen.

Simple pero ... Difícil decisión. (Andy Biersack, Ronnie Radke y tu❤️) ||Book 1|| {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora