Mark mira más allá de lo físico.
Las emociones.
El tacto.
Los sentimientos.
El era capaz de percibirlo pero de una forma peculiar.
Colores. sonidos. sabores. el era capaz de asignarle a cada emoción un adjetivo.
Pero al ver a ese muchacho sus...
En los baños se escuchaban pequeños chasquidos, por suerte los baños de chicos siempre estaban solos a la hora de la salida. Mark se rogaba a él mismo para no gemir, sus mejillas estaban coloradas, calientes, a punto de explotar y sus piernas temblaban; estaba sentado en la tasa del baño observando a Jackson de rodillas; una risita maliciosa adorno los labios del contrario mientras otro suspiro salía de la boca de Mark.
— Me gusta verte así.— confesó el contrario. Rojo y rojo, negro y negro; como si esos dos colores se mezclaran, Mark también veía color vino, el color de la pasión.— Es la primera vez que haré esto así que no me presiones, Markie-pooh.
Le dedico un guiño mientras seguía con su mano sobre el miembro de su novio, moviendo rápidamente este para excitarlo cada vez más.
— ¿Qué color soy? — Preguntó a lo que rio bajito ya que no era momento para preguntar esas cosas y menos cuando le estaba tocando. Mark le había dicho a su novio que podía ver el color del alma de todos pero el color suyo era muy diferente ya que cambiaba por alguna razón, Nunca podía estar seguro de su color ya que cambiaba constantemente.
— N-negro.— se forzó a no entrecortarse pero fue imposible debido a las estimulaciones. Ante la respuesta rio nuevamente y miró la punta levemente hinchada por la excitación. Estaba feliz con la respuesta, Le gustaba saber que color era.
El tiempo paso y su cabeza no dejaba de moverse de arriba hacia abajo, por suerte no había entrado nadie, ya que había muy pocas personas a esa hora en el Instituto; se podía dar el lujo de gemir con total libertad.
Jackson salió del cubículo primero para enjuagarse la boca con agua mientras él se quedó acomodando su ropa interior junto al pantalón de su uniforme, salió también del cubículo y rasco su nuca.
— disculpa por hacerlo en tu boca.— sabía que eso era nuevo para ambos, no esperaba que Jackson escupiera su esencia y saliera a los lavabos. Hizo un gesto de restarle importancia con su mano mientras escupia en el lavabo restos de semen ahora mezclados con saliva y agua.
— No te aguantaste, No fue tu culpa.— habló secando su boca con las mangas de su suéter.
Salieron del baño como si no hubiera pasado absolutamente nada. Pasaron por los pasillos vacíos hasta llegar hasta la parada de autobuses. Llegaron a casa del mayor, su madre estaba en casa, había llegado temprano.
— ¿Mamá?
Preguntó al oler el guisado de carne de puerco. Olía demasiado delicioso, a ambos se le había abierto el apetito.
— Hola hijo; Hola Jackie.— saludó con una suave sonrisa.— acabo de terminar de hacer el almuerzo, tome un plato y les servire.
Ya estaban comiendo, el estofado que su madre le hacia siempre le había encantado.
— Vaya señora Tuan, le quedo delicioso.— la adulo el novio de su hijo chupandose los dedos.
— Mamá siempre ha sido buena en la cocina.— la adulo su hijo haciendo que la mujer tuviera un pequeño sonrojo. Su color chispeante siempre le daba animos, su mamá siempre era muy bella en todos los sentidos.
Hablaron un poco más sobre el asunto de los exámenes y las calificaciones, La pareja lavó los platos haciendo sonreír a la señora Tuan, ya que se sentía cansada, se fue a su habitación para descansar.
Terminaron de lavar los platos y se fueron a la habitación, ya habían tenido un rato juntos en la escuela y lo habían hecho para tener tiempo de estudiar juntos y que sus hormonas no les ganarán.
— ¿Cuando fue la primera guerra mundial?— preguntó sosteniendo el libro de estudios sociales.
— Creo que 24 de julio de 1914— respondió un poco confundido, sabía que se había equivocado en algo.
— Error, 28 no 24, lo demás esta bien. — le corrigió amablemente. Mark chasqueo la lengua y asintió anotandose mentalmente que era 28 y no 24. Música parecida a la de los elevadores se asomaba en los oídos de Tuan, era aburrido estudiar pero era necesario hacerlo.
Mark se extraño al notar que el aura de su novio era gris de la nada, al parecer se había aburrido y no lo culpaba, estudiar era muy aburrido.
Pasaron unas tres horas en las que sólo se escuchaban los datos repetitivos de los libros y algunas risas debido a unos pequeños errores.
— Quiero descansar ya.— Susurró un cansado chico recostandose en su hombro.— hemos estudiado mucho, Mark, quiero dormir.
Cerró el libro ahora de ciencias y observó a su novio acostado en la cama, se acercó para luego acostarse a su lado, Jackson se posó sobre su pecho y beso este suavemente.
— Últimamente pienso mucho en China.— le informó apretando más su cuerpo, le había agarrado nolstalgia desde que Mark le hizo recordar su antigua vida en China.
— ¿Por qué? — acarició los cabellos de su nuca con suavidad.
— Es que extraño todo de haya, mi antigua vida, mis amigos, los deportes, No lo sé, todo es muy diferente a como lo recuerdo.— realmente no sabía como sentirse sólo sabía que tenía nolstalgia por su país natal.
— ¿Por qué no vas en vacaciones? No están tan lejanas.— Jackson le miro atentamente y se acercó a sus labios para darle un pequeño beso.
— No, no quiero ir.— Se veía un poco apagado y no le gustaba verlo así, su aura seguía siendo gris y eso no le gustaba, le gustaba verlo muy feliz y no así de triste. Mark ni siquiera tuvo tiempo de abrir la boca cuando siguió hablando.
— No me atrevería a dejarte sólo, ahora que te conocí no pienso dejarte ni un sólo día.— se miraron atentamente, era lindo que se mirarán.
— Yo menos, Jackie, te amo mucho.— y se besaron nuevamente, besarse los hacia amarse cada vez más.
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Estoy actualizando seguido por que estoy inspiradaaaaaa.
