Gabieleven (Pol, Joan)

Comida familiar.

Estamos hablando Marc, Ulises, Pol, Tània y yo cuando aparecen por la puerta Gerard y Bruno.

- Hombre, buenos días hermanitos. - Se burla Pol al verlos. - Escucha Gerard, ahora toca filosofía con tu padre.

Todos reímos ante su comentario excepto Gerard.

- Que os den tíos. - Dice enfadado.

- Venga Geri, no te lo tomes así. - Le digo tocándole el hombro izquierdo.

- Hombre, si quieres me puedes ayudar a estar más relajado. - Dice él y es cuando me doy cuenta de que ha cogido mucha más confianza, ya no es el mismo chico tímido que cuando empecé en este instituto.

- ¿De qué vas? - Oigo que dicen Ulises y Pol a la vez y en mi cabeza solo suena una alarma.

- Tranquilito, ahora a tu hermana la protejo yo. - Le dice Pol a mi hermano.

- No puedes protegerle de la persona que más daño le puede hacer. - Contesta él. - Solo te lo diré una vez, mira a tus espaldas.

- Se ve que no me conoces. - Dice Pol intentando intimidar a mi hermano, cosa que no sucede y yo intento que todo esto acabe cogiendo su brazo. - Yo tengo lo que quiero y lucho por lo que me hace falta, yo aprendí a perder pero no a darme por vencido.

- Lo dices como si fuese un premio que puedas ganar pero no es un simple objeto. - Le reprocha mi hermano. - Que te quede claro que antes de ser tu novia fue mi hermana.

- Sigo siendo tu hermana. - Ulises me mira y sale del aula enfadado. - Joder.

Pol también se queda mirando la puerta y estrecha mis hombros.

- ¿Qué me he perdido? - Pregunta Gerard.

- Sí, me parece que hay algo que no me habéis contado. - Dice Marc. - ¿O no Tània?

- Se ha ido en cuanto Bruno ha llegado. - Informo a Marc y entra Merlí.

- Silencio bípedos. - Mientras Merlí deja sus cosas nosotros nos vamos sentando. - ¿Alguien sabe quienes son los filósofos escépticos? ¿Nadie? Qué extraño. Los escépticos basaban su filosofía en la practica de la "epojé". "Epojé", suspensión del juicio. Estar atento a las cosas que pasan pero no pronunciarse sobre la realidad, esa era la filosofía de los escépticos.

- Ya pero, ¿la filosofía no es al revés? - Dice Pol. - Quiero decir, no es implicarse en la realidad, cuestionarla...

- Sí. - Dice Merlí colocando sus pies sobre la mesa. - Pero esta filosofía es justamente lo contrario. Los escépticos no aspiraban a nada más que al silencio para no tener que separarse de la realidad de las cosas que pasan, se limitan a observarla. Los escépticos miran con atención, examinan, consideran los hechos y callan. No emite juicios, "epojé".

- ¿Por qué no podré tener un hermano escéptico? - Pregunto en voz baja pero los de mi alrededor logran escucharlo y se les escapan unas pequeñas risas.

- Ya, - Dice Pol después de reírse. - pero el "epojé" ese no funciona con las cosas fuertes, ¿no?

- Bueno..., - Reflexiona el profesor. - si pasa alguna cosa grave... pues... cuesta más practicar el "epojé", sí. Bueno... y... tal vez tengas que afrontar la adversidad y no distanciarse demasiado de los hechos y... reflexionas y... y... eh...

- Merlí, ¿estás bien? - Pregunta Pol lo que ninguno se atrevía a preguntar.

- Sí. - Responde él. - Ahora vengo, Gabi, ¿Y Ulises?

- No lo sé. - Le digo a Merlí antes de que salga del aula.

- Pues estamos solos chavales. - Dice Uri.