C A S I PERFECTO | 𝓴𝓽𝓱.

☁️⃟᭝࿑ - 36

La vez en la que Jae fue muy feliz durante su infancia, fue cuando era su cumpleaños número seis.

La verdad es que nunca necesito grandes fiestas, además de no tener los suficientes recursos para obtenerla, aún así tener a sus padres era el mejor regalo.

- ¡Jae! - su madre la tomaba de la mano para llevarla a la mesa. - tú papá y yo trabajamos mucho para poder comprarte un pastel.

- ¡gracias! - Era tan sólo una niña.
Una niña que no sabía lo desconocido, no sabía lo que era tristeza, en ése momento en lo único que creía era la felicidad.

Y fue arrebatada.

- ¡feliz cumpleaños a ti! ¡feliz cumpleaños a ti! - el canto se escuchó por toda la casa, la niña sonreía al ver a sus padres y sus amigos.

Amigos que eran padres de Jimin.

Su único amigo.

Y bueno, sobre Jisoo eso era otra historia, ahora lo que importaba era el momento.

Recordaba las veces en la que su padre la llevaba a las montañas para poder observar bien las estrellas.

- ¿recuerdas que te dije que quería abrir un restaurante Jae? - la niña asintió. - estoy trabajando en ello, conseguí un nuevo trabajo, tu mamá también, esa es mi meta, pero antes de eso, haré lo posible para que seas feliz.

- Yo soy feliz papá.

¿Lo es?

Y los últimos años de vida de sus padres jamás se arrepentiría de haberlos tenido el poco tiempo.

Sus padres habían desaparecido, por lo que la vio obligada a quedarse con su amigo. Mientras jugaba con Jimin, la madre de éste mismo le dijo que sus padres habían sido encontrados muertos. No de esa manera, pero lo hizo.

Y ahí conoció la depresión.

¿Qué podía hacer una niña? Nada.

Trabajo por si sola, sus cumpleaños no valieron la pena desde ése momento, porque nada era felicidad, lo único que le quedaba era sobrevivir.

Su adolescencia llegó, a pesar de todo nunca dejó de estudiar, al menos en algo le iba bien.

- lo haré por ti padre.- y miraba siempre la foto dónde se encontraba ellos tres en un pequeño puesto.

Que suerte tienen algunos.

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- ¿Jae? - aquella voz conocida la hizo detenerse. - ¿Puedes decirme que esta pasando con Taehyung y contigo?

- oh, Jung Hoseok. Yo no puedo hacerlo, no tengo los ánimos ni de seguir aquí. - antes de darle un última mirada hizo reverencia.

- puedo creerte Kim Jae. Te escuché discutiendo con ése tal Mark, como siempre atrayendo problemas, pero no hablo de ti, hablo de él, no malinterpretes mis palabras.- no conocía la parte tan seria de él.

- Yo...bueno, no sé que hacer.

- Voy ayudarte Kim Jae, no te conozco perfectamente, pero se que estás diciendo tu palabra. Y si mando a mis hombres en busca de esto.- hizo una pausa.- Con una condición.

- No quiero entrometerlo en mis problemas, además, no puedo aceptar su ayuda aún cuando se que no hay respuesta. ¿Cuál